Alex por fin ha dormido a Katie, besa a su sobrina y cierra la puerta. Sarah está en el salón esperándole con una copa de vino.
- ¿Cómo puede tener tanta energía? Sólo tiene tres años.- Alex se deja caer en el sofá, su sobrina le ha dejado K.O.
- Precisamente Alexander, tiene que disfrutar. Hablando de disfrutar.- Sarah deja la copa y se acerca a Alex.
- Todavía me debes algo, ¿recuerdas?- Sarah le muerde el lóbulo de la oreja, Alex la coloca encima de él.
- ¿Cómo podría olvidarlo? Pero Katie nos podría escuchar.- Sarah se levanta y se va al despacho de Alex.
- He pensado que podríamos jugar a esto.- ésta deja caer una baraja de cartas en la mesa.
-¿A las cartas? ¿Quieres jugar al pócker?- Sarah se arrodilla en el suelo.
- Al strip pócker. Tu madre me dijo que ella jugó con tu padre y se divirtieron mucho.
- Buagg Sarah, ¿por qué has tenido que contármelo?
-¿Vas a jugar o no?
- Está bien, yo barajo. Mi padre me enseñó.- Sarah se esperaba esa respuesta, un día Kate le contó lo ocurrido aquella noche.
Pasados unos minutos la pareja escucha la voz de Katie.
- Vaya, con lo bien que me lo estaba pasando...- Sarah le saca la lengua, se viste y se va a ver a la niña. Alex recoge, cómo solo se ha quedado con la camiseta se la quita y se pone los pantalones del pijama.
- Hola cielo, ¿qué ocurre?- Katie está llorando y abraza a su elefante de peluche.
- Pesadilla tita Sarah, tengo miedo.- Sarah se enternece al verla así; está más que claro que esta noche no tiene nada que hacer con Alex.
- ¿Quieres dormir con el tito y conmigo?- Katie asiente, las dos entran a la habitación; Alex no ha podido aguantar y se ha dormido.
- Tu tío es un debilucho Katie, no te dejes engañar.- la peque se tumba en medio de los dos y enseguida se duerme. Sarah sin embargo no deja de darle vueltas a lo de Washington; quedan días y todavía no ha hablado con Alex del tema.
Los rayos de sol alcanzan los ojos de Alex, éste se da la vuelta y se da cuenta de que está casi en la orilla; Katie duerme a pierna suelta en el resto de la cama.
- Buenos días, he hecho café.- Alex mira a Sarah, ésta debe de llevar ya un rato despierta, ahora prepara el desayuno.
-¿Cuándo llegó Katie a mi cama?
- "Buenos días Sarah" ¿Has dormido bien? Sí, gracias Alex.- éste le rodea por la cintura y le planta un buen beso.
- Así mejor y Katie no llegó. Se vino conmigo porque tuvo una pesadilla, tú estabas roncando para cuando llegamos.
- Yo no ronco.- Sarah suelta una burla.
- Un día te grabaré, por cierto Dylan ha dejado un mensaje. Vendrá en una hora para recoger a la peque, ¿quieres despertarle?- Alex asiente, vuelve a la habitación.
- Princesa, ya es de día. ¿Quieres desayunar?- Pero Katie le aparta la cara con la mano.
- Vamos cielo, papi va a venir a por ti.- nada más escuchar eso Katie se levanta de golpe; corre hacia la cocina y le pide ayuda a su tito para que la siente en la silla.
-¡Bien! ¡Papi va a venir!- Sarah le prepara unas tortitas, un zumo natural y un vaso de leche; los tres desayunan mientras escuchan la radio.
Nada más terminar Sarah baña a Katie, le pone un vestido y le recoge el pelo.
- Eres una niña preciosa. Tienes los mismos rasgos de tu abuelo.- el timbre suena y Katie va como un rayo, Alex abre la puerta.
-¡Hola Dylan!
-¡Papi!- Éste coge a su hija y empieza a besarle por toda la cara.
- Te he echado mucho de menos princesa. Hoy voy a pasar el día con mi peque.- Katie se emociona.
- Hola Alex, ya me enteré de lo que te pasó, ¿cómo estás?
- Voy bien Dylan, ¿qué tal por Italia?
- Nada nuevo, sólo quería estar en casa para disfrutar de la familia pero el trabajo es el trabajo.
-¡Qué me vas a contar...!
-¡Dylan! ¡Qué alegría verte aquí!- Sarah aparece y le da dos besos.
- Hola Sarah, ¿cómo vas por Washington?
- No me quejo, pero es muy duro.- Katie comienza a impacientarse.
- Bueno chicos, ya nos vemos. Mi peque me reclama.- Alex y Sarah se despiden de padre e hija.
- Oye Alex...Tenemos que hablar.
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Incluso en los peores días es posible la alegría
FanfictionLa vida de Castle y Beckett continua pero esta vez la historia se centrará en uno de sus hijos; Alexander. Esta historia tratará de su vida, y de las que están a su alrededor.