Un futuro sin ti.

Capitulo 22: La espera.

Las cosas están mal de nuevo. 
Ya no puedo verlo mas, ni a ella. Es terrible no verlos cuando antes los veía a diario, verlos se convirtió en mi necesidad, en mí respirar pero de nada vale ahora, estoy más sola que nunca. No pude ir a despedirlos porque podría romperme mas el corazón aunque dudo que eso sea posible dado que se encontraba echo polvo. No entendía el motivo ¿Es que todo lo malo siempre recaía en mí? ¿Qué había hecho yo? Simplemente todo era tan borroso que me costaba simplemente caer en el hecho de que no estaban y no estarían por un largo tiempo. Odiaba haberme vuelto tan dependiente, odiaba ser así, me odiaba a mi misma ¿En que me había convertido? ¿Qué estoy haciendo? Ya no podía comprenderlo. 
Papa me había ido a buscar dos semanas luego para llevarme a la casa que había sido de mi tía ya que habían quedado algunas cosas en ella que eran de Valeria y querían que yo las conservara, por supuesto. Y otros trastes que se llevaría mi papa. La verdad solo lo acompañaba porque aquí estaban todos mis recuerdos, toda mi niñez, toda mi felicidad y sin mas se había desvanecido Llegamos y sentí un gran vacío, no volvería a estar aquí y sentir la atmosfera de un hogar en conclusión no volvería aquí jamás.
- Papá iré a dar una pequeña vuelta. – Le había dicho. Tenia que ir a verlo, solo una vez más.
Corrí y corrí hasta que mi pecho ardía pidiendo aire, mis pulmones en llamas dado que había corrido a todo dar, no me podía ir sin ver una vez mas nuestro lugar. Cuando por fin llegue, mi corazón cayó hasta mis pies. El césped que una vez había sido verde y brilloso estaba de una tonalidad casi grisácea. Las flores que habían estaban todas marchitas y el césped sin vida. Me tome del pecho y respire hondo dejando que una que otra lagrima silenciosa bajara por mis mejillas. Quizás este lugar ya no representaba mi felicidad ni mis recuerdos mas añorados si no toda mi tristeza y mi melancolía, mi alma fría y marchita, mi pena y mi desdicha. Pero quizás así debía ser todo… yo tendría que aprender a luchar contra el mañana y huir del ayer porque pase lo que pase no hay tiempo que perder. De todas formas eso no seria sencillo pero quizás luchar era todo lo que quedaba o si no estar estancado hasta el fin… el problema es que ellos avanzarían, se olvidarían de todo esto ¿y de mí que quedaría? Quizás un absoluto nada sea la respuesta.

…

Las meses pasaban y el dolor en mi era notorio, el cambio de escuela ayudo en algo. Pero lo que paso en la antigua quedaría marcado en mí hasta la persona que seguiría siendo con el pasar de los días. Olvidar era muy difícil pero todos les tenemos miedo al olvido por mas difícil que sea cuando una persona logra hacerlo es el temor mas grande de todos pero al parecer mis primos si lo habían hecho, ni una llamada, mensaje, correo. Como si la tierra se los hubiese tragado ¿de verdad fui tan irrelevante para ellos? Que coraje. Mis estados de animo eran inestables, ahora casi nunca veía a mi papá ya que mi única ‘’vía’’ de verlo era a través de mis primos y si ellos no estaban el ya no mostraba interés en mi, y eso dolía… Me había quedado sin padre también. Era la primera vez que pasaba navidad con mi mama o año nuevo con ella ya que ella iba a casa de sus familiares, me recuerdo llorando esas fechas porque en ellas Valeria y yo estábamos emocionadas arreglando la casa pero eso quedaría simplemente en un vacío en mi alma, en un recuerdo que no debería desenterrar jamás pero lo hago porque me recuerda que estoy viva. A veces no quería comer, lloraba mucho todas las noches y cuando lo recordaba en la escuela o en cualquier otro sitio abarrotado de gente mi mente se zambullía en recuerdos innecesarios que hacían a mi pobre corazón menos miserable ¿Algún día tendría la dicha de estar lleno de nuevo? Ya no lo sabía… Quizás nunca signifique tanto para ellos como ellos significaron para mi, pero un futuro sin ellos, un futuro sin ti Justin… ¿Qué hare ahora en adelante? ¿Caer y avanzar? Así que de eso se trata, ser fuerte y nada más. Las cosas no eran fáciles y mas si sentía que yo era la culpable porque… ¿tan fácil de olvidar era? Todas las señales apuntaban que si. Pero cuando lo pienso detenidamente tener un futuro sin esa persona es cuando te das cuenta que la vida no cobra sentido pero debía seguir adelante… con el corazón en la mano.

Fin.