Problemas; Supercorp

Capítulo 21

–¿Alex?- dijeron al unísono.

Esta extraña interrupción había dejado a todos en la habitación congelados. Alex estaba confundida al ver a sus hermanas allí, pero pronto se dio cuenta de que aún seguía muy cerca de Lena, así que se separó de ella. Este movimiento pareció despabilar a las rubias.

–Alex.- dijeron muy bajo esta vez con incredulidad, seguían sin poder creerlo o entenderlo. No pudieron soportar estar allí más tiempo así que se fueron lo más rápido que pudieron.

–¡Esperen!- escucharon de su hermana, pero nada podía detenerlas ahora.

La habitación del CEO estaba en completo silencio después de eso. El cerebro de Alex corrió a mil por segundo tratando de comprender lo sucedido, entonces recordó el rostro de sus hermanas al verla y lo entendió. Les debía una explicación a sus hermanas.

Se giró rápido hacia Lena y le tendió una tarjeta, pero la pelinegra parecía perdida.

–Lena.- la llamó.

Parpadeó un par de veces confundida y miro al Danvers mayor sin entender.

–Es mi número.-continuó con prontitud, pero las respuestas de Lena seguían igual de lentas, así que tomó su mano y colocó su tarjeta. –Tengo que irme, haré que alguien arregle esto.- hizo un gesto a la habitación. –Considera lo que te dije, nos vemos después.

Y con eso la habitación se quedó con una sola persona en ella.

...

–¡Vamos, contesta!- dijo con su teléfono en la oreja recibiendo la misma respuesta de la operadora.

Luego de salir de L-Corp lo primero que hizo fue llamar a sus hermanas pero ninguna respondía y no tenía ni idea de dónde encontrarlas.

Antes de marcar de nuevo, su teléfono vibro en una llamada entrante, se desilusionó al ver que era solo del trabajo. Suspiró antes de responder.

...

Una vez llegó al DEO se sorprendió al encontrar a J'onn J'onzz esperándola.

–Hemos logrado grandes avances.- dijo luego de un breve saludo.

–¿Disculpe?- respondió confundida.

–El arma que regresará a Supergirl a la normalidad.- dijo después de mirarla severamente.

–Cla-claro.- se sacudió tratando de concentrarse y despejar los últimos acontecimientos de su mente.

Suspiró. –El trabajo que se ha invertido en ello no había rendido ningún fruto, hasta ahora. Logramos descifrar cómo crear un prototipo casi idéntico, el único problema es su fuente de energía.

–¿Algo así como su batería?

–Podrías llamarlo así.- se encogió los hombros. –No hemos logrado recrear aún esa parte.

–¿Cuánto tardará en armar el prototipo?- dijo mientras su mente estaba concentrada en una muy posible solución.

–Cuatro días, una vez obtengamos la energía, tres días más para estabilizarla.- concluyó con seriedad.

–Ya veo.- a lo lejos pudo ver como Winn se acercaba alegremente. No pudo evitar entrecerrar los ojos solo con verlo.

–Hola Alex, y Jefe.- saludó con una sonrisa.

–Buena suerte agente.- se despidió con algo de gracia mirando al recién llegado.

–¿Suerte? ¿Por qué necesitaría suerte?- preguntó confundido, pero al ver el semblante de Alex dio un paso atrás de inmediato.

–Eh... ¿Alex?- dijo temeroso, ante la mirada asesina.

–Winn.- respondió lentamente.

–¿Lo siento?- intentó.

–¡Winn!- gritó haciendo que el chico saltara y temiera por su vida.

...

Suspiró al cruzar por la puerta, tuvo un día muy ajetreado, pero aún no terminaba, faltaba una cosa por hacer.

Se adentró con cautela mientras buscaba algún rastro de sus hermanas, no encontró ninguno hasta que llegó en su cuarto, al parecer habían decidido irse dormir.

–Supongo que... Buenas noches.- dijo torpemente sin saber que más decir, ninguna respondió y estaba casi segura de que aún estaban despiertas.

Suspiró al ser ignorada, y se dirigió al sofá, se le había quitado el apetito, se recostó por un rato pensando en cómo solucionar este problema, no había peleado con su hermana desde hace mucho tiempo, siempre habían sido Alex y Kara. Sin notarlo, cayó perdidamente en un sueño profundo.

...

El sonido de una puerta cerrarse la hizo sobresaltar, miró a su alrededor y no encontró nada más que vacío, sus hermanas se habían ido, revisó su reloj y notó que aún no era la hora habitual de salida y sabía que ella era la razón de ello.

Había desperdiciado una oportunidad, se lamentó. Luego de unos minutos sacudió su cabeza y se decidió, hablaría con sus hermanas como a de lugar.

Fue más fácil decirlo que hacerlo, cada rubia se las ingenió para evadirla, siempre tenían una razón para no estar con ella y las únicas palabras que cruzaban eran puros monosílabos, hasta Maggie parecía enojada con ella y no sabía porque.

De esa manera pasaron los siguientes dos días, y cuando tuvo a suerte de atrapar a Kara, su celular sonó cortándola antes de que pudiera comenzar, y tomó la mala decisión de ver el identificador de llamada en ese momento.

Kara se deshizo de su agarre tan pronto como vio quien la llamaba y se marchó sin mirar atrás. Alex trato en vano detenerla pero ya se había ido.

Suspiró y tomó la llamada. –Hola Lena.

***

Melissa sobrevolaba la ciudad tratando de encontrar un poco de consuelo, pero su mente pensaba lo contrario recordándole a Lena y Alex, sabía que su hermana les debía una explicación, pero no podía deshacerse de la sensación de engaño y tristeza que la albergaba.

Aunque Alex jamás les dijo que no estaba interesada en Lena, quizás le gustaba Lena desde el principio y no lo notaron.

Sacudió su cabeza, tal vez sólo estaba imaginando cosas, tendría que darle una oportunidad a Alex.

Aprovechó que estaba libre y buscó a su hermana, no tardó mucho en encontrarla, la localizó no muy lejos de donde estaba, se extrañó al encontrar un restaurante, ¿Por qué Alex estaría en uno?

Se acercó lentamente y lo que vio fue cómo un puñetazo al estómago, Alex no estaba sola, estaba con Lena aparentemente terminado de comer y alistándose para irse, la peor parte fue cuando su hermana tocó el hombro de Lena mientras le decía algo que provocó la risa del CEO.

No pudo ver más y se alejó de allí sin notar como alguien la había visto marcharse.