❝Amour☽Croissante❞ ; NamJin

Merci chéri

Dedicado a Renyhenderson y -_WhiteFede_-

Merci chéri: Gracias querido

🍰☕

Seokjin estaba mojando su rostro en el baño de su cafetería, no podía evitar sentir mucho calor en sus mejillas y en todo el cuerpo en general. Nunca en su vida había imaginado actuar de esa manera, si Jimin o su hermano llegasen a enterarse se burlarían de él durante todo el resto de su vida. Cuando llegaron a Seúl le dijo a Namjoon que necesitaba hacer algunas cosas en la cafetería, lo cual no era totalmente cierto... Solo quería un lugar a solas con el menor, ya que durante el viaje de regreso estuvo observándolo dormir junto a él, nunca lo había observado durante tanto tiempo seguido y tan cerca. Pudo dibujar con su mirada todas las facciones de su novio y todos los pequeños detalles quedaron en su memoria; los lunares, las pestañas, los hoyuelos que tanto se marcaban cuando hacía cualquier gesto con los labios... Los labios gruesos y firmes que tan loco lo volvían, la pequeña y respingada nariz que tantas cosquillas le producían en las mejillas y el cuello. El mentón, el cuello y la manzana de Adán de Namjoon eran para Seokjin totalmente masculinos y comenzaron a provocarle ganas de olerlo y dejar besos allí. Siguió bajando y se encontró con el pecho cubierto por una camiseta simple y una camisa de franela abierta, las grandes y masculinas manos, que tantos mimos y cosquillas le hacían descansaban sobre su regazo. Decidió detenerse y no seguir con su escrutinio al verlo moverse; preso del pánico de ser descubierto cerró los ojos y se hizo el dormido, pero en realidad no pudo pegar sus ojos ni por un minuto, ya que su corazón palpitaba y sentía muchas ganas de que su pareja despertara y le besara como solo él podía y sabía hacerlo...

Al llegar a la cafetería Namjoon le propuso ayudarlo con lo que debía hacer, el chef jamás fue bueno para inventar excusas, por lo que miró hacia la puerta del fondo y solo se le ocurrió decirle que debía mover algunas cajas con harina. Al entrar en el lugar mencionado agradeció a todos los Dioses que Jimin no hubiese acomodado las cajas. Tan solo demoraron unos minutos, a Seokjin no paraban de sudarle las manos y se sentía como un adolescente, miraba a Namjoon sin disimulo y lamía sus labios, rogaba que su corazón se calmara, ya que temía sufrir alguna especie de ataque allí mismo. El castaño preguntó qué más podía hacer por él, Jin solo pensó "bésame", pero sacudió su cabeza y respondió que podía marcharse, ya que debía revisar algunos papeles y contar algo de dinero para cuadrar la caja registradora.

El profesor soltó un pequeño suspiro y se aproximó a su pareja para despedirse con un beso y un abrazo, este estaba totalmente ansioso, como nunca antes, de recibir los labios del contrario sobre los suyos. Namjoon no paraba de sonreír, los hoyuelos estaban totalmente marcados y finalmente se concretó el tan ansiado contacto de sus labios. En un comienzo fue lento, el menor acariciaba lentamente la espalda contraria propinándole cosquillas, Jin comenzó a reír entre el beso. Cuando sintió que su cuerpo era apretado y ambos se tambaleaban, empujó a modo de broma el cuerpo más alto, haciendo que casi impactara contra la pared debido a la inestabilidad, sin embargo el moreno fue más hábil y lo empujó a él contra la pared, dejándolo acorralado, con sus cuerpos muy pegados. Llevó sus manos hasta el firme pecho y comenzó a acariciarlo lentamente, mientras sentía caricias en su cintura, todo sin dejar de besarse... Entonces sucedió; Namjoon mordió su cuello luego de lamerlo cortamente, luego sintió algo un tanto duro en su ingle, supo inmediatamente que se trataba de la excitación de su novio, lo cual hizo que él también se excitara como respuesta. Su corazón no dejaba de saltar y no sabía cómo reaccionar, solo quería continuar besando aquellos adictivos labios y sentirse así de cerca de Namjoon.