– No me importaría seguir manejando contigo como compañía, pero la gasolina comienza a agotarse–. Dijo Blaine después de hora y media al volante.– ¿No cargaste está mañana? – Preguntó Kurt mirándolo asustado.
– No, lo haría esta noche... camino a tu pastelería. Pero ya sabes el resto de la historia–. Le dice sonriente guiñandole el ojo.– Me raptaron.
Ambos se echaban de menos, extraban reírse de comentarios sin sentido o sus bromas privadas.
Tenían una charla amena hasta que comenzaron a escuchar sonidos raros provenientes del auto de Blaine mientras perdían velocidad.– ¡Mierda! – Soltó Blaine.
– Tendremos que bajar y empujarlo–. Propuso Kurt.
Hicieron algunos intentos pero sin éxito, estaban cansados de empujar y comenzaba a hacerse tarde.
– Kurt, debo marcar a una grúa. Qué vengan por nosotros. Nos iremos mañana, si aún es tu decisión.
– No Blaine, no puedo volver ahí.
– Estamos en medio de la nada–. Decía Blaine tomando su móvil.– Es un milagro que tenga señal.
Kurt no respondió, caminaba por los alrededores como señal de que prefería quedarse a dormir entre los arbustos a regresar.
Blaine podía notar algo extraño, sin duda debía tratarse sobre su pasado. ¿Lo habría llevado hasta ahí para contarle? Tal vez, ¿Para asesinarlo por mentirle todo ese tiempo?
– Kurt, sabes que no me iré sin ti. ¿Cierto? Que iré a dónde quieras.– Dijo acercándose a Kurt, quien se había sentado en una roca cercana cabizbajo.
– ¿Aunque eso signifique no volver nunca?
– Aunque no vuelva nunca–. Susurró Blaine sentándose a su lado.
Blaine pasó sus brazos por el cuello de Kurt y recargó su cabeza sobre su hombro. No tenía la menor idea de cómo reconfortarlo.– Blaine, no he sido totalmente honesto contigo–. Dijo Kurt mientras Blaine lo apretaba más contra él.
– Nada de lo que digas me hará cambiar de opinión–. Susurraba Blaine sobre el cuello del castaño.
– Hablo enserio–. Dijo Kurt separándose de Blaine. No podía seguir con toda esa farsa. Y si definitivamente quería los mimos de Blaine tendría que tomar el riesgo.
– Kurt, quizá es muy pronto pero yo te amo–. El castaño tuvo que espirar hondo al escucharlo.
– Hace 6 años...
6 años antes.
– Kurt, ¿Estás feliz? – Preguntaba Carole, su madrastra.
– ¡Aún no puedo creerlo! – Decía Kurt totalmente emocionado.
Era el cumpleaños número 18 del castaño y su familia había accedido, después de que Kurt rogara por meses, aventurarse a un día de campo a las afueras de la ciudad.
Su padre, Burt, había rentado una casa rodante para que se sintieran más cómodos durante el viaje.
En cuanto a Finn, su hermanastro, pasaba durmiendo la mayor parte del viaje o hablando por teléfono.Kurt salía con un chico, con quién hasta ese momento tenía una relación tranquila, su nombre era Adam Crawford.
Cuando la familia de Kurt comenzó a planear su sorpresa de cumpleaños, recurrieron a Adam. Nadie lo conocía más que su novio de dos años.
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Old Life, New Life.
FanficUn hombre misterioso, uno olvidadizo, una novia histérica y un oscuro pasado. *Vayan a leer el prólogo. :)