Viviendo con ¿Nerds?

3. Sintiéndome caritativa

DIA 1 - 16:02 P.M.

Termine de guardar las cosas en mi bolso y me retire de la sala de clases.

Fui lo más rápido posible al Starbucks más cercano y compre un cappuccino, luego me dirigí a la mesa de mi fraternidad encontrándome con Kyle, Sky y Sam.

- Hola chicos.- salude mientras tomaba asiento.

- ¿Julie? ¿Qué haces aquí?- me preguntó Kyle- ¿ya te rendiste?

- ¿A qué te refieres?- lo miré confundida.

- Oh... pobre Julie ¿no te lo dijeron?- dijo Sky haciendo un puchero- al ya no vivir en nuestra fraternidad, tampoco puedes sentarte en nuestra mesa, ni juntarte con nosotros o siquiera hablarnos, es como si nunca nos hubieras conocido... ¿comprendes?

¿Qué? No me puede estar pasando esto... pero no puedo rendirme, desde siempre mi sueño ha sido ser la presidenta de mi fraternidad y ahora tengo la posibilidad de cumplirlo.

- ¿Enserio? No lo sabía... lo siento, entonces me voy.- anuncié con dignidad, observando el rostro de Sky que paso de ser una mirada desafiante a una llena de odio y rencor.

Fue en ese momento en el que me levante y sonreí triunfal dirigiéndome a... esperen ¿Dónde voy?

Acabo de perder a todos mis amigos por todo un mes y ahora se supone que tengo que hacer mi salida victoriosa. Empecé a entrar en pánico hasta que sentí un brazo alrededor de mis hombros.

- Nena, aquí estabas ¿Dónde te habías metido? Llevo horas esperándote afuera.- dijo una voz un poco demasiado alto. Me gire y me sorprendí al ver a un sonriente Mike mirándome con cara de "sígueme la corriente".

- Oh.- alargue sobre actuadamente- es que estaba saludando a unos amigos pero justo ahora iba a buscarte.

- Entonces vamos, ya no tienes nada que hacer aquí.- me empujo sutilmente hacia la puerta.

- Mike, eres mi héroe, es la segunda vez en el día que me salvas.- le agradecí apenas salimos del Starbucks.

- Yo solo lo hice para tener un café gratis.- dijo arrebatándome el cappuccino de las manos- entonces... ¿Qué harás ahora, chica solitaria?

- Buscar nuevos amigos, creo.- le respondí mientras caminábamos devuelta al campus.

- Ya lo encontraste.- sonrió- aunque estoy defectuoso y definitivamente el hecho de que quiera estudiar diseño me convierte en un raro.

- Pues, estaría feliz de usar tus diseños.- le devolví la sonrisa y agarre su brazo.

- ¿Viste la cara de la perra de Skyler cuando te levantaste? Fue épico.- exclamó mientras cruzábamos la calle- no sé cómo aguantaste tanto tiempo durmiendo en la misma habitación que ella.

- Lo mismo digo... ¿Qué haremos ahora? ¿Qué haces usualmente en la hora de colación?

- No sé, siempre voy a Starbucks y luego... voy a algún parque a leer o escuchar música.- respondió pensativo- respondiendo a la pregunta que acaba de aparecer en tu mente. Si, voy solo ya que Mark y Cameron siempre están en alguna clase extra, Luke y Dylan van a la biblioteca a estudiar y Brad va a casa y se encierra en su habitación a hacer quien sabe qué.

- Me estás diciendo que... ¿ustedes seis viven juntos y con suerte se ven cuando se cruzan por el pasillo?- pregunte incrédula.

- Exactamente.- dijo asintiendo- Juls, necesito ir a buscar algo a la casa ¿me acompañas?- me pregunto esperanzado.

Asentí y empezamos a caminar hacia la casa, cuando llegamos Mike entro rápidamente y subió las escaleras, yo decidí ir a la cocina -que por cierto no sabía dónde estaba y tarde horas en descubrir que era la primera puerta a la derecha- entre y abrí la nevera. Como era de esperarse, estaba vacío salvo por una caja de leche, la saque y vi la fecha de caducidad ¿2013? Oh por Dios, que asco. Deje todo en su lugar y salí de la cocina empujando a Brad a mi paso y cayendo encima de él.

- Lo siento, no te vi.- explique con la voz entre cortada por la cercanía de nuestros rostros. ¿Desde cuando Julie Hamilton se pone nerviosa con un chico? Nos levantamos rápidamente.

- ¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar con tus amigos?- me preguntó.

- Resulta... que ya no son mis amigos o al menos no por este mes.- le expliqué.

-Pero hay otras fraternidades que estarían encantados de tenerte como amiga...

- Tal vez sí, pero prefiero a Mike es más divertido.- mentí, si me juntara con los de otra fraternidad la mía lo vería como traición y perdería mi título de presidenta- pero cambiando de tema... ¿sabías que hay una leche en la nevera que caduco hace dos años?

- No, pero no me extraña. Todos comemos por separado en esta casa, excepto Mark y Cameron que comen juntos la mayoría del tiempo.- dijo encogiéndose de hombros.

- ¿Crees que pueda juntarlos a todos incluyéndote para hacer algo algún día?- pregunté esperanzada.

- Solo si encuentras algo que a todos nos guste.- me informó- buena suerte con eso- dijo antes de subir las escaleras y encerrarse nuevamente en su habitación.

Minutos después Mike bajo las escaleras y me hizo una seña con la cabeza para que saliéramos, en el camino de vuelta a clases vi a un viejo amigo discutiendo con una de sus 'chicas de una noche'.

- Prometiste que me llamarías.- dijo la chica.

- Lucy... es que...- empezó Jeremy pero luego se quedó en blanco.

Y eso pasa cuando te acuestas con una chica que espera más que solo sexo, decidí ayudarlo un poco por lo que me acerque a él y lo abracé.

- Hola cariño, ¿Quién es esta?- me miró y luego suspiro de alivio.

- Nadie bebe, solo una chica que conocí el otro día y no quiere entender que yo a la que amo es a ti.- dijo actuando tan bien que hasta yo le creí.

- Espera... ¿Tienes novia?-pregunto la chica mirando desconfiada la escena.

- Hace un año, tres meses y cuatro días ¿Por qué, querida? ¿Creíste que este chico tan sexy estaría soltero?- observe como su cara se ponía roja de vergüenza o quizás rabia-oh... si lo hiciste.

- ¡Perra!-exclamo mirándome con recelo.

- No más que tú, ahora vete que arruinas mi tiempo a solas con mi novio... apropósito ¿trajiste los condones cierto cariño?- pregunté aguantándome la risa.

- Compre dos cajas... prepárate mi vida.- y eso basto para que la chica saliera hecha una furia por el pasillo- Julie eres tan malvada.- dijo riendo- me salvaste la vida... si hay algo que pueda hacer por ti no dudes en decírmelo.

- De echo... creo que hay algo en lo que podrías ayudarme.-dije sonriendo.