Nada es lo que parece. (Justin Bieber y Tu)

Capitulo 4.

Viernes: 25 de Abril del 2013.

Hoy era el día. Hoy llegaría cobrar venganza después de soportar 3 miserables años junto al presumido de Nick. Todo estaba preparado.

Sabia que el destino quería que sucediera, un día antes, el padre de Justin había marcado para avisar que se llevaría a Jazzy el fin de semana a visitar a su familia a Canadá. Ahora, el podía vagar sin la preocupación de que su pequeña hermana asustada en la madrugada fuera a buscarlo a su habitación gracias a los monstruos que según ella, vivían debajo de su cama.

Hoy era uno de esos días, donde a no le importaba caminar los 2 kilómetros que había desde su casa al colegio, no le importo soportar los insultos y las humillaciones que recibía de parte de sus compañeros. No le importo tener que mirarle la cara por ultima vez a Nick .

-Hola mariquita- como siempre Nick y sus amigos esperaron a que el pobre entrara al aula para molestarlo.

-¿Estas sordo?, te hablo, estúpido- , Gerardo, un estúpido mas de la bolita de Nick había tomado con fuerza la mochila de Justin tirándola hacia atrás.

-Hola- respondió este sin mirarle.

-Así se hace, estúpido- exclamo Nick tirándole su mochila al piso. El timbre sonó y todos caminaron hacia sus lugares.

Suspirando, se agacho para poder tomar sus cosas que se habían salido de su mochila.

-Buenos días jóvenes- entro la maestra de ingles. Magy. -Por favor saquen su guía en la pagina 87- todos rieron al ver el letrero que tenia pegado en la espalda . "Soy una niñita lame penes" decía en letras negras.

-¡PAREN DE REÍR!- ordeno la maestra enojada. -, ¿Que tienes en la espalda Bieber?-

-¿Mande?- contesto sin entender.

-El letrero, quítatelo- ordeno mirando a todos los presentes.

Estirando su brazo, tomo el pedazo de papel y lo hizo bolita sin siquiera leerlo.

-Bien, ahora por favor, hagan lo que ordene- susurro la maestra tomando asiento en el escritorio.

¡Solo unas horas mas! se repetía constantemente. 

(...)

-¡Adios marica!- Alex junto a Nick le tiraron su bebida sobre Justin. Ellos iban en el carro de este segundo.

-¡Malditos hijos de perra!- susurro enojado. Apretó con fuerza los puños y comenzó a caminar hacia casa.

Tenia que preparar todo.

(...)

7:30 P.M

La hora había llegado, después de despedir a su padre y a su hermana, entro a casa y subió a su habitación. Cerro con seguro la puerta y saco del escondite que tenia debajo del armario su caja. Su preciosa caja llena de sus juguetes. Como les decía el.

En ella, infinidad de cuchillos, navajas, pistolas, trampas para animales, aunque las utilizaba en humanos, le servían mucho. Sogas, bolsas de plástico, guantes de látex, para no dejar pistas, frascos con cloroformo y pañuelos de seda, esperaban ser usados en sus divertidos juegos. Y lo mas presido. La libreta.

En ella, guardaba los mas grandes secretos que le pertenecían.

Al inicio, tenia sus pensamientos, lo que vivía día a día desde los 8 años.