Nos volvemos a ver.

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Bonnie Bennett al fin estaba lista, su hechizo de ocultismo duraría justo el tiempo que necesitaba para sacar a Caroline de la tumba, había una manada de lobos fuera, tendría que ingeniárselas, sus aliados no tardarían en aparecer para hacer que los mataran por imprudencia. Caminó a paso lento, tratando de no chocar con ninguno o no acercárseles tanto, aunque viéndolos ahí, tan distraídos, su sed de venganza la estaba consumiendo, quería sacarles el corazón una y otra vez, quería encontrar la manera para que murieran permanentemente, pero simplemente no existía, al menos no en su conocimiento. Algo los creo, pero no era un árbol de roble blanco, no podía serlo, se re usaba a creerlo así ya que solo obtuvieron una ultima arma que Esther tenia oculta, esta es diferente, apuñales con ella o no en un original jamas se quemara, no como todas las demás. En los lobos podía ser diferente. Esa era la única ventaja de Damon, y ella debatía en si arrancársela de las manos o no. Al fin del día, ¿Qué hizo para merecerla? o al menos, ¿Qué hizo para conseguirla?
Al fin entro, pero ahora era diferente, era mas grande, pasadizos mas largos y la oscuridad mas elevada, o tal vez eran solo las partes que jamas llego ha ver de todo el subterráneo.
Llego a un lugar donde se dividía en dos, tenia que pensarlo con cuidado, tomaba el lado derecho y si no se equivocaba, seguiría oculta y sacaría a Caroline antes de que se arruinara algo, o tomaba el lado izquierdo y si estaba cometiendo un error pasaría simplemente lo mismo.
-Piensa- dijo ella y vio hacia arriba, se quedo mirando seis o siete segundos y tomo su decisión- izquierda será.
Estaba a punto de meterse a lo desconocido cuando escucho a Caroline hablando
-Por favor, basta...- imploraba la vampiro con la energía agotada- Yo no se donde conseguir esa maldita estaca!- ahora era un grito furioso, parecía que hace algunos segundos no estaba tan dañada  y débil.
Bonnie lo escucho por el lado al que se dirigía, así que iba a retomarlo y no salir huyendo de nuevo, pero antes de volver a entrar alguien la tomo de la cadera y puso su mano derecha en la boca de la chica.
La llevo hacia el lado opuesto y de pronto la volteo hacia el. Era Stefan. Las defensas de Bonnie ahora eran las débiles, no podía siquiera creerlo, mucho menos procesarlo. Trago saliva y quiso hablar pero Stefan le pidió que callara. Después de algunos minutos se comenzó a escuchar ruido, lobos jugando y retándose. Ya es cuando pudieron hablar.
-¿Cómo...
-Hola Bonnie
Ella sonrió y lo abrazo, este se sorprendió pero después de algunos segundos se lo devolvió.
-Hey- dijo ella- Hey...- repitió
En algún punto se soltaron.
-Donde esta Caroline existe un tipo de radiación, el tipo de radiación que te mata a ti y a mi me expulsa fuera de la tumba.
-La quitare o la reduciré a un mínimo. Solo dime cómo es que estas aquí, cómo me estas viendo si use un hechizo para poder ocultarme...
-Soy un fantasma Bonnie, esa es una de las pocas cosas que puedo hacer.
-Se suponía que estarías en paz...
-El otro lado se re abrió, ¿Cómo no lo sabias?
La cara de sorpresa de Bonnie se intensifico.
-Después te contare este problema, ahora lo que importa es sacar a Caroline.
-Mi hechizo de ocultismo durara 10 minutos o menos. Puedo quitar la radiación en dos.
Y así lo hizo, desvió la radiación hacia el otro lado y ambos entraron a por Caroline. La chica estaba inconsciente, atada a cuerdas de verbena y llena de dardos en toda la espalda. La cara de Stefan hizo a Bonnie sonreír lastimosamente de nostalgia, el se alegro de verla pero no podía sonreír mirándola de esa manera. Bonnie desato a la chica y al tocarla el hechizo se expandió hasta la vampiro, ahora ambas eran inmunes a la vista de quien sea. Stefan la tomo en sus brazos.
-Todo estará bien Caroline- dijo besando su frente- Salgamos de aquí.
Casi al fin lograban salir del subterráneo cuando Stefan sintió que estaba siendo arrastrado, y tuvieron que detenerse. Bajo a Caroline y  comenzó a escupir algo color negro.
-¿Qué me esta pasando?- dijo el- Bonnie...
-El otro lado te pide algo... sigamos, después hablaremos de esto.
Salieron al fin y caminaron a paso lento, estaban saliendo del bosque cuando escucharon que Klaus Mikaelson estaba ahí.
-Idiota- dijo Bonnie
El hechizo al fin se deshizo y de nuevo era visible, igual que Caroline. La chica seguía dormida, descansando en la camioneta de Bonnie.
-Tengo que regresar- ella dijo- Klaus me necesita.
-Si, o tal vez estas preocupada que alguien mas allá ido a la misión estupida.
-Ya no quiero otra persona fallecida en la lista de gente que conozco y que a Caroline le importa.
Stefan la tomo del brazo.
-Entonces voy contigo, estoy muerto, ¿Qué más podría pasarme?
Klaus estaba rodeado de todos ellos, Stefan y Bonnie se separaron para poder contraatacar si se requería por diferentes lados, esperaban alguna señal.
-¿Dónde esta ella?- pregunto Klaus- díganme ahora porque no vine a hacer tratos con ustedes.
-Esta aquí , la podrás tener a cambio de la ultima e indestructible daga de los originales.
-¿No quieres intercambiar a la rubia por algo mas?- Damon estaba ahí- No se...¿una cena de alitas de pollo? ¿Crema incluida?
Bonnie percibió la felicidad que Stefan tuvo al ver a su hermano, era una sensación llena de vida.
-La estaca, ahora.
-Queremos ver si la Barbie vampiro sigue con los ojos abiertos- Damon rezongó
Alguien tomo a Stefan de sorpresa
-Mira Steven, me encontré a alguien curioso en los arboles.
Los Salvatore al fin tuvieron contacto directo y era como si se les devolviera cada pedazo de humanidad que les había sido arrebatada. Lo triste es que no podían sonreír o seguir manteniendo contacto, si habían esperado casi un siglo para volver a verse, podían esperar algunos minutos u horas mas.
-Te me haces familiar- dijo el licántropo que parecía mantenerlos al margen a todos- Así que curioso...
-No conozco a ninguna de estas personas...- Stefan mintió- Solo escuche de ustedes y quería ver lo que podían hacer.
-¿Y te impresionaste?
-Pues... me decepcione bastante. Ya que aquí huele a muerto y su rehén desapareció y nadie se tomo la libertad de descubrirlo.
-¿Huele a...
-Soy un fantasma, un gusto.
Stefan rompió la mano del chico que estaba sosteniéndolo bruscamente y después desapareció.
-Bueno señores... un gusto hacer tratos con ustedes.- Damon dijo y salió corriendo con su super velocidad casi al mismo tiempo que Klaus.
Bonnie se quedo ahí, no supo si correr u ocultarse. Alguien la tomo por detrás, creyó que era Stefan y se tranquilizó, pero el pequeño ''Ssh'' que recibía cerca de su cuello no era Stefan. Camino a paso rápido hasta estar lejos de los licántropos que buscaban a los vampiros. Bonnie hizo otro hechizo de ocultismo, el chico seguía detrás de ella sin decir una palabra. Llegaron a la cripta que la mantendría a salvo, de hecho el la llevo ahí, como si supiera que estaba asegurado ese lugar.
Bonnie cerro los ojos mientras el chico seguía detrás de ella, sujetándola de las manos, respirando en el cuello de la bruja.
-Enzo-susurro ella.
-Hola amor- dijo

Volviendo a lo que fue Donde viven las historias. Descúbrelo ahora