Sólo Tú [ST #1] ✔️©

Capítulo 1

Estaba perdiendo la cabeza. Hace un mes había querido hacer esto y no tomaba coraje.

<<¡Vamos Katelyn! La sociedad dice que ya eres mayor para seguir siendo virgen. Deja de serlo de una vez y ya no será un problema>> me dijo mi subconsciente.

Esto era una verdadera locura, no tendría que estar haciéndolo. Si alguien se enterara, pagaría para que la tierra me tragara pero no, estaba a punto de pagarle a alguien para que fuera mi primera vez.

Tragué saliva y suspiré.

-Puedes hacerlo, Katelyn -me animé a mi misma.

Marqué el número que tenía anotado, que me lo había recomendado una borracha en la fiesta de mi universidad. ¿Quién confiaría en una borracha? ¡Podía estar llamando a una pizzeria y yo estaría pidiendo servicios sexuales! ¡Oh por dios! Esto es un desastre.

Llamé al número antes de arrepentirme y esperé a ser atendida.

-Buenos días, somos la empresa 'Heaven'. ¿En qué podemos ayudarle? -me preguntó una voz femenina y me atraganté antes de poder siquiera hablar.

-Hola, necesito sus servicios -fue lo primero que salió de mi boca.

-¿Qué tipo de servicios busca? -me preguntó y quise finalizar el llamado de inmediato. Me armé de valor y respiré profundo.

-Sexo... casual.

-Muy bien. Tenemos variedad para elección. ¿Entre qué edades les gustaría que estuviera y cómo le gustaría que luciera?

Jamás pensé que me harían esa pregunta. Muy dentro de mi, estaba agradeciéndole a la muchacha borracha que me había dado el número. De lo contrario, hubiera perdido mi virginidad con un señor de 50 años que no hubiera sido de mi mayor agrado.

-Entre los 23 y 30. La apariencia no importa demasiado -oí una risita desde el otro lado de la línea.

¿Acaso se estaba riendo de mi?

-Señorita, puede elegir lo que usted desee. ¿Musculoso, alto, rubio, moreno de ojos azules? Usted elige, nosotros trabajamos para satisfacer sus necesidades.

Vaya mujer directa era.

-Mmm... -comencé a caminar nerviosa por mi departamento -. Alto, moreno y algo musculoso, no demasiado -me atreví a pedir.

Sentía que estaba pidiendo un menú de comida.

"Alto y no demasiado musculoso con papas y salsa" pensé y reí a mis adentros.

-Muy bien. ¿Para cuándo desea el servicio?

Hoy era sábado a la noche. Generalmente, nadie pasaba a visitarme los sábados.

-Esta noche.

-Estupendo. El nombre de su trabajador es Sean y pasará por
su casa esta noche a las 8 p.m. ¿Podría darme su dirección y su nombre?

Golpeé mi dedo pequeño con una mesa y chillé.

-Mierda -se me salió.

-¿Disculpe? -la oí decir.

-Lo siento, acabo de golpearme.

Acabé por darle la dirección y mi nombre, acordar el precio y finalicé el llamado. Suspiré y me dirigí hacia la ducha. Me di un baño rápidamente y observé la hora. Eran las 6 p.m. Me perfumé un poco, dejé que mi cabello se secara al natural y me puse muy poco maquillaje, lo suficiente como para no parecer una muerta. Vestí un vestido, fácil para quitar, y me observé al espejo.