sure thing. 지민

12

Jimin cayo al piso junto con ella, la tomo en sus brazos mientras la seguridad del lugar apenas y llegaba, cuando la horrible escena ya había pasado.

–¡Aryoung!Ary...mierda, no.—Jimin tomo el rostro de la chica y la miro mientras esta lloraba del dolor.

–Jimin, has presión en la herida, iré por el auto al estacionamiento para poder llevarla al hospital.—el señor Young salió corriendo del lugar.

–Tu nunca dejarás de ser una tonta.—Jimin empezaba a llorar.

Puso su mano, usando el pañuelo que llevaba en el bolsillo para hacer más presión aun.

Liyee se había quedado estática, no podía creer lo que estaba pasando, lo que estaba viendo, su hermanita pequeña estaba sangrando en el altar donde se supone pasaría el momento más feliz de su vida.

–Ji-Jimin.—Ary hablo con un hilo de voz.

–No, no hables ¿si? guarda esa energía para después.

–No, escucha...tengo que decirte algo.—la chica trago saliva forzadamente.

Jimin esperaba algo diferente sin en cambio solo recibió una frase.—Cuida a Liyee mucho, por favor, no la hagas sufrir.

–Idiota, idiota, idiota.—lloro más.—¿Jamás lo hice bien? ¿Es que acaso el beso no te lo dejo claro?

–El beso hizo de todo menos dejar en claro algo.—hablo suave.

–Solo...—relamio sus labios—Solo no te duermas, hablaremos esto más tarde, cuando estés mejor.

Sonó la bocina del auto, Jimin cargo en sus brazos a Aryoung llevándola hasta ahí. Subieron junto a su padre quien acelero en cuanto los vio arriba.

Aryoung solo suspiraba y daba uno que otro quejido. Jimin no quitaba su mano de la herida y con la otra hacía a un lado el cabello de la chica.

–Jimin.

–¿Si, linda?

–¿Enserio...yo te...guste?

Jimin solo sonrió — Si quieres saberlo asegurate de no dejarme.

–No creo...poder...—la chica hizo gesto de dolor.

–No,no,no si podrás, lo harás, confió en ti.

La chica cerró sus ojos apretandolos de a momento.
Jimin la vio y no podía tener mas miedo. Miedo a no decirle lo que sentía de verdad.

Si un beso no lo dejo en claro tal vez dos.

Presiono sus labios en los tibios y suaves labios de Aryoung. Ella le devolvió el beso.—¿Quieres contar para mi?

–¿Contar?

–Si, 1...—Jimin comenzó.

–Bien...1—dijeron ambos.

–2.

–3.

–4.

–5.—pero esta vez solo la voz de Jimin predomino.—¿Ary?

–Te amo.—y su pecho volvió a subir y bajar una vez más.

Quizá la última.