Volviendo a lo que fue

¿Algun otro fantasma para regresar?

Pasaron tres semanas, algunos cazadores habían renunciado, y los fieles seguían buscando formas de destruirlos a todos. Enzo había desaparecido, nadie sabía de él. Stefan y Lydia buscaban locamente respuestas sobre el otro lado, Kol estaba teniendo más participación y voz, Caroline, Rebekah y Klaus salían cada mañana a la escuela Salvatore y demás lugares para encontrar cualquier hechizo de esa clase de desliga miento.
Damon, Bonnie y Jackson hacían lo mismo pero desde casa, grimorios del linaje de Bonnie y libros que Damon había tomado a lo largo de los años por su seguridad.
-¿Y Bonnie?.- preguntó Jackson entrando a la casa.
Todos parecían inconscientes ante la ausencia de ella. Salió y fue a su auto. Ahí estaba, sentada arriba de la cajuela.
-Al menos no estás dentro de ella esta vez.- sonrió sentándose al lado de ella.- ¿Estas bien?
-Si.- dijo sonriendo.- Creí que no lo  estaría por no terminar mi venganza, pero estoy donde quería, rodeada de personas que quiero. Solo necesito que sigan aquí. Y no puedo hacerlo, el hechizo de Liv...
-Así que Damon, ¿Eh?
El cambio de tema fue brusco.
-¿Perdón?
-Siempre tuve terror al fantasma de Enzo, jamás creí tener que preocuparme por Damon.
-Jamás creí tener que preocuparme por Damon tampoco. Estoy igual de sorprendida que tú.
-¿Estas enamorada de él?
Ella asintió.
-¿Por qué?.- preguntó el queriendo jugar con las palabras pero no podía. Algo que siempre le pasaba.
-Por lo mismo que lo odie mucho tiempo, porque me reta, porque saca mi lado salvaje, mi lado que opacaba, porque me hace sonreír aunque esté lleno de idioteces en la cabeza, porque... me protegía, me protege y se preocupa. Estoy enamorada de él porque jamás dudo de mi por un segundo, sabe de lo que soy capaz y no me retenía. Lo amo por ser el aunque el que sea el me irrita.
Su asentimiento fue triste.
-¿Estas bien?.- ahora ella era la que hacía la pregunta.
-El presenciar que te enamores de otra persona frente a mi duele.
-¿De qué hablas Jack?
-Que sigo enamorado de ti. Y duele.
Esa confesión le cayó de golpe, no podía procesarlo.
-¿Qué?.- fue lo único que pudo decir.
-Ya te lo había dicho antes, ¿Quién no lo estaría?
-Creí que...
-Estaba rodeado por toda esa venganza pero siempre supe lo que sentía, todo eso se magnifico Bonnie, me di cuenta que eras y siempre serás el amor de mi vida. Pero algo en mi había cambiado, me dolió ver como poco a poco perdía tu confianza, tu amor, y ahora el ver como te enamoraste de otra persona.
-Si lo hubieras dicho...
-Pero no lo hice.
-Jamás fue mi intención lastimarte, lo siento.
Se acurruco en el.
-Siempre te amare Jackson, siempre serás el chico lindo y lleno de sonrisas que conocí en un bar y que se convirtió un día en mi esposo.
-Siempre serás la chica hermosa y con poder que entró en mi bar y se convirtió en mi esposa. Siempre te amare Bonnie.
Ambos cerraron sus ojos y lágrimas corrieron por sus mejillas.
Damon, como de costumbre escucho todo y se adentró al bosque con una sonrisa bien marcada.
Crujidos por la derecha, crujidos por detrás, pero al voltear no había ni un alma presente.
Su celular timbró e hizo que le diera un susto de muerte.
-¿Bon?
-Creemos que hay alguien más afuera, ¿Dónde estas?
Fue en un segundo y ya estaba donde Bonnie que se encontraba sola.
-¿Escuchaste algo?
-Si...
-Entremos.
Las puertas se cerraron y el ruido de una ventana rompiéndose en pedazos despertó a Caroline, que dormía en una de las habitaciones. Aunque estaba un poco mareada y no le tomó mucha importancia.
Alguien empujó a Damon y cuando logró voltear su cuerpo se puso encima de él. Era una mujer de cabello castaño, con rasgos parecidos al de alguien conocido, era casi idéntica a Isobel. Fue directo a los labios de el chico que retenía en el suelo y le besó frente a todos.
Este alcanzó a recobrar el aliento tarde, y la empujó haciendo que se golpeara y rompiera una silla de madera.
-¿No me extrañaste?.- preguntó ella levantándose un poco a dolorida y acercándose nuevamente a él.

Damon volteo a ver la cara de molestia de Bonnie.
-¿Qué haces aquí?
-Como dije... te extrañe.
Caroline al fin salió de la habitación y sorpresa gigante que se llevó al ver a la chica.
-¿Miranda?
-¿Tia Care?
-¿Qué haces aquí?
-Vine a visitarte tía... claro.
El fruncido ceño de todos hizo a Caroline dudar.
-¿Tía Care?.- Damon tomó control de la situación por un instante.
-Es Miranda... Gilbert, la hija de Elena.
Y el control de la situación se deshizo de inmediato, el mundo entero de Damon se vino abajo, tuvo una reacción tan humana que se sintió el calor y la tensión en el aire. Su corazón muerto se detuvo, sus manos temblaban y no podía seguir teniendo la compostura. Los ojos azules que tenían ahora no eran el cielo, eran un lago más queriendo estallar.
-Maldita sea...- al fin expresó.
-¿Cómo conoces a Damon?.- Caroline se acercó a Miranda, ni siquiera un saludo de cortesía fue dado.
-Damon es mi creador. ¿Cómo lo conoces tú?
La rubia le obsequió al chico una mirada llena de juicio.
-Damon era el amor de la vida de tu madre, el hermano de mi esposo, el vampiro temible de todas esas historias que contábamos en la escuela Salvatore. ¿No te suena?
-Si, si me suena.
Rodeo a Caroline y fue directamente con Damon poniendo su mano en el pecho de este.
Damon la movió lenta pero bruscamente.
-¿Tu lo sabías? Convertí a la madre de Elena en vampiro , después a... Eres su hija.- al fin creía lo que decía aunque pareciera imposible.
-¿Tuviste sexo con la hija de Elena?- Bonnie preguntó.-Wow! Creí haberlo visto todo.
-Yo no sabía Bonnie.
Miranda desvío su mirada hacia Bonnie.
-¿Bonnie Bennett? Aka ¿La mejor amiga de mamá?
La morena seguía molesta pero asintió.
-Y mi novia.- Damon aclaró, aunque no sabía como esa palabra sería tomada por su "novia".
-Vaya... y decían que era la más leal.
-¿Qué haces aquí Miranda?
-Creo que me metí en algunos problemas.- sonrió tiernamente.
A Caroline parecía no caerle nada bien la chica, Damon estaba afectado por todo, sentía que una vez más le fallaba a Elena, se ofreció lindamente en ayudarla en lo que necesitara pero se salió de la casa una vez Miranda se distrajo.
Bonnie salió tras el.
-Hey extraño...
-Hey...
Veía al cielo y estaba inmóvil.
-Convertí a la hija de Elena en vampiro y me acoste con ella.
-Como dijiste, tú no sabías.
-Le arruine la vida a Elena incontable de veces, pero convertir a su hija en un monstruo como lo que ella siempre repudió...
-Según Jason dijo que cuando Elena murió Miranda se convirtió.
-Apago su humanidad... me dijo que quería ser fuerte y se controlaría, y le creí, porque había algo en ella que...
-¿Te brindaba confianza?
-Es muy parecida a Isobel ahora que la veo de esa manera. Yo metiéndome con una Gilbert, que novedad.
-Y parece que está enamorada de ti.
-¿Por qué lo dices?
Bonnie volteo a ver al chico que le hacía la pregunta viéndole los labios solamente.
-Porque te ve de la manera en la que tú a mi.
Sus ojos azulados subieron a los verdes de ella.
-¿Con deseo? ¿Pasión? ¿Admiración?
-Exactamente...- mordió su labio inferior y se acercó a él dándole un beso en la mejilla.- No pienso poner mis labios donde esa niña los puso hace algunos segundos.
-Bonnie... me tomo desprevenido. Los únicos labios que quiero besar son los tuyos, siempre.
Esta sonrió.
La chica salió interrumpiendo.
-¿Y bien? ¿En qué quieres que te ayude?
-Quería besarte porque sabía que cuando te dijera esto jamás lo harías de nuevo. Mi humanidad volvió hace algunos días y... desenterré a mamá y le pedí a un brujo que la reviviera.
-¿Reviviste a Elena?
-Algo salió diferente y...
Damon sintió como si le dieran algo y se lo arrebataran al mismo tiempo, no era natural claramente pero necesitaba hablar con la chica tan siquiera una vez más.
-¿Entonces qué pasó?
-Asesinó a alguien para poner el alma de mi mamá dentro del cuerpo.
-¿Y de qué cuerpo?
-Resulta que era el único modo de traer completamente a mamá pero el daño fue demasiado, rompimos toda una secuencia, todo un linaje, todo un universo planeado... mato a la nueva y última ahora doppelgänger Petrova.
La castaña apareció de entre los árboles, era ella, era Elena.