CONVIVIENDO CON UN CRIMINAL [Michael Jackson] -PRIMERA TEMPORADA-

Cap 4

--¿Qué? ¿Tú me amas? ¿Es en serio?--Pregunté mirándole. ¿Era posible?

--Sí. Pero, tú no me quieres creer.--Arrancó.

--Yo te creo.--Informé mirando hacia otro lado. Él miraba hacia la carretera. No apartaba la vista de ella.

Después de un viaje de 30 minutos en silencio, llegamos.

--Pero, no te amo.--Le susurré antes de abrir la puerta y bajar del auto.

--Eso ya lo veremos...--Dijo en susurro; pero, yo pude oírle.

--Vamos.--Me tomó de la mano.

--¡Por favor! Soy perfectamente capaz de caminar sola.--Solté su mano.

Volvió a cogerme.

--Aj... Si preguntan, di que eres mi hermano.--Le dije sin mirarle.

Cogió mi barbilla e hizo que mis ojos se encontraran con los suyos.

--Si preguntan, diré que soy tu novio.--Susurró para luego sonreír.

--Espero que no se lo crean...

Entramos. Era un lugar muy grande. Las paredes sean de oro, el techo era muy alto y adornos en relieve color blanco. Había mucha gente sentada en mesas con manteles blancos. Era un restaurante de lujo. Pero, ¿por qué él me trajo aquí?

--Michael Jackson.--Le dijo al camarero que estaba detrás de una mesa.

Él nos guió hasta atrás del restaurante. Todo estaba lleno...
Cuando llegamos a la mesa reservada, Michael me sacó la silla. Valla, al fin algo que ha hecho como un caballero.

--Gracias.--Agradecí antes de sentarme.

El camarero se fue.
Jackson se sentó en la silla que había en frente de mí.

--Bien... Platiquemos algo de ti.--Sonrió.

--Bueno... Emm... Te odio, quiero que te mueras, ojalá te pudras y... A sí, querría que nunca hubieras nacido.--Sonreí.-- Te toca.

--Ja, ja. Muy graciosa.--Dijo sarcástico.

--¿Puedo hacerte una pregunta?

--Dale.

--¿Sabes escribir "Tonto" en griego?--Cuestioné.

--Sí...--Respondió confundido.

--¿Sabes escribir tu nombre en griego? Guau... Me impresionas.--Le solté.

--Sí, es genial saberlo...--El sarcasmo estaba volviéndose otra rutina diaria para él.

--No, ya. Ahora en serio. Cuéntame algo de ti.--Le pedí.

--Emm... No sé qué quieres que te cuente.

--¿Cuántos años tienes?

--Tengo treinta y dos.

--Ah... Bien... Te ves mas joven...

Después de decir eso, dos camareros llegaron con platos. Los pusieron encima de la mesa y le sacaron la tapa. Había una ensalada y spaggetti. La última comida mencionada, me recordó a "La dama y el vagabundo".

--Gracias.-Sonreí.

Ellos asintieron con la cabeza y se retiraron.

Comí de la ensalada, al igual que Michael. Pronto, pinchamos con el cubierto la misma lechuga.

--A ver, ¿para ti o para mí?--Cuestioné.

--¿La comemos a la vez?--Me miró pícaro.

--Quédatela tú.--Cogí otra verdura del plato.