•Capítulo 4•

22.4K 2K 600
                                    

           

Pensaba en las distintas maneras de acercarme a mi Alfa después de escuchar que había mandado a matar a mi ex. Pero al terminar de pensar en cada una de ellas, mi estómago se contraía haciendo que tuviera náuseas. Mi cuerpo rechazaba de manera inminente al blonde, como si aquel Alfa de Manada nos hubiera hecho rechazado y abandonado, pero lo que sucedía era lo contrario. Mi cuerpo rechazaba al Alfa porque así era mi naturaleza.

—Oye, levántate. Tenemos casa sola—. La voz de Taehyung resonó en mis oídos y fruncí el ceño ante aquel fastidioso tono chillón.

—Estoy despierto hace más de media hora ¿no me ves ya bañado y vestido? —Su rostro se desfiguró en una mueca y reímos antes de levantarnos de mi cama.

Tomó mi muñeca con firmeza y me arrastró por la casa hasta llegar al patio, estaba completamente ordenado, limpio y decorado por diferentes luces, tiras colgantes con mi nombre y comida. Mi sorpresa acabó en el momento en el cual mi confusión creció ¿por qué había preparado todo esto? No era ni mi cumpleaños.

—Bien, te explicaré todo esto, ya que no lo deduces tú. Es tu fiesta de despedida de soltera—. Taehyung abrió los brazos con emoción mientras agitaba las manos pero lo que destacaba era su cara feliz y emocionada. Espero mi reacción unos segundos pero al ser nula solo dejó de hacer la pose y chasqueó la lengua.

—Es soltero, no soltera, idiota. Y no necesito una fiesta de despedida. Ni siquiera he podido hablar con Yoongi hyung más de dos minutos sin desmayarme.

—Es que solo has hablado con él una vez.

Lo miré indignado y él rió, tomó nuevamente mi muñeca y tiró de mí hasta unas hamacas cercanas a la comida, me echó y continuamente se echó a mi lado para luego con un control poner música en los altavoces del patio.

Calmada, lenta y expresando sentimientos de por medio, las baladas aunque tristes o deprimentes eran mis favoritas. Siempre hablando sobre sentimientos o desamores, esos, tan comunes a día de hoy, un día experimentas amor por alguien que, alguna vez, juro amarte eternamente, y al otro día, no dejó rastro alguno. Sonreí entre pensamientos, burlándome de mi persona, aquello parecía tan posible para mí que solo buscaba la manera de cómo lograr que no duela tanto. Mis ojos aunque cerrados me ayudaban a percibir mejor lo que sucedía a mi alrededor debido a mis sentidos agudos, percibí a alguien comiendo, Taehyung pero sorprendido estaba cuando sentí a alguien echarse en la hamaca donde se encontraba anteriormente mi primo.

—Hola, Jimin.

Esa voz.

Fuerte, gruesa y dominante.

Intenté abrir los ojos pero mi conciencia me obligó a no hacerlo, tal vez si lo hacía volvería a rechazar al Alfa echado a mi lado. Suspiré y asentí haciéndole saber que lo captaba y que sabía quién era.

—Hola, Alfa Yoongi.

Mis impulsos comenzaban a dominar mi cuerpo pero mi lobo solo desobedecía con el único objetivo de seguir junto a su amor. Suspiré tratando de controlarme y sentí la presencia a mi lado acercarse sigilosamente.

—Sé que sabes quién soy, ahora sé por qué tus padres no querían que te llevara conmigo. Eres un puro.

Asentí nuevamente, la pelea interna que tenía en aquel momento no ayudaba en nada, mis sentidos se sentían débiles debido a la poca sincronización entre mi parte humana y licántropo, mi segunda sensación de desincronización fueron pequeños espasmos que me obligaban a mover las manos o los brazos preocupando a mi Alfa, ahora sentado al lado mío.

—Jimin, escúchame. Volveré y haré que me aceptes. Hasta pronto, Minie—.Un beso en la frente selló nuestra despedida y pronto dejé de sentir su presencia en mi espacioso hogar. Mi sincronización volvió al igual que mi pequeño ataque paró, respiré dificultosamente mientras intentaba olvidar lo recientemente sucedido, pero era imposible, esa voz, esa presencia, sin duda alguna era mi tan inesperada pareja predestinada. ¿Pero qué demonios hacía en mi hogar?

¿Él es mi Alfa?[YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora