Las manos de Colin recorren el contorno de mis brazos cuando separo mis labios de los suyos, su respiración se para durante unos cuantos segundos y más tarde toma fuertemente aire. Su pelo cae alborotado sobre su frente y puedo observar perfectamente el rubor en sus mejillas y en la punta de sus orejas. En su cara se dibuja una sonrisa que se asoma tímidamente. Acaricia mi mejilla con la punta de sus dedos arrastrándolas hasta el final de mi mandíbula, yo me adhiero a su roce.
- Ha sido realmente genial -murmura.
- Tal vez sí.
Aparto mis manos de su nuca, arrastrándolas hasta los bolsillos del delantal y me separo lo suficiente para que sus manos se aparten de mi cuerpo.
- Pero también es algo que no debe volver a ocurrir.
Su rostro cambia totalmente de como estaba hace unos segundos. Ahora sus cejas se han unido formando una sola y sus ojos, temerosos, me miran con duda. Su labio inferior tiembla a la vez que intenta hablar.
- Pe-pero... -intenta hablar pero lo único que consigue es que una palabra atropelle a la otra.
- Sabes que le amo, sabes que amo a Henry.
- ¿Y por eso me has besado, Suzie? ¡Sabes que también me amas a mí!
- Lo sé -admito resignada mirándome la punta de mis zapatos. Levanto la mirada, y me centro en sus dos grandes ojos marrones- Pero a él lo amo más.
Escucho sus pasos alejándose de mí tras darme la espalda, retumban contra el suelo provocando que todo a mi alrededor tiemble, como un terremoto cuando pasa y lo arrasa todo. Tengo que sujetarme a la estantería para mantener el equilibrio y no caerme pero consigo serenarme cuando lo veo salir por la puerta y lo pierdo de vista. Era lo que tenía que hacer, era lo correcto.
Cabizbaja camino hasta la puerta de la casa de Henry, todavía entrando a hurtadillas debido a que no ha hablado aún con el director del instituto. Golpeo levemente con los nudillos la puerta principal y no tengo que esperar más de unos minutos cuando él me abre. Puede notar por mi mirada que algo pasa por eso cuando cierra la puertas tras de sí se queda pensativo y dudoso, observándome mientras mis brazos se cruzan sobre mi pecho y frente a él tengo mi mirada perdida en cualquier punto que no sea él.
- ¿Qué ocurre? -pregunta posando una mano en mi hombro.
Observo su mano, apretando mi hombro y no puedo soportar lo que estoy viviendo, el dolor que le voy a causar. Por lo que decido apartarla y alejarme de él lo suficiente para que incluso si alarga un brazo no pueda llegar ni a rozarme.
- ¿Me vas a contar qué demonios ocurre? -dice, ahora más enfadado- ¿Por qué te alejas de mí? ¿Acaso he hecho algo mal?
- Tú no, yo... sí.
Adopta una postura más defensiva pero a la vez con cierto punto de vulnerabilidad. Se apoya contra la puerta y sus brazos cuelgan a cada uno de sus lados, repiquetea con los dedos sobre la madera. Agacha y sube la cabeza un par de veces antes de mirarme mientras pestañea lentamente, sus pestañas se elevan con suavidad, y sus ojos azules verdosos brillan con intensidad.
- He besado a Colin -suelto de repente.
Su cuerpo se debilita poco a poco, lo puedo notar por la postura de su espalda que ahora está mucho más caída, su peso está siendo demasiado para él pero se está aguantando sobre la puerta. Ni siquiera sé como mantiene todo el cuerpo apoyado cuando tiene todo el peso sobre la punta de sus pies.
Sus ojos deslumbrarían a cualquiera debido al brillo de estos, unas lágrimas juguetean nerviosas intentando saltar hacia afuera, buscando un camino. Una rebelde toma la fuerza suficiente y se lanza, caminando rápidamente y posándose en la comisura de sus labios, él la retira con un gesto rápido.
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Smile with your eyes.
RomanceSuzie, una chica de 16 años que se encuentra perdida y sola encuentra su valentía en un amor que no es aceptado por todos, ni siquiera correcto. Un amor que tiene que atravesar muchas barreras para llegar a suceder de un modo completo, si es que alg...