Una bella pelinegra platicaba por teléfono con su esposo en el despacho de la casa.
Si como te digo, todo va bien, no ha habido ningún problema con ninguno de tus socios, decía Milk.
Pues que bueno escuchar ello Milk, sin duda cada día me convenzo más que si puede haber un futuro para los dos, pues me estás demostrando que eres muy madura para tú edad, el haber convencido a mis socios fue tu prueba de fuego, decía el hombre a través de la línea telefónica.
Vaya no lo sabía, decía Milk.
Cuando regrese tal vez las cosas en nuestra relación cambien, decía el señor Ouji.
¿A qué te refieres?, decía Milk tratando de mantener la calma.
Ya lo sabrás a mi regreso, dijo el hombre.
¿Cuando vuelves?, dijo Milk con nostalgia mientras pensaba: Cuando el vuelva mi amistad y la de Gokú terminara pues ya no podré escaparme para seguir viéndolo.
El fin de semana, ¿por qué?, parece que la noticia de mi regreso te cayó mal, dijo el hombre.
No, no como crees, tú regreso es lo mejor tus socios se podrán felices pues nadie mejor que tú para hablar de negocios con ellos, dijo Milk.
Si es cierto, dijo el señor Ouji.
Luego de algunos minutos más de plática en donde la pelinegra recibió algunas instrucciones la llamada del señor Ouji finalizo.
Solo cinco días y mi sueño abra terminado, ya no podremos seguir viéndonos, ya no, pensaba la pelinegra mientras sus bellos ojos negros entristecían.
Mientras tanto:
Un atractivo jovencito de cabello alborotado se encontraba en una tienda del pueblo realizando sus compras.
¡Gokú hermoso¡ porque no me dijiste que estabas aquí, decía una melosa rubia.
Lunch, pensé que no estabas como me atendió otra señorita, dijo Gokú sonriendo.
Pues si estoy hermoso y para ti, más, dijo la rubia dándole un beso en la mejilla al joven de cabello alborotado.
Lunch, no hagas eso, dijo Gokú.
¿Por qué?, solo te estoy saludando, dijo la rubia.
Si tal vez pero no lo vuelvas hacer, dijo Gokú con firmeza tomando sus bolsas para salir de la tienda.
Se molesto, ¿será que esta enamorado de alguien y por eso no quiere que yo me le insinúe?, pensó la rubia mientras lo veía partir.
Mansión Ouji:
Una pensativa pelinegra se encontraba sentada en una silla de playa cerca a una alberca cuando alguien llego junto a ella.
¡Hola Milk¡ ¿por qué tan pensativa?, dijo una sonriente peli azul.
¡Hola Bulma¡ dijo Milk con calma sin responder a la pregunta de la peli azul.
¿Qué tienes Milk?, te noto triste con la misma mirada de antes de que el señor Vegueta se fuera de viaje porque en cuanto él se fue tú mirada cambió y cada día cambiaba se torno llena de luz al igual que tu rostro como si estuvieras enamorada, dijo Bulma.
Qué tonterías dices Bulma, dijo Milk poniéndose de pie.
No son tonterías es lo que yo vi en tu mirada, amor, dijo Bulma.
Deja de decir eso Vegueta puede oírte y pensar que es cierto, dijo Milk con molestia.
Pero no tiene nada de malo Milk, puedes sentir amor por la vida, por tus semejantes, por la naturaleza, de hecho te debiste sentir más libre sin la presencia de tú esposo, aunque tu nunca lo dijeras mi Vegui y yo notamos que la relación que tienes con mi suegri es muy extraña además tú eres muy jovencita para estar enamorada de él, me imagino que tuviste un motivo muy fuerte para casarte con él, pero si no quieres decírmelo si no quieres confiar en mí esta bien solo déjame decirte que en mi siempre tendrás a una amiga dispuesta a escucharte, dijo Bulma antes de retirarse dejando pensativa a la pelinegra.
ESTÁS LEYENDO
"Amantes de luna llena"
РазноеElla se caso por ambición con la persona equivocada creyendo que así ella podría tener todo lo que ella merecía y que la vida le negó tener pero un día conoce al verdadero amor y a pesar de todo el esfuerzo que hizo para no caer en el termino hacié...