Un futuro sin ti.

Prefacio:

“La niñez es el reino donde nadie muere.”

Edna St. Vincent Millay

A los niños se les hace tan fácil ser felices, cuando existe esa típica costumbre de solo estar con tu primo o hermano y jugar a que son súper héroes o fingir a que son un personaje animado. No existe distancia, no existe dolor salvo el de las rodillas al rasparse por estar jugando uno que otro juego donde implique correr o saltar, no existe la preocupación ni la arrogancia solo existe la felicidad y emociones inimaginables por pasar rato con las personas que amas.

Al crecer no se olvida la costumbre, no se olvida los recuerdos de la infancia tampoco se olvidan las emociones que quedan grabadas en tu pecho por siempre, de alguna manera u otra piensas que eres maduro cuando solo quieres tener la razón en todo, cuando no te dejan más alternativas. Cuando uno crece se equivoca tanto… Sufre tanto, que quiere volver a ser ese pequeño niño porque cuando crecen tienen algo muy importante en sus vidas, ya sea una persona o un objeto valioso y por obstáculos de la vida se les va de las manos. Cuando pierdes a alguien es lo más doloroso pero cuando estas con ese alguien de nuevo es como si nada hubiese pasado. Quizás la cercanía era todo lo que se necesitaba para entre ellos ser feliz… más que felices, más que todo lo perfecto. Pero cuando se es esa persona mayor… tienes que afrontar todo lo que el camino te ponga con madurez, si no lo haces estas perdido.

Al sentir el amor de joven puede ser la cosa más especial del universo pero no obstante también puede ser una catástrofe si esta es la persona equivocada a la cual queremos dedicar nuestra vida pero si el amor es a base de recuerdos hermosos todo es posible así sea una mala elección en la vida, uno no elige de quien se enamora pero si elige hasta dónde quiere llegar con esa persona. Los sentimientos nunca mueren y los recuerdos siempre son guardados en algún lugar recóndito de tu corazón. Pero ellos no se olvidan, siempre salen al último minuto, siempre están allí, pase lo que pase, te obligan a de un modo u otro, seguir pensando en ese ayer.

Puede que no fuera tanto perder una persona especial, o tenerla a toda costa. Se trataba de que cuando tienes un futuro sin ese alguien tú simplemente sientes como si no fueras nadie.