Antes que nada quiero agradecer infinitamente @Gmaisrael por hacer esta linda portada, si necesitan alguna pueden ponerse en contacto con él.
También los invito a que se pasen por su novela. "No soy virgen tampoco zorra" Estoy seguro que les va a gustar. Si un no se han pasado por mi otro proyecto "Jhonwil" los invito a pasarse por el.
NICHOLAS
Me costó trabajo deshacerme de esa loca, le pedí que no volviera porque seguridad se encargara de sacarla, ella solo me sonrió y salió moviendo exageradamente esas caderas. Por fin se había acabado el día, esta tan estresado lo único que quería era un masaje en la espalda. Tomo mi saca y me dispongo a salir pero al tirar de la puerta el mayor regalo del día cae sobre mí, vaya su cuerpo se sentía bien. —Se encuentra bien— ella se endereza y me sonríe, cuanto daría porque esos labios estén en mi cuerpo. ¡Basta! Hasta yo me soy cuenta que esta obsesión con ella me está por volver loco —Sí, ¿ya se iba o tiene tiempo?— siento mis bolas encogerse en ese momento —Sí, ya está retirándome tengo un compromiso, ¿necesita algo? — Ella solo levanta una ceja y frunce los labios —Necesitamos hablar— salí de la oficina y le hice señas para que me siguiera, entramos al elevador y fuimos directo a la guardería para pasar por Sofí. Recorrí todo el área pero por ningún lado veo a Sofí, entre al lugar —Sofí esta con sus abuelo— esas palabras dejaron salir todo el aire que estaba reteniendo por no verla por ningún lado.
Es hora de hacer caer en tentación a la señorita Woods, salí de la guardería y ella su detrás de mí, me hubiese gusta tenerla enfrente y así verle ese trasero de 10. Salí de la empresa y mi auto esta justo enfrente esperando a que lo use, subí y espere que ella lo hiciera pero esta parada en la banqueta — ¿No piensa subir?— ella negó —Si quieres hablar tendrás que subir, no puedo posponer lo que tengo— ella dudo por un momento pero logre que entrara al auto, apenas llegamos al primer alto envié un mensaje para tener todo listo pasaron como 5 minutos y ella no decía ni una sola palabra, mucho mejor para mí.
— ¿Qué reunión tiene?, según yo no hay nada agendado
—una muy importante
— ¿Adónde nos dirigimos?
—A donde es la reunión
—Saliendo del tema de su reunión misteriosa, necesito sur aclares todo
— ¿Que tengo que aclarar según tú?
—Todo, usted y yo, lo de mi hija, todo
—No le tomes importancia, pronto se cansaran
—Si no lo hace usted lo are yo y a mi manera así que usted decide
— ¿Y que hará si no lo hago?
—El golpe en sus bolas no se compara con lo que le are así que arréglalo— sentí estremecer mis partes nobles, ya he probado varias veces la rodilla de la sexy secretaria.Doble la esquina y el lugar está enfrente, me estacione y mire de reojo a mi acompañante, su cara era de asombro o eso creo, me baje del auto esperando a que ella baje pero no lo hizo, fui hasta su puerta y la abrí pero aun así no salió. —Si piensas que darte ahí dentro, por favor no subas los pies y cuídalo mientras yo recibo un estupendo masaje des estresante en todo el cuerpo— vi como frunció el ceño —A menos que quieras a acompañarme, hay un masaje igual para ti— aún seguía dudando así que me di por vencido esta vez, esta mujer es demasiado ¡¡haaaa!! Empecé a caminar y entre al spa le estaba diciendo a la señorita lo que quería cuando ese aroma exquisito me indico que había entrado. La mire y camino hacia mí, le indique a la señorita que sería dos masajes como estaba planeado.
Deje mis cosas en el loker que se me asigno y cubrí mi cuerpo desnudo con la bata que me proporciono el valet, aunque quería ocultarlo estoy demasiado emocionado por el masaje, ya que sería en una misma cabina y eso significa que la señorita Woods estaría desnuda y a la vista. Tenía una erección, si, de solo imaginarla ya estaba empalmado, recurrí a pensamiento malos para bajarla, unos 10 minutos más y ya no se notaba tanto.
Entre a la cabina y esperaba ver a mi sexi secretaria ahí pero aparecer se arrepintió o no sé qué diablo paso. Me acuesto en una de las camas de masaje la chica cubre mis nalgas con una tolla, pensaba decirle que sería un masaje a cuatro manos ya que África se arrepintió pero antes de hablar la puerta se abrió y por un instante deje de respirar, si así se veía con esa maldita bata, como se vería sin ella. Tuve la intención de pararme para apreciarla más pero mi terapeuta empezó a trabajar mi cuerpo. Vi como ella se colaba en la cama luciendo un traje de Eva, el cual le queda a la perfección. Me dolía la erección que tenía, espero y a que cuando me toque girarme haya desaparecido.
— ¡Demonios! Esto se siente malditamente bien— ella gira su rostro hacia mi dirección, no creo que mi erección baje, no, definitivamente no, esa cara de satisfacción es única, tal como ella dice esto está de puta madre, el cuero ya necesitaba algo así, —Aplique un poco más de fuerza por favor— pido a la señorita y lo hace, esto es la gloria, mi cuerpo se va relajando poco a poco.
Abro los ojos y puedo ver perfectamente el cuerpo delineado de mi exótica secretaria, las ganas de tocarla fueron más que mi cordura, me levanto y camino a su dirección. Mis manos bailan a un son muy lento sobre su piel, recorro su espalda, ¡maldición! la haría mía en este instante. Ella emite un pequeño gemido que me provoca seguir, mis manos re corren de los hombros hasta la espalda baja, ese trasero me está incitando a tomarlo y hacerlo mío. Ella se gira dejándome ver más de su cuerpo, mis ojos capturan cada parte de y mis manos exploran sin rumbo, ¡Dios! No había sentido mi erección hasta que ella la tomo en sus manos y la apretó, no aguante más, me a cerque a sus labios para tomar todo de ella, mi cuerpo se estremeció al sentirla, correspondió el beso cada vez con más intensidad, sentía que el aire me faltaba pero no quería terminar el beso.
Ese maldito cuerpo de mis deseos me vuelve loco, beso cada parte de ella, voy bajando hasta llegar a su vientre y siento como ella suspirar largamente, beso la cara interna de sus piernas, sus gemido era música para mis odios y quería seguir escuchándola, separe un poco mas sus piernas ella sabía lo que venía a continuación, se recargo con sus brazos para poder ver tal acto.
Mi boca estaba frenética devorando su intimidad, sus gemidos me deleitaban, no había motivo para parar, su cuerpo comenzó a estremecerse, pronuncio mi nombre de tal manera que todo mi cuerpo tembló al escucharlo, intento cerrar sus piernas pero no se lo permití, hasta que su orgasmo termino deje de comerla, fui directo a sus labios y me beso con tanta urgencia, no creo que la cama de masaje nos aguante a los dos así que la baje y la coloque con el pecho en la cama y me adentre en ella de una solo vez. Se sentía malditamente bien, ella dejo escapar un gemido, no se si fue de placer o dolor, pero no deje de hacerlo, una tras otra vez envestía su cuerpo, la tenía agarrada de las caderas, nuestros cuerpos chocaban, ya no nos importaba el lugar donde estábamos, alce una de sus piernas y la recosté en la cama, no creí aguantar mucho tiempo...
—Nicholas!— un golpe en mi trasero me hizo regresar, maldita sea, todo fue un sueño, mis ojos se percataron que tenía a la señorita Woods frente a mí, la bata cubría su cuerpo pero aun así no dejaba de apreciarlo —Eres un pervertido— dijo señalando la carpa que tenía, mire mi pene y esta como mástil, la toalla era lo único que lo cubría. Ella se dio la vuelta y salió de la cabima, solté un largo suspiro, esto me estaba volviendo loco, teniendo a todas las mujeres que quiera en cualquier momento y me enfrasco en una sola, loco, demasiado loco, me valió salir con la erección, llegue al área de las regaderas y me puse bajo chorro de agua.
—Yo puedo ayudarte con eso— abrí los ojos y a mi terapeuta esta desnuda frente a mí —Todo tuyo— eso basta para que se hincara, se llevó mi erección a la boca, tenía experiencia asiéndolo, la mamaba con mucha maestría, ella lleva el ritmo. Cerré los ojos imaginando que era África Woods, la tome del cabello y profundice el acto, imaginar que era mi secretaria me éxito más, tome el control y aumente la velocidad profundizando más provocándole arcadas, ella no decía nada. estoy por llegar al clímax, hice que abriera más su boca, me descargue en ella, abrí los ojos y ella me miraba con lujuria, la alce y la puse de espalda envistiéndola salvajemente, no me importo si la estaba lastimando solo quería saciarme.
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Sedúceme despacio.
RomanceAveces no es necesario tanta frialdad en una persona, aveces el calor que buscamos no esta en la gran lista de cuerpos que fueron usados para avivarnos, aveces no buscamos esa manera de salir y nos adentramos mas. Aveces solo basta una mirada cál...