Capítulo 12—¿Seguro que esto está bien? —pregunté. —Es muy importante. Quiero...quiero estar perfecta —dije nerviosa con un nudo en la garganta.
—No está bien...está SUPER perfecto —dijo Aless detrás de mi mirando hacia el espejo.
—¿Sí? —dije mirándome de arriba abajo una vez más.
—Sí y relájate princess. Todo va a salir a la perfección.
—Ay Aless no sé...es la primera vez que hago esto por alguien y mira, toca —dije poniendo su mano en mi corazón. —Se me va a salir del pecho.
—Eso son los nervios y el SUPER love que sientes por la gatita —dijo y sonreí como una idiota. «Mi gatita».
—Qué ganas tengo de verla —dije mordiéndome el labio.
—En menos de una hora estaréis en esa cita de ensueño que le has preparado. ¡Ay! Me hacen algo así a mi y me caigo muertito —dijo Aless y yo sonreí.
Había llegado el día. El día en el que tendría mi primera cita con Elettra. Solo de pensarlo, las mariposas se alteraban en mi estómago, aumentando mis nervios y llevándome a un estado de ansiedad y emoción al que ya empezaba a acostumbrarme. Elettra me ponía así -entre otras muchas cosas-.
—Hace exactamente dos semanas estábamos en Bolonia —dijo Aless sentándose en mi cama.
—Ya ves. Menos mal que te hice caso y fui. No lo olvidaré nunca —dije acabando de maquillarme en el pequeño espejo que había colocado en mi cuarto. —Como tampoco lo haré de la vergüenza que pasé cuando Elettra y yo entramos en su casa besándonos y estabais tú, su madre, su padre y sus hermanas en el sofá mirándonos —dije sintiendo como mis mejillas se teñían de rojo. El trauma ya se me había quedado para toda la eternidad.
—Todavía me acuerdo de la cara de susto que pusiste cuando nos viste y su padre se levantó del sillón —dijo Aless riendo a carcajada limpia.
—Uf calla...pensaba que me echaba y el pobre Tonino solo quería saludarme. Aunque en realidad...me da miedo eh —dije seriamente.
—No te preocupes por él baby porque le caíste SUPER bien —dijo Aless.
—¿Tú crees? —dije pintándome los labios de rojo.
—Pues claro, si no, no te hubiera invitado a volver a su casa.
—Mmm ya, es verdad...
—Aunque a la próxima, procura mantener la lengua fuera de la boca de su hija —dijo riéndose.
—¡Oh dios! ¡Quieres callarte! ¡Eres idiota tío! —dije intentando no reírme y le lancé una camiseta a la cara.
—Es que...menudo beso —dijo sin parar de reír y otra prenda voló hacia él.
A ver, siendo sincera, tenía que reconocer que Aless tenía razón porque joder...¡menudo beso el de aquel día! El empotramiento que le hice a Elettra contra la puerta de entrada del patio al salón fue muy interesante -«y sexy y ardiente y...uf ya, ya paro»-, tanto o más que el carraspeo de su padre al vernos. No os podéis ni imaginar la vergüenza que pasé. Casi no pude mirar a la cara a nadie en todo el rato que estuvimos allí hablando -todos menos yo, que solo asentía y balbuceaba-, ni rebajar el rojo de mis mejillas. Menos mal que cuando nos despedimos, Elettra y yo estábamos a solas porque si no, hubieran llamado a los bomberos. Porque sí, la italiana y yo cuando nos besábamos, éramos como el puto coloso en llamas, como las fallas de Valencia o como el jodido Vesubio en erupción. Puro fuego.
ESTÁS LEYENDO
A fuego lento - Blumettra (AU)
FanficDaniela Blume entra a trabajar como ayudante de cocina en "Casa di Mamma Luisa", un pequeño y acogedor restaurante del centro de Milán, cuya dueña y chef principal no es otra que Elettra Lamborghini. Conforme ambas mujeres pasan tiempo en la cocina...