Más que una Pesadilla [MQUS #2]

Epílogo

No me gusta mi peinado. Jane realmente apesta con esto de la peluquería. Y se da cuenta, sin que yo se lo diga.

-¿Quieres que le pida ayuda a Bet? Pregunta, con una sonrisa compasiva.
-¡Por favor! Le suplico riendo.
-Vuelvo en un momento, no desesperes que aún es temprano.

Se retira de la habitación. Me quedo contemplando mi hermoso vestido. Jane lo eligió, obviamente. Es un vestido largo, sin mangas. Pegado al cuerpo hasta la cintura. La espalda completamente descubierta. Es perfecto. Resalta mis curvas de una manera excelente.

La puerta se abre. Mateo entra corriendo con Olivia, tomada de su mano. Ella es mi sobrina del corazón, hija de Sam y Jane. Mateo tiene ya diez años, y Oli tiene apenas siete.

Desde que Alex falleció, les pedí a Mike y a su madre la tutoría de Teo. Ellos accediendo a regañadientes. Un año después de su muerte, Mateo se fue a vivir conmigo.

-¡Tía Liz! Olivia corre a mis brazos. Viste un hermoso vestido blanco, que le llega unos centímetros abajo de sus rodillas. Es una niña realmente hermosa. Con el cabello rubio como su madre, y los ojos pardo como su padre.
-¡No dejó de pedir por ti! Mateo rueda sus ojos y bufa molesto.
-¡Y Teo no quería traerme, porque dice que voy a ensuciar tu hermoso vestido! Responde ella, haciendo un tierno puchero. Me siento en cuclillas y acaricio su rostro.
-¿Podrían no pelear? Sólo por hoy. Les suplico. Asienten al mismo tiempo que besan mis mejillas.

La puerta se abre, y Jane entra con Betiana tomada de su brazo.

Betiana está en pareja con Mike desde que nos rescataron de James. Nos hicimos grandes amigas, y espera un niño para el mes que viene.

Al verme sonríe y tapa su boca por el asombro.

-¿Qué está mal con ese peinado? Pregunta inspeccionando. -¡A mí parecer, te queda fantástico! Me miro al espejo y no me desagrada tanto. Pero aún así no me convence.
-Tal vez algunas horquillas aquí. Digo, señalando unos mechones sueltos de mi cabello.

Rápidamente Jane toma dos hermosas horquillas, con pequeños diamantes incrustados. Regalo de mi bello prometido.

Algo nuevo, pienso al momento que sujeta los mechones con ellos.

-¿Ahí? Pregunta.

Me gusta. Realmente me gusta.

Mi cabello se encuentra recogido de la mitad de mi cabeza, hacia adelante. Formando pequeños bucles. El resto, suelto.

-Sí. Respondo. -Es perfecto. Bet besa mi mejilla.
-Creo que me necesitan en la iglesia. Me informa. Asiento y se retira.

Jane coloca una caja de terciopelo sobre el tocador que hay frente a mi y me mira por el espejo.

Se ve deslumbrante. Su cabello rubio todo recogido. Luce un vestido color rojo que resalta sus curvas a la perfección. Ella es mi dama de honor principal.