Killian【 JongKey 】

23. De cara

JongHyun suspiró. ¿Cuántos días hacia que no iba a trabajar? Ciertamente, le habían dado un permiso por asuntos personales, pero él no era del tipo de pasar mucho tiempo fuera del santuario que eran para él los quirófanos. Aunque por primera vez en su vida no sabía si debía o no volver a la rutina.

Le asustaba su recepción, ya había hablado por teléfono con el director y el presidente del hospital y ambos parecían muy animados con su vuelta y el ingreso económico que supondría. Pero había decidido seguir el consejo de Onew y descansar un tiempo de los pacientes para dedicarse a estudios e investigaciones.

Lo que menos le apetecía era aguantar las miradas curiosas de sus pacientes.

Habían pasado días desde que se desveló la bisexualidad de Key y ya era 1 de abril, durante aquel tiempo se lo había pasado muy bien con KiBum, en su burbuja, ambos alejados de los problemas que debían enfrentar. Pero ya era tiempo de salir de los cómodos apartamentos e ir al trabajo.

El rubio se frotó las manos rápidamente, intentando darles algo de calor. Estaba helado incluso habiendo ido a trabajar con coche y la calefacción en su máxima potencia. No le dio demasiada importancia, sabiendo que aquello era causado por su nerviosismo y que nada iba a poder ayudarle. Así que solo salió del coche y cruzó el aparcamiento exterior para entrar por la puerta principal.

"Las cosas se enfrentan de cara" algo así le había dicho su pareja.

Su persona era, francamente, llamativa. Llevaba una camisa negra y simple, lo suficientemente gruesa para solo necesitar una chaqueta encima, la cual al entrar al hospital se había quitado por la temperatura interior. Su pelo rubio destacaba de forma exagerada sobre su camisa y pantalones oscuros. Llevaba una sonrisa alegre en la cara y la chaqueta sujeta a la vez que tenía las manos en los bolsillos.

Cualquiera que lo viera pensaría que aquel no era Kim JongHyun, por supuesto, no el Kim JongHyun que el hospital conocía. El serio cirujano había pasado a llevar una expresión nunca antes vista, una sonrisa sincera. Desprendía seguridad y felicidad, aunque realmente era un manojo de nervios.

Todos los médicos, enfermeros y demás trabajadores se le quedaba viendo estupefactos, como si contemplaran una visión.

— Parece que al hombre le gusta llamar la atención, eh JinKi... —se acercó bromista, MinHo junto con el pediatra.

Se solían ver día sí día no, traían algunas cosas a KiBum y JongHyun, a veces quedándose a pasar el rato con la pareja y el bailarín. A pesar de las diferentes personalidades, los cinco habían parecido encajar muy bien.

— ¿Aún no te habías dado cuenta? Pelo rubio, rico, guapo, pareja de un actor famoso. JongHyun ama llamar la atención —dijo de broma Onew, luego susurró—. ¿Qué tal el día? ¿Está empezando bien?

— Sería deprimente que pasara algo malo en los primeros 3 minutos —los dos amigos rieron.

— ¿Y tú? ¿Qué tal? —continuó MinHo.

— Estoy helado, a este paso se me caerán las manos.

Los otros dos volvieron a reír, ambos podían notar el casi indetectable nerviosismo del rubio e intentaban tranquilizarlo con preguntas.

JongHyun lo había notado, pero no estaba de humor, así que cortésmente se alejó de sus amigos y fue a una de las salas de descanso de cirujanos. Quería evitar cruzarse con pacientes y que le hablarán, prefería solo hacer acto de presencia. Todas aquellas miradas le estaban incomodando.

***

El siempre impecable Key llegó junto con su agente al lugar del rodaje como si aquellos días de retraso justificado hubieran sido para unas vacaciones en algún lugar paradisiaco. Sus ojos controladores analizaban a todos y a todo, sin importarle lo más mínimo algunas miradas de asco o falsas sonrisas aduladoras.