Virgo y Capricornio

~ 𝒫𝒶𝓇𝓉𝑒 𝟤8 ~

𝒩𝒶𝓇𝓇𝒶  𝒱𝒾𝓇𝑔𝑜

Tauro sigue en la habitación cuando mi atención se enfoca en mis pensamientos. Mi mente se convierte lentamente en una sala de cine a oscuras. Cómo si hubiese escogido la película que voy a proyectar, mi atención se sienta en una de las filas con un bote, lleno hasta arriba, de palomitas.

He puesto mi atención en un cuerpo antropomorfo, y es espectador de mis recuerdos. La película, que son mis vivencias durante estas últimas semanas, se proyecta lentamente.

Ahora veo mi vida en perspectiva, cómo sí me hubiera desvinculado de ella.

Veo mis manos cuando cogen un libro y lo abren por la página que he marcado anteriormente. El ticket de compra que hace de marcapáginas y al mismo tiempo, me ayuda a recordar el día en que me crucé con Capricornio por primera vez.

El libro que sostengo en las manos es el que compré ese día.

La película no se detiene, muestra una oración que he subrayado a lápiz unas páginas más adelante.

"Gritar, llorar, amar, sufrir...lo hago todo en silencio para no molestar a nadie."

No la he subrayado porque me parezca una gran lección de vida, si no porque me representa ahora mismo. Ha conectado conmigo, al igual que el autor ha plasmado mi personalidad a través de su personaje.

Cierro el libro y busco una libreta. Sé que la busco aunque no haya llegado a ese instante de la proyección.

Después de leer ese fragmento varias veces necesitaba expresar mis pensamientos. Exprimirlos cual naranja hasta conseguir algo de provecho.

Ahora sí me veo escribiendo. Mi letra no es tan bonita cómo desearía, pero ese detalle no me importaba en ese instante. Sólo escribía lo que pasaba por mi cabeza cada vez que repetía ese fragmento y pensaba en el personaje, en sus decisiones, en sus virtudes y en la tristeza que me producía leer sus pensamientos.

"Vivo a través de esos personajes. Siento pena por ellos, por no ser capaces de expresar sus pensamientos y emociones a los demás. También los critico, porque muchas de las cosas que les pasan podrían solucionarse rápido si hablasen. Y a pesar de leerlo, no me aplico la lección." Así terminé esa entrada en la libreta.

Parpadeo cortando la película. 

Vuelvo al salón, Tauro sigue sentado en el sofá y la televisión mantiene el volumen bajo.

-Tengo hambre, voy a por algo.- anuncia él.

-Yo por ti no entraría ahora.- reacciono al momento.- Mamá y papá se están dando arrumacos.

Gira lentamente la cabeza en mi dirección.

-¿Aún siguen en ese plan?- conoce la respuesta porque continúa diciendo.- Me voy antes de que se lo monten en la cocina.