Sing: Ash y Johnny, una impensada relación

Capítulo Final: El show

- Aún no encuentro el canal

- Sigue buscando, ya lo encontrarás

El padre de Ash gruñó al oír esas palabras, ya había estado desde hacía largo rato con el control remoto en su mano intentando encontrar el canal que transmitiría el show del teatro Moon. Quedaban casi 5 minutos para que comenzara y aún no podían encontrarlo. Ash les dijo que iban a transmitir el show por televisión según palabras de Buster, pero no sabía tampoco que canal lo haría, eso era algo que Buster había gestionado pero que no logró decirlo ya que eso se logró concretar casi a última hora.

- ¡AHÍ ESTÁ! – gritó de pronto ella

Él se devolvió los dos canales que había cambiado luego de que ella le dijera eso. Sonrió aliviado al haber por fin encontrado el canal.

En la pantalla se veía una vista general del teatro mientras enfocaba a parte del público, todas las butacas se encontraban ocupadas, incluyendo la de los palcos. En la parte inferior de la pantalla decía "En vivo desde el teatro Moon". Misma imagen que estaban transmitiendo en la prisión. El padre de Johnny se encontraba junto a sus compañeros de celda mirando un televisor colocado junto a la pared. Se encontraba ansioso para ver lo que su hijo, junto al resto del grupo, iban a presentar. Un guardia, quien ya había logrado tomar confianza con ellos, se encontraba junto a los barrotes mirando con curiosidad hacia el televisor. Su conducta había sido impecable desde que regresó voluntariamente a prisión y, a pesar de que su condena fue aumentada por su fuga, había logrado algunos beneficios por buen comportamiento, incluyendo la autorización para ver el show, e incluso le habían proporcionado a él y a sus compañeros de celda unas bolsas de patatas fritas y un par de latas de soda. Tanta fue la emoción del padre de Johnny que incluso le ofreció algo de esos bocadillos al guardia, quien, tentado por ello y la buena amabilidad de los prisioneros, no solo aceptó de aquellos refrigerios, sino que aceptó entrar un rato a la celda con ellos.

Eddie se encontraba nervioso, su puesto de tramoyista se encontraba al lado izquierdo del escenario. Se encontraba oculto con el telón, la parte del extremo, donde jamás se veía aunque éste estuviera completamente descorrido. Había asomado su cabeza un par de veces a través del extremo del telón, quedó sin aliento al ver a todos los animales que se encontraban esperando. El teatro estaba absolutamente lleno, se habían vendido todas las localidades casi en tiempo record. Las luces del auditorio seguían encendidas, él era el encargado de apagarlas mientras se ponía a preparar el resto de sus tareas, pero tenía que esperar la señal. Continuos murmullos podía oír del telón, muchos espectadores se encontraban ansiosos esperando a que por fin el telón comenzara a descorrerse para que el show diera inicio. En el escenario había un micrófono justo en el centro, atrás había un fondo de una ciudad nocturna con luces encendidas. Del lado opuesto lograba ver el pasillo que llevaba a las cabinas de ensayo y las escaleras que llevaban a la oficina de Buster. Todos los participantes del show se encontraban ahí. Todos se encontraban estrechando las manos y dándoles palmadas en la espalda a Pete. Después de un momento todos ellos se alejaron y se ocultaron detrás de la cortina que cubría el pasillo, dejando solo al camello, quien nerviosamente comenzó a acercarse al micrófono en la mitad del escenario. Vestía un traje de frac negro, con zapatos perfectamente lustrados. Fue ahí que Eddie miró hacia arriba del escenario, una figura le comenzaba a levantar su pulgar. Ésa era la señal que había estado esperando desde hacía un rato. Su corazón comenzó a latir rápidamente mientras acercaba su mano derecha a la pared, donde se encontraba una perilla, la cual comenzó lentamente a girar. Las luces del auditorio comenzaron a disminuir en intensidad, Eddie sintió como es que los murmullos se iban apagando. Presionó entonces los botones que encendían los reflectores y la máquina de humo ubicados en los costados del escenario. Los reflectores de inmediato apuntaron hacia arriba mientras que las máquinas de humo comenzaban a emitir una cortina de humo blanco el cual comenzaba a cubrir todo el piso del escenario. Buster Moon, quien era aquella figura que estaba sobre el escenario, estaba de pie sobre su figura de luna creciente que comenzaría de a poco a bajar en los próximos instantes, respiraba un par de veces mientras tomaba el micrófono que tenía en una de las vigas. Había llegado el momento.