❝Amour☽Croissante❞ ; NamJin

Voyage

Voyage: Viaje

🍰☕

Dedicado a todas mis queridas pastelitos, sé que ha pasado tiempo, pero también sé que están aquí, gracias

El aeropuerto estaba en extremo concurrido, la fecha que la pareja había elegido para viajar era, por decirlo de alguna manera, desastrosa. Sin embargo nada podía empañar la alegría y entusiasmo de ambos; ni las largas filas para registrar las maletas, ni tener que turnarse el único asiento disponible y esperar una hora para poder comer en uno de los restaurantes del lugar. Finalmente, luego de esperar más de cuatro horas, lograron ingresar al avión, sin ningún mayor inconveniente, salvo por Seokjin, quien casi fue aplastado por las maletas mal acomodadas de una señora en el compartimiento de cabina, lo que produjo que soltara un gritito desesperado. La mujer, que se notaba que era extranjera no encontraba más idiomas para disculparse, recibiendo una reverencia y un gesto de despreocupación. Namjoon solo pudo contener una risa un tanto ahogada tras su bufanda.

—Prohíbo que te rías de mí — dijo Seokjin intentando evitar el sonrojo que el bochornoso episodio vivido al tiempo que se sentaba en su lugar junto a la ventana.

—Lo siento tanto cariño, es que... — apretó los labios ocultando una risa — Es que siempre es a mí a quién le ocurren estas cosas y siempre te ríes de mí — se excusó tomando la mano de su pareja sobre el apoyabrazos.

—¿¡Yo!? ¿Reírme de tí? — Preguntó el mayor de manera dramática.

—Uh... Claro que no, jamás te has burlado cuando se me cae algo o cuando tropiezo — rodó los ojos y frunció los labios.

—Me río contigo... Y los clientes — el chef continuó acomodando su mochila y sacando los folletos del avión.

—Claro, claro... Entiendo — comentó divertido Namjoon y dejó un pequeño beso en la mejilla del contrario —. Te amo mucho — susurró con un tono acaramelado y bajo.

—Y yo a ti — fue la respuesta dada por la masita derretida y sonrojada en la que se había convertido Seokjin.

El vuelo se sintió larguísimo para Jin, quien no había viajado nunca más de cinco horas y jamás en avión. En un principio, al comenzar a avanzar el avión y agarrar velocidad antes de despegar, sintió que su corazón saldría por su boca... O tal vez sus ojos por tanto abrirlos del nerviosismo, sin embargo la mano de Namjoon lo tranquilizó junto a la pequeña y suave caricia sobre sus nudillos, que dejaron de estar blancos por la presión ejercida sobre el apoya brazos. El miedo abandonó el cuerpo del chef al momento del avión estabilizarse en el aire, olvidó que se encontraba a muchísima distancia del suelo y simplemente contempló lo pequeñas que se veían las densas nubes bajo ellos. Ambos miraron la misma película que ya habían visto, pero sintieron que era necesario volver a ver; Eterno resplandor de una mente sin recuerdos. Pero Jin terminó quedándose dormido, lo cual era bastante obvio, ya que había dormido poco los últimos días por los preparativos y lo ansioso que estaba. El menor terminó quedándose dormido también unos minutos después. Ambos comieron lo entregado por las azafatas y no podían creer que estuviera delicioso, pensaban que la comida iba a ser mala por ser parte del menú de un avión, pero se llevaron una grata sorpresa. Namjoon continuó leyendo el libro que había llevado para entretenerse, Seokjin escuchó música y ambos terminaron conversando animadamente con la señora junto a Namjoon — la misma del incidente de las maletas.