Capítulo 30: "Un orgullo herido: Pagaras por tu traición"

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(Últimos capítulos)


Un par de pelinegros se miraban con dulzura frente a una laguna que hace solo minutos había sido testigo del matrimonio simbólico de los dos.

Ya soy tu esposo, dijo Gokú dulcemente mientras la pelinegra lo miraba con ternura.

Si, ya somos esposos, nosotros lo sentimos así y eso es lo único que cuenta. Mi bebé tus papitos ya están juntos para darte todo el amor que mereces, dijo Milk dulcemente mientras llevaba sus manos a su imperceptible vientre.

Si eso es cierto, yo los cuidare y amare a los dos, dijo Gokú dándole un beso en la frente a la pelinegra.

Lo sé, dijo Milk dulcemente.

Y hablando de cuidados es momento de que volvamos a nuestra casa, les prepare algo delicioso a los dos, dijo Gokú con ternura mientras tomaba en sus brazos a su joven esposa.

Mansión Ouji:

Vegueta, su esposa y su padre volvían a la mansión luego de haber ido al cementerio.

¿Puedo ver a Milk?, dijo Bulma al bajar del auto.

Claro, dijo el señor Ouji.

Entonces voy a su habitación, dijo la peli azul.

Está bien, mientras tanto yo voy a ordenar que vayan poniendo la mesa, dijo el señor Ouji.

Claro papá, dijo Vegueta.

La peli azul se dirigió a la habitación de la pelinegra mientras su esposo y suegro se dirigían al comedor.

Luego de algunos minutos Bulma llego a la habitación y empezó a tocar la puerta de la misma.

Toc toc toc

Toc toc toc

¡Que extraño¡ será que salió a alguna parte de la casa pensaba la peli azul volviendo a tocar nuevamente la puerta cuando la imagen que vio cuando venía con su esposo a la casa de su suegro vino a su cabeza.

No, no, que tonterías estoy pensando, Milk no podía ser esa chica, además mi Vegui me dijo que ese bosque es muy peligroso que nadie se atreve a entrar a él, a lo mejor se quedo dormida, pensó la peli azul..

Luego de varios minutos de tocar la puerta la peli azul volvió al comedor.

¿Qué sucede querida?, ¿y esa carita?, ¿a poco mi joven madrastra te hizo un desplante?, dijo Vegueta mirando a su esposa.

No, no como crees Vegui, lo que pasa es que ni siquiera me abrió a lo mejor se quedo dormida, dijo Bulma.

A lo mejor, mi padre dijo que estaba indispuesta, ¿no?, dijo Vegueta con calma.

Si, dijo Bulma.

De seguro se sintió mal se tomo algo y se quedo dormida cual roca, dijo Vegueta con calma.

Si eso debe ser, dijo Bulma tomando asiento junto a su esposo.

Luego de algunos minutos el señor Ouji llego al comedor.

Ya nos van a servir. ¿Y Milk?, ¿acaso no quiso bajar?, dijo el señor Ouji intrigado.

No pude hablar con ella señor Ouji, no me abrió la puerta, a lo mejor se quedo dormida, dijo Bulma con calma.

Dormida, dijo el señor Ouji con ironía mientras pensaba: Claro esta embarazada debe solo pasársela durmiendo la descarada pero su deber es estar aquí conmigo.

"Amantes de luna llena"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora