Jeon Jungkook lleva viviendo un año con él amor de su vida Kim Taehyung. Sin embargo, cuando él menor de ellos se ve involucrado en un accidente, ya nada volverá a ser como antes.
¿Podrán superar la cruda realidad? ¿Será verdad que el amor lo puede...
Después de la confesión de Jungkook, al día siguiente lo esperé en la entrada de la escuela, tan ansioso que a penas lo divisé me dirigí rumbo hacia él. Dándome cuenta de lo nervioso y tenso que se pone cuando al fin estamos frente a frente, explotando un millón de sentimientos en mi interior que no soy capaz de describir.
Tomo su mano suavemente sin soltar el agarre, avanzando hasta desviarnos en la calle aledaña a la escuela, donde nadie pueda vernos y agradeciendo que Min no se encuentre cerca, así no corro el riesgo de ser interrumpido.
Hace un momento me abandonó en la entrada, cuando el capitán del equipo de básquet se le acercó para intentar reclutarlo una vez más.
Tras detenerme luego de caminar en silencio, volteo para quedar frente a él sin tener claro lo que le diré ni él por qué me parece demasiado irreal, como una utopía de la cual claramente no quiero despertar. Intento coger el valor suficiente para comenzar a emitir lo primero que se me venga en mente, pero se me adelanta una vez más.
—¿Quieres que te explique lo de ayer?, yo... yo no sé qué decir. Entiendo que todo es extraño para ti pero si no soy tu tipo de chico ideal, lo comprenderé. Es más, si quieres hacemos como que nunca leíste eso y volvemos todo a como estaba ¿Si?, quiero decir tu...
No logro procesar nada de lo que está saliendo de su boca, porque en vez de responder algo con palabras dulces o darle la confesión de amor que he practicado una y otra vez durante todos estos años, termino posando mis labios sobre los suyos para silenciarlo.
Nos besamos con parsimonia, sin lograr apartarnos cuando su boca se deja abrazar por la mía, es nuestro primer beso, nuestro primer mágico beso.
Nuestras lenguas se funden en un vaivén lleno de tonalidades misteriosas, es dulce y cálido. Lo he estado esperando por años y ahora es tan real, que no doy abasto de la felicidad que siento y una vez que nuestros labios se apartan, lo observo detenidamente mientras aún tiene sus ojos cerrados, para luego abrirlos poco a poco hasta fijar su mirada junto a la mía, una vez más.
—Lo sabía, no podía estar tan loco como para imaginarme todo ¿Verdad Kim?.
Asiento ante su pregunta, necesito que las palabras me salgan pero no puedo lograrlo, deseando que no sólo lo sienta si no que lo escuche. Por eso cierro mis ojos sin despegar mi mano de su cintura, respirando profundo para luego volver a observar su bello y delicado rostro.
—He estado esperando por ti, estoy tan jodidamente enamorado que no sé si tengo permitido estar tan feliz como lo estoy ahora. El gusto es mío Jeon Jungkook, llevémonos más que bien. —un lágrima se posa en su ojo derecho, por lo que llevo mi mano a su rostro y con el dedo pulgar, hago retiro de ella.
Me regala una pequeña sonrisa para luego abrazarme, sintiendo como todo encaja a la perfección al tener al fin entre mis brazos, a la persona que siempre he querido sostener. Mi amado Jeon Jungkook.
★☆★
El tiempo transcurre entre citas, clases, estudios, evaluaciones y esas cosas. Y ya para mitad de año nos encontramos siendo novios oficiales ante la vista y la envidia de los demás en la escuela. Claramente de ser un personaje terciario en la función pasé a tomar el papel principal, sólo por ser el dueño del corazón del jovencito de la película.
No me molesta, estoy a gusto, estoy donde quiero estar y con quien quiero estar. Lo amo y él me ama, no hay mayor felicidad que pudiese haber deseado porque él es simplemente la cura para todos mis males.
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Aprovecho esta nota en forma de recordatorio, nos queda menos de 24 hrs de votaciones en Mwave Music Chart, los chicos necesitan esto y más, sigamos apoyándolos.
Si bien vamos ganando por ahora, la brecha no es mucha así que no se confíen, creen más cuentas o pídanles de favor a sus cercanos que les presten sus cuentas para votar.
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