Capítulo 3.

952 60 3
                                    

- Francisco...vamos a ver...

- ¿Qué hay que ver, _________? No hay que ver nada más, todo se ha visto ya-. Podía notar cuando me dijo esto, mientras me miraba a los ojos, unos celos que transmitía con la mirada que daban escalofríos. Además podía también notarle que estaba muy cabreado, y vale, tenía razones para estar algo molesto, pero no era tampoco para ponerse de la manera en que se puso.

- Escúchame. - le dije mientras apoyaba sus manos en ambas partes del antebrazo y hice un movimiento para que se girara para verme cara a cara con él y se detuviera enfrente mía. - ¿Estás así por cómo ha actuado Blas conmigo?

- Si. ¿Te parece poco?-. ¿Y con tono irónico encima? Aguanta ________, aguanta y no pierdas los papeles...

- A ver, que el chaval no me ha dicho nada del otro mundo tampoco, solo me dijo...

Y antes de que pudiera decir nada más me interrumpió, cosa que me repatea hasta las entrañas.

- Te ha piropeado e insinuado delante mía __________, y eso quieras o no molesta. 

- ¿Insinuado? me da a mi que ya estás exagerando todo esto y ves cosas donde no las hay-. dije con un tono muy molesto ya. No niego que Blas me hubiera piropeado pero...¿insinuado? si se supone que está conociendo a mi mejor amiga por algo será, y no precisamente lo esté haciendo para acabar en una amistad.

- ¿¡Perdón!? Ahora me vas a negar que no lo ha hecho, ¿verdad?...venga, ahora ponte a su favor-. Y sin olvidar que todo esto ya empezó a decirlo con un tono muy elevado de volumen.

Y yo no voy a consentir ni mucho menos que un tío me grite, ya que no me grita ni mi padre.

- ¿¡Sabes una cosa!? Piensa lo que te salga de la punta del dedo gordo del pie, pero como sigas con esa actitud de cabezonerío a más no poder te vas a quedar SOLO. - dije mientras tildaba más la última palabra que las demás.

Me quedé mirándole a los ojos una vez más por medio segundo mientras me daba la media vuelta para seguir mi camino y le daba la espalda a Francisco. Quise mirar para atrás para ver exactamente qué iba a hacer, así que decidí girar mi cabeza hacía donde habían ocurrido los hechos y lo vi ahí, de pie y quieto mientras me miraba, atónito con lo que había ocurrido. Pude notar sus ojos clavándose en los míos y como a la misma vez se le escapaba una lágrima.

- ¿En serio ahora estabas arrepentido? Bien, pues no me vas a dar ninguna pena Francisco, es que no-. dijo mi subconsciente.

Cogí y volví mi vista hacía el frente, para encontrar a Alejandra y Blas, ya que ellos nos habían cogido mucho la delantera y ni siquiera se habían dado cuenta de que Francisco y yo nos habíamos quedado quietos hablando, o eso creía yo. Ni a medio kilómetro de donde había sucedido la discusión los pude ver de pie, uno enfrente del otro, mientras se devolvían sonrisas y se robaban algún que otro beso, pero enseguida notaron mi presencia y se volvieron hacía mi para mirarme como si no estuvieran haciendo nada. ¿Qué me había perdido?

- ¿Dónde estábais __________? Nos hemos quedado aquí mientras aparecíais o no-. Me dijo Alejandra mientras tenía sus brazos cruzados y la ceja levantada, esperando una respuesta convincente.

- Esto...yo...

Quise pronunciar una palabra más pero en ese momento noté como las lágrimas invadieron mis ojos y necesitaban salir, así que no podía ocultarlas como si nada hubiera pasado. Rápidamente empecé a notar cómo mis mejillas estaban empapadas en lágrimas, pero yo no quería que nadie me viera así, ya que no me gustaba para nada llorar en público (excepto en los conciertos, que ahí era de alegría), así que me tapé la cara con mis manos.

Corazón a oscuras (Blas Auryn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora