Jaula de oro

Noche 12

Compromiso

Eran las once de la mañana y el emperador se encontraba sumamente satisfecho al ver que los regalos de compromiso para sus dos hijas mayores ya habían empezado a llegar. Ante tal suceso el emperador vio conveniente hablar con sus hijas de inmediato sobre lo que sucedería en un futuro muy cercano y así dejarles la situación en claro. 

Mando a sus sirvientes por las princesas y se dispuso a inspeccionar los regalos de compromiso y las respectivas cartas que los acompañaban, la mayoría eran de nobles del reino. Pocos minutos después tocaron a su puerta.

-¡Adelante!- dijo con voz fuerte, para su sorpresa quien entro en el salón no fueron sus hijas, si no su hijo mayor, lo que extraño al emperador.

-Padre, lamento interrumpir tan temprano tus ocupaciones, pero necesito discutir un asunto importante contigo- dijo el príncipe Tae

-¿es muy importante? Justo ahora estoy esperando a alguien-

-lo es, padre, se trata sobre el compromiso de mis hermanas- respondió Tae

-¿Qué sucede con eso?- pregunto interesado el emperador

-no creo que sea oportuno casar a mis hermanas justo ahora y no a las dos juntas ¿porque no dejas que se solo se comprometa Momiji y te consideras detenidamente el compromiso de Sayuri? Pienso que quizás sea una decisión demasiado apresurada comprometer a las dos-

-¿Qué te hace pensar que es una decisión apresurada? Para tu información he pensado sobre el asunto bastante tiempo y no creo que hubiera mejor momento como este para comprometer a tus hermanas, sabes que últimamente han llegado reportes de que el reino de Aradis quiere declararnos la guerra y necesitamos aliados si es que deciden hacerlo- explico el emperador

-¿entonces el compromiso es para conseguir poder militar?- pregunto el príncipe sorprendido

-Principalmente, pero también como consolidación del reino, tener buenos aliados nos hará más poderosos-

-pero padre...- antes de poder continuar la puerta se abrió. Sayuri y Momiji entraron al salón.

-lo sentimos, no sabíamos que tenías compañía padre, regresaremos después- se disculpó Sayuri

-No, está bien, quédense, tu hermano ya se iba- dijo el emperador para después dirigirse a su hijo - Tae, mi decisión está tomada y no debes de preocuparte por asuntos que no son de tu interés así que regresa a tus obligaciones y no quiero hablar más del tema-

Tae se dio media vuelta y salió molesto del lugar no sin antes dirigirle a Sayuri una mirada de disculpa.

-tomen asiento niñas- dijo el emperador

Sayuri y Momiji obedecieron, el emperador tomo asiento delante de ellas frente a una gran mesa donde se encontraban las cartas de los primeros pretendientes.

-Al parecer el anuncio de anoche ha complacido a muchos, pues, aunque aún es temprano ya han llegado solicitudes de matrimonio- dijo el emperador emocionado mostrándoles lar cartas

- ¡qué alegría! Solo me gustaría que la próxima vez que tomes una decisión que vaya a afectar el resto de mi vida, me avises por lo menos- dijo Momiji amargamente.

-¡Momiji!- regaño Sayuri

-Tomando en cuenta tu actitud de los últimos años no me iba a arriesgar a que lo arruinaras todo con tus bromas infantiles y tus travesuras de niña malcriada, como su padre yo sé lo que es mejor para ustedes- declaro molesto el emperador.

-Es que nos tomó muy por sorpresa padre, eso es todo- dijo Sayuri conciliadoramente.

-Entiendo esa parte, pero se los estoy avisando ahora, ustedes no tienen nada de qué preocuparse pueden seguir jugando y divirtiéndose como siempre hasta que elija al que será mejor esposo para ustedes-