¿Fue solo una farsa? ¿Una mentira despiadada?
Jungkook, integrante de un grupo musical, se ve sorprendido por la repentina salida de su novio, Jimin, quien decide retirarse del grupo y poner fin a su relación de cinco años. A pesar de la tristeza y...
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Los mensajes no cesaban de llegar, notificación tras notificación inundaban mi pantalla, generando una preocupación y abrumadora ansiedad. Mi mente giraba en un torbellino de noticias, incapaz de procesar con claridad lo que estaba sucediendo. Decidí ingresar a Twitter para entender de una vez por todas el revuelo que se había desatado.
Mi desinterés se desvaneció por completo cuando visualicé mi nombre entre las tendencias. ¿Qué había ocurrido? ¿Y por qué estaba yo involucrado en esto?
Jimin...
Fotos y vídeos de él inundaron mi pantalla, y mi celular vibraba incesantemente. La situación se volvía cada vez más intensa.
Dejé caer el celular y alcancé el control remoto para encender la televisión. No necesité sintonizar un canal de noticias, ya que, al encenderla, el rostro de Jimin apareció de inmediato.
—Parece que el cantante más querido de la industria sigue en problemas. Buenas tardes, les habla Kim JeahMo reportando las recientes noticias. Al parecer, el mánager de Park Jimin ha sido arrestado después de confesar abiertamente que asesinó a diecinueve de sus colaboradores de la agencia JJG Entertainment. Además, se ha identificado al responsable de estas trágicas muertes. Aún no se ha revelado el motivo detrás de tan atroz acto, y la situación continúa siendo un misterio. Park Jimin fue visto saliendo de una corte acompañado de oficiales armados, mostrando moretones en su rostro, su nariz rota sangrando y una herida delicada en su ojo izquierdo, aunque no se reportaron cargos en su contra.
Mis ojos se abrieron de par en par, mi respiración se entrecortó y mis manos se enfriaron por la nerviosa inquietud. Dejé de prestar atención a la televisión, sintiendo cómo mi visión se nublaba y mi mente se sumía en la confusión. ¿Qué demonios acababa de suceder?
Sin percatarme de lo que ocurría afuera, la puerta se abrió de golpe, revelando la figura de Taehyung en la entrada. Avanzó rápidamente y me abrazó, dejando que el peso de la incertidumbre se hiciera presente entre nosotros.
— ¡Jungkook! — permanecía congelado, mis manos temblaban sin control y la respiración entrecortada dificultaba mi concentración.
— ¿Taehyung? ¿Qué... haces aquí? ¿No estabas en Miami? — me abrazó con fuerza, sintiendo su propio temblor.
— Regresé hoy en la madrugada, solo estaría seis meses en Miami. Vi las noticias en el avión y no dudé en venir a buscarte. — tocó mi brazo y dirigió su mirada hacia mi celular. — Supongo que ya viste lo que está pasando...
— ¿Qué pasó? — jadeé, aún desconcertado.
— Jung Jayling le puso una demanda a Jimin por incumplimiento de confidencialidad y... — lo interrumpí.
— ¿Incumplimiento de confidencialidad? —exclamé. — ¿¡Qué!?
