–Ok, basta de mandarle cosas a Lena, necesitas un encuentro directo con ella, ¿Entendiste?- señaló el moreno.
La reportera le asintió entusiasmada. Después de la conversación anterior decidieron actuar lo más pronto posible, Kara iría a ver a Lena y le pediría una cita adecuada, mientras James se encargaba de la competencia.
–Sé que lo harás, buena suerte.- coloco una mano en su hombro en señal de apoyo y se marchó del lugar.
Una vez sola, respiro lento tratando de calmarse pero su corazón parecía tener otras ideas, resignándose se encaminó hacia la puerta y al abrirla, un sobre blanco cayó frente a ella.
Confundida, cogió el sobre del suelo con precaución, al abrirlo encontró una nota.
"Si deseas información sobre los alienígenas y su inclusión en la tierra, ve a esta dirección. XX"
Era lo único que decía, seguramente era información falsa, pero seguía siendo una reportera, además conseguir información sobre los alienígenas era difícil, no estaría mal echarle un vistazo.
Tomó el bus y llego a la dirección indicada, no vio nada fuera de lo normal, solo que había pocas personas transitando, pensó que era mejor irse cuando de la nada sale una mujer castaña, vestida con falda y tacos medianos.
–¿Eres Kara Danvers?- preguntó con una sonrisa.
–Ah... Si, usted debe ser- pero fue interrumpida por la misma mujer.
–Maravilloso, te hemos estado esperando, por favor sígame.
–E-espere.- trato de hablar pero la mujer le agarro de la mano haciéndola caminar, estaba muy confundida e iba a protestar pero antes de poder hacerlo la mujer abrió una puerta frente a ella y la empujo dentro.
Estaba oscuro, se giró a la puerta pero estaba cerrada por fuera. De pronto, la habitación se iluminó por completo mostrándole una escena que únicamente solía ver en sus sueños.
Había montañas, literalmente montañas de todo tipo de comidas, desde platillos fuertes hasta postres e inclusive bebidas naturales, y la variedad de todos ellos no era para nada cuestionable. Kara casi sufre un desmayo al verlo.
–Bienvenida.- sonó desde unos altavoces que apenas había notado. –Este es un reto que una amiga suya a puesto para usted, sí desea salir debe encontrar la llave que está escondida en algún lugar bajo toda esa comida, no existe el tiempo límite así que no se apresure. Buena suerte.
La voz no volvió a sonar, realmente no le importaba sólo sabía que tenía que salir, debía ver a Lena. Esta situación le recordó a una película de terror que Alex le había contado aunque, más que una tortura aquello parecía un regalo, así que se puso manos a la obra.
No sonaba difícil encontrar la llave o eso es lo que pensó.
....
–Kara, ¿Dónde estabas? Te llamé varias veces.- dijo el moreno algo molesto, pero su amiga no contestaba, sólo estaba acostada en su cama boca abajo sin mostrar algún movimiento.
Ya eran altas horas de la noche, después de hacer su cometido, llamó a Kara para saber cómo iba, pero la rubia jamás contestó, eso hizo que se preocupara y fuera a buscarla, no la encontró, incluso había aparecido en su apartamento varias veces, pero no la había hallado. Después de varias horas pudo ver la luz del apartamento finalmente encendida, no dudó en adentrarse y se encontró a la chica en ese estado.
–Supongo que estas bien.- esperó, pero no hubo respuesta. –Volveré mañana, ¿Está bien?- esta vez la rubia le dio un pulgar arriba como respuesta, una muy lenta respuesta.
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Problemas; Supercorp
أدب الهواةProteger Nacional City y llevar una vida de reportera parece un poco difícil, ¿no crees? Necesitas ayuda pero, ¿quien mejor que tu para hacer el trabajo? Nadie. Entonces, ¿seria mas fácil si hubieran dos como tu? Algo así...