「mi hogar」 「joerick」 「terminada」

Parte 4

"Vamos a ver pequeño" dijo Joel sentado en el sofá de su apartamento con el pequeño cachorro sobre su regazo. "¿Cómo te llamarás?"

El pequeño cachorrito ladró y Joel sonrió al escucharlo responderle.

Cuando había entrado al refugio, había ido directo al pequeño cachorro, dado que había hecho un tremendo escándalo tan pronto Joel había pasado el marco de la puerta.

No era el perrito más agraciado de la tierra, era un cachorro sin raza y con los pelitos alborotados mirando en todas direcciones, pero a Joel se le había derretido el corazón al verlo.

"Hmmm." murmuró Joel mientras acariciaba la cabeza del cachorro. "Tienes cara de... ¿Galleta? ¿Carlos? ¿Rayito? ¿Canelo?"

El cachorrito empezó a morder los dedos de Joel y este suspiró. No tenía idea de cómo ponerle, nunca en su vida había tenido una mascota y no tenía idea de cómo cuidar a un perro.

Se preguntaba si realmente había sido una buena idea adoptar un perrito solo para no pasar la navidad solo.

Con otro suspiro, Joel puso al cachorrito en el piso y se dirigió a la cocina. Abrió el refrigerador y sacó una manzana.

Tan pronto la mordió, el cachorrito empezó a ladrar y a saltar.

Joel lo miró confundido hasta que entendió que el pobre tenía hambre.

Y como Joel nunca había tenido mascotas, claramente no había pensado en que el pobre perrito también debía comer.

Pasando sus manos por su cara con frustración, Joel terminó su manzana de un par de bocados y caminó hasta el perchero, donde estaba su chaqueta.

Se la volvió a poner y alzó al pequeño para llevarlo consigo a la tienda de animales para comprar todo lo que necesitaría.