- ¡Sargento Bennett! - Exclamó el detective nada más visualizarlo cruzando el pasillo de la comisaría. Éste se paró inmediatamente al oír su nombre y giró su cuerpo ligeramente hacia Arthur.
- ¿Qué ocurre? - Preguntó él al ver su semblante.
- Necesito hablar contigo en privado. - No hizo falta más que eso y varios movimientos de cabeza para que se encaminaran a un lugar apartado y menos concurrido.
- Necesito todo lo que el departamento tiene sobre el caso Maxwell. - Arthur fue el primero en hablar, no sin antes mirar hacia ambos lados para asegurarse de que nadie estaba escuchando la conversación.
- Tú no puedes interferir en esa investigación, ya te lo he dicho muchas veces. - El hombre se cruzó de brazos, sus palabras mostraban una clara negativa pero su mirada decía otra cosa.
- ¡Vamos! Tú también le conocías y sin embargo, sí tienes acceso al caso. - Apretó la mandíbula como forma de canalizar su rabia acumulada.
- La diferencia radica en que él no era mi compañero. - Suspiró, él entendía que necesitaba encarcelar al culpable de la muerte de su amigo, pero ir en contra del protocolo, no le ayudaba a hacerlo. - ¿Por qué ahora? - Llevaban años trabajando juntos y lo conocía perfectamente, tanto como a Maxwell, y sabía que su insistencia tenía un motivo, uno muy importante.
- Tengo una nueva pista que nos podría conducir directamente a Dominic Costello. - Le respondió serio y con un apenas perceptible brillo en sus negras pupilas.
- Tienes que darme algo más que una simple pista para que arriesgue nuestras carreras. - Dijo esperando una explicación para poder hacer lo que su amigo le estaba pidiendo.
- Su hijo. - Eso hizo que Bennett se mostrase más intrigado. - Recibí una llamada en la que me decía que estaba metido en problemas, ¿Adivina con quién?
- Costello. - Dijo el sargento.
- Exacto. - Afirmó Dixon. - Por eso necesito los informes y reunirme con Derek. - Explicó un tanto acelerado.
Bennett rascó su barbilla, cosa que hacía a menudo cuando intentaba pensar y encajar todas las piezas de un nuevo caso, salvo que este no era un caso nuevo, sino el de un compañero, un gran policía que merecía justicia. - Quiero que en media hora te pases por mi despacho. - Ordenó serio para posteriormente marcharse, acabando así con aquel diálogo.
Arthur contó cada minuto pacientemente y cuando llegó la hora, fue hasta el despacho de Bennett. Al abrir la puerta, lo encontró sentado en su viejo sillón, ojeando lo que sería la copia del caso. Segundos después apartó la vista de la carpeta y le ordenó que se sentara.
- Antes de darte esto. - Dijo refiriéndose a la carpeta. - Necesito que me mantengas informado de todos tus movimientos. - Exigió formalmente sin cambiar su postura.
- Eso está hecho sargento. - Aceptó inmediatamente.
- También que cooperes con la policía local de allí, ya he hecho varias llamadas y esperan tu visita. - Le informó para después pasarle dicha carpeta.
Cuando ya estaba a punto de retirarse, el sargento habló de nuevo. - Hay varios nombres que han aparecido recientemente y quiero que investigues, están en la quinta página.
Buscó entre los folios hasta que dio con los nombres. - Meghan Porter, Nathan Spenser y Alice Grant. - Enumeró en voz alta. - ¿Qué relación tienen con Costello?
- Eso es lo que tienes que averiguar.
***
La joven estaba agradecida por la llamada de Marvin. De no haber sido por él, se hubiera pasado toda la tarde dándole vueltas a lo mismo, muriendo de la intriga que todo aquel asunto le provocaba. Cogió las cosas necesarias y las metió torpemente en uno de sus bolsos.
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Lo mejor de mí
RomansaMeghan y Derek tienen muchas cosas en común. Los dos tienen un pasado que quieren olvidar. Los dos tienen al enemigo muy cerca. Los dos pelearán por volver a tener una vida normal y ser felices. Los dos darán su vida si es necesario para proteger al...