💕Capítulo 26

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─ Amy, sé que es difícil pedírtelo en este momento, pero necesitas tranquilizarte, estás muy angustiada y eso hará que te sientas peor, dijo Mattias mientras conducía su auto con destino al hospital. El rostro de Amy se encontraba pálido y con una expresión de dolor intenso, no solamente físico sino emocional.

Amy arqueaba su cuerpo hacia delante, colocando sus manos sobre su vientre. En momentos el dolor era insoportable. Amy se culpaba a sí misma de la situación, se sentía responsable de que esto estuviera pasándole por haber considerado siquiera la posibilidad de terminar con este embarazo. ¿Por qué había pensado en eso?

Respiró hondo, intentando sobreponerse al dolor. Miró a Mattias y le dijo: ─ No quiero perder a mi bebé. Es mi hijo, no puedo perderlo. Antes estuve confundida, asustada, pero ahora sé que lo quiero. Por qué tiene que estar pasándome esto?

Mattias no tenía una respuesta para esa pregunta. Como médico sabía que muchos embarazos terminan en abortos espontáneos, sin ninguna causa aparente, pero la cercanía y el cariño que le tenía a Amy hacían que esta situación le afectara de manera personal. ─ Todo va a estar bien, vas a ver que sí, dijo tratando de reconfortarla.

Sheldon perseguía a Amy y Mattias en un taxi, ordenándole al conductor que no los pierda de vista y que aumente la velocidad para adelantar a todos los autos que le separaban de su novia. Su imaginación volaba hacia escenarios en los que Amy le era infiel con aquel hombre. Se sentía herido profundamente en su orgullo y extremadamente decepcionado.

Era la primera vez que Sheldon se había relacionado así con otra persona, la primera vez que había derribado sus propios mecanismos de defensa y dejado que alguien se adueñara de su voluntad, de su corazón, y todo para que lo decepcionen. ─ El corazón no duele, es una bomba muscular que envía sangre a otros órganos se dijo Sheldon a sí mismo, mientras ponía su mano en el pecho. Estúpido corazón. ─ Siempre supe que era mejor estar solo!.

Mattias estacionó su auto en la calle frente al hospital. A la distancia que se encontraba Sheldon pudo distinguir como ese hombre que ahora encabezaba su lista de enemigos, le daba la mano a Amy para ayudarla a bajar del auto y la abrazaba por la cintura mientras ingresaban juntos a un edificio que no podía distinguir claramente.

─ ¿Podría conducir más rápido? Ya casi no puedo verlos, le gritó Sheldon al taxista, mientras los músculos de su cara experimentaban movimientos espásticos involuntarios.

─ No señor, estamos frente a un hospital y estoy conduciendo a la velocidad máxima permitida en esta zona, respondió el conductor en perfecto inglés. ─ Esos autos que usted quiere que adelantemos, son ambulancias. No lo ve?

─ ¿Por qué irían Amy y ese vikingo al hospital?. ¿Qué está pasando?, se preguntaba Sheldon a sí mismo. Sheldon le pagó al conductor y se bajó del taxi para seguir el resto del trayecto a pie. Corrió lo más rápido que pudo hasta llegar a la puerta de entrada del hospital.

Con la ayuda de Mattias, que hizo que le proporcionaran una silla de ruedas, Amy pudo llegar a la sala de Emergencias del hospital, allí fueron recibidos por una doctora que saludó amistosamente a Mattias, se conocían hace mucho tiempo. Diligentemente se presentó con Amy.

─ Hola, soy Martina Lundqvist, médico de emergencias de Gíneco-Obstetricia. Amy, en qué puedo ayudarte?, dijo la joven doctora pelirroja con anteojos.

─ Yo... estoy embarazada, tengo siete semanas, más menos un día. Ayer tuve algo de dolor en la región lumbar y en la pelvis, no le di importancia, se me pasó al descansar un poco. Pero hoy, al despertarme el dolor fue muy fuerte, ahora es casi insoportable. Tengo además un sangrado moderado.

💞La Suma de las Posibilidades💞Shamy💞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora