(Tn) Una chica muy esforzada estaba en busca de trabajo, hasta que chocó con el destino, un hombre con traje y unos finos guantes blancos, que hicieron que su vida cambiara en un instante.
Desperté con un ligero dolor de cabeza, hice la rutina como de costumbre y tenía una gran duda ¿Qué debía hacer aquí? ¿Debo bajar o quedarme aquí? Ay, dios mio. Sentí unos golpes en la puerta y pude divisar a Claude abriéndola.
-Hola señorita (tn), ¿Cómo despertó?~ dijo dándome una tacita de té.
-Con dolor de cabeza..~ dije adolorida.
-¿Necesita un paño húmedo? ¿Tienes fiebre?~ preguntó tocando mi frente con su mano.
- Claude, tengo una pregunta~ dije.
-Dígame~ asintió acomodando sus gafas.
-¿Por qué jamás te sacas los guantes? ~ pregunté incómoda.
-Es costumbre, su alteza le gusta que demostremos formalidad.~ dijo con naturalidad- Hablando de él, quiere que baje a su despacho.
-Estaré ahí~ asintió y se retiró de mi habitación .
No sé por qué pero su respuesta me dejo conforme pero con una pizca de duda. ¿Por qué los otro sirvientes de Alois Trancy no ocupan guantes? Tal vez solo los mayordomos ocupan guantes, lo saque como deducción ya que Sebastian igualmente los ocupa. Baje al despacho del conde Trancy, toque la puerta y me abrió Claude, sonreí.
-Buenos días conde Trancy~ dije dando una reverencia.
-Ay, (tn) deja las formalidades conmigo, cuéntame ¿Eres buena bailando?~ me dijo con su voz de niñato.
-No..bueno sí~ dije dudosa mirando a Claude.
-Según Claude, eres muy buena bailarina y bueno mi invitación se debe a que habrá una fiesta en mi mansión y necesito aprender a bailar, el tonto de Claude~ al decir el solo Claude solo bufó- no puede enseñarme y el me recomendó a ti, espero que me seas útil~ dijo infantil.
-Claro pero Claude es un excelente bailarín~ dije mirando a Claude fijamente y este solo se limitó a sonreír por lo bajo.
- (tn) quiero que me enseñes tú~ dijo algo celoso.
-¿Cuándo comenzaremos?~ pregunté.
-Ahora mismo~ dijo mirándome fijamente- Claude vete.
-Yes, your Highness~ dijo eso y se retiró.
Comenzamos con los pasos bases, el sabía hacerlos perfectamente hasta creo que sabía mejor que yo.
-Aún no es suficiente para mi~ dijo enterrando un poco su brazo en mi cintura.
-Alois, me estás haciendo daño~ mencioné con una mueca de dolor.
-Lo siento, estoy algo nervioso~ puso su mano suavemente.
Seguimos así por un buen rato, ya estaba cansada y el también. El a pesar de verse un niño muy infantil para su edad, no es del todo malo como otros decían.
-Adiós conde Trancy, nos vemos~ correspondí a esa sonrisa.
Fui hacía mi habitación a darme un baño, luego salí y me puse un vestido cómodo y ligero. Fui al jardín y pude ver a Claude tejiendo un mantel. No lo esperaba, al parecer trae muchas sorpresas. Me acerqué y interactue con el.
-Hola Claude~ dije sonriendo.
-Hola (tn), ¿Necesitas algo?~ dijo preocupado.
-Solo vengo a conversar estoy demasiado exhausta. ~ dije, el notó él cansancio en mi voz.
-Deberías ir a descansar~ dijo esto poniendo su mano en mi mejilla.
-Claude, me agrada hablar contigo por eso vine hasta acá ~ dije mirándolo sonrojada.
-Se ve muy hermosa sonrojada~ dijo acercándose.
Me acerqué cortando esa lejanía, juntándonos en un beso delicado y suave, lleno de ganas. Nos separamos por falta de aire.
-No sabe cuánto espere probar sus labios~ dijo sonriéndome.
-Ni te lo imaginas~ dije agarrando de su mano.
Nos adentramos a la mansión, se acercaba Alois y Claude instantáneamente separó el acople de mi mano con la suya.
-Claude, te necesito en mi despacho~ dijo frío y con una mirada escalofriante. Claude fue a su despacho y Alois me miró indiferente, se fueron ambos.
Dios mío, aquel beso quedó plasmado en mí memoria pero aquella actitud de Claude después de ver a Alois también, se podía ver a Alois algo celoso. Estoy sacando conclusiones muy apresuradas.
Narra Claude: Cuanto espere ese beso, ahora gran parte de mi plan esta listo, al parecer la tengo enamorada de mí. Será un gran problema sí su alteza se da cuenta, el es demasiado posesivo y no quiero contarle de qué trata mi plan.
-Claude~ dijo su alteza con un tono molesto.
-Sí su alteza~ dije mirándolo serio.
-¿Te gusta (tn)?~ noté tristeza en su voz.
-No lo sé~ mencioné.
-Me dijiste que jamás me dejarías solo~ dijo soltando unas lágrimas de cocodrilo manipulador.
-Jamás lo haré, usted es lo único que deseo, su alma es la que me da la fuerza de levantarme cada día. ~ dije fingiendo que me importaba ese niño.
-Claude ¿tú jamás me mentirías?~ dijo lloriqueando.
-Claro que no, su alteza~ el solo me abrazó y respondí abrazándolo igual.
Su alma no es más que polvo, en cambió el alma de (tn) es tan similar a la de Ciel, tan pura, con dolor y frustración. Aquellas almas dignas de devorar con un sabor único.
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