🐰Conejito. ( Doyoung×NCT127 )

✿11❀

↪Doyoung ↩

- Zico, Hoseok hyung. Gracias por traerme a casa. - agradecí una vez que habíamos llegado a la casa donde compartimos con los chicos.

- no es nada, hermoso. - zico comento para después tomar con suavidad un mechón de mi cabello y acariciarlo con una sonrisa dibujada en su rostro.

De inmediato me sonroje al tener su atractivo rostro, muy cerca del mio. Sentía como mis mejillas estaban calientes y baje la mirada apenado tratando de evitar que miraran mi rostro sonrojado.

- eres tan tierno. - de pronto hablo Hoseok, lo que supuse que se habían dado cuenta de lo que quería evitaran.

- estoy de acuerdo con mi amigo, eres tierno, pero sobre todo hermoso. - sus halagos solo provocaron que mi sonrojo aumentara, mas mi timidez.

- hey, no tengas vergüenza de ser así, tan lindo. - con suavidad tomo mi mentón para hacer que lo subiera y pudiera mirarlo directo a los ojos, cosa que empeoraba mas mi timidez.

- en serio pareces un tierno conejo. - toda la timidez se fue de mi, de pronto comencé a molestarme e hice una mueca.

- no soy un conejo, por favor... - me sentía molesto. - ¿alguna vez podrán dejar de compararme con un conejo? - mi voz sonó tan gruesa, que hasta yo mismo me sorprendí.

Como no, si odiaba que me compararan con uno de ellos, no sabia porque solo me molestaba.

- bien, tranquilo... - ambos trataron de tranquilizar me, pero fue imposible y enojado sin despedirme de ellos, entre a la casa.

Porque todos pensaban en que me parecía a uno de esos animalitos, que tenia para que pensaran así.

Mis mejillas continuaban rojas, pero con la diferencia de que ahora estaban así por el coraje. Estaba molesto que se me olvido por completo el que tenia que ser cuidadoso, para que los chicos no me escucharan llegar o harían preguntas como si de mis propios padres se tratara.

Todo estaba a oscuras, lo que significaba que ellos se habían dormido, eso hasta que de pronto una luz se prendió.

- ¿se puede saber donde estabas conejito, y porque llegas a estas horas? - diablos!, me habían descubierto.

- oh, hola Tae. - salude al líder que estaba con rostro serio sentado de brazos cruzados en el sillón de la sala.

- te hice una pregunta, que esperas para responder. - su tono serio decía que no estaba jugando, en que de verdad necesitaba decirle todo o no iría a dormir hasta que se lo contara.

- yo... - comencé a sentir nervioso a causa de su mirada directa hacia mi, parecía no parpadear al mirarme.

- no lo digas, creo saber a donde fuiste. - entonces porque me preguntas, pensé.

- según tú, a donde fui? - retarlo no estaría mal, cierto?.

- con esos chicos tontos, que están detrás de ti... - así como tu con los chicos? - contra ataque.