Problemas; Supercorp

Capítulo 1

Un día normal en Nacional City, los niños juegan en el parque, algunos ciudadanos sacan a pasear a sus mascotas, o aprovechan para hacer algo de ejercicio y otros simplemente se preparan para realizar sus actividades diarias. Un día normal.
Aunque no todo es tranquilo para cierta persona y a eso añádele que es de otro planeta, un tanto difícil ¿no?

Apresurada, caminaba una joven de cabello rubio, con varias hojas en su mano izquierda y con la contraria el teléfono, mientras trataba de no chocar con los transeúntes.

–Si, en un momento llego... Si, aquí tengo el reporte... Sí ¿qué?... No espe- ¿hola?-. Resopló viendo el teléfono, habían colgado. –Genial.
Guardo su teléfono y volvió a retomar su camino.

...

–Entonces, ¿cómo te fue hoy en el trabajo?- dijo una agente, mientras veía a su hermana sentada con los brazos cruzados y con el rostro molesto.

Tardó un poco en contestar. –Horrible Alex, no sé qué le sucede a mi jefe, hago mi trabajo lo mejor que puedo, pero nunca es suficiente para él, siempre encuentra hasta el más mínimo error en mis artículos, y si no lo hay, pues ¡inventa uno! Y hoy, no tuve tiempo de contra decirle, ya que tuve que acudir a apagar un incendio, parar dos robos y arrestar a un alienígena muy sucio con problemas de actitud.- terminó enumerando cada una con sus dedos.

–Sí, pero lo bueno es que ya está encerrado y no causara más problemas, además Winn dijo que tu traje estará listo en poco tiempo.- dijo tratando de animarla.

–A veces, simplemente quisiera poder ser una persona a la vez, sin descartar el proteger a la ciudad o ser una reportera... Quisiera el poder de dividirme en dos.

Sonrió ligeramente por la imaginación de su hermana. –Kara, la vida no es fácil, y más cuando quieres ser tú mismo, lo único que podemos hacer es seguir luchando, además quedaría en banca rota con tan solo alimentarlas a las dos. -rieron ambas ante eso último. –Porque no entrenamos un poco, ¿qué dices? Hay una nueva habitación implementada cerca de los laboratorios y quiero probarla, además quiero patear tu trasero ahora que estas usando el traje del DEO.

–Ni lo sueñes, Alex. Pero con una condición, si yo gano podre pedir cualquier cosa para la cena de hoy.- dijo extendiendo su mano para cerrar el trato.

–Acepto.-termino devolviéndole el gesto.

Mientras se dirigían a la habitación, Kara no pudo evitar dar un vistazo a uno de los laboratorios.

– ¿En qué trabajan?- preguntó viendo como varios científicos se movían de un lado a otro.

–Es un nuevo proyecto, estamos tratando de comprender algunas de las tecnologías alienígenas recolectadas para poder usarlas a nuestro favor para futuras misiones.

– ¿No es eso peligroso?

–Sí de hecho, pero nuestros científicos están lo suficientemente calificados para el trabajo.

–Sí, per- no pudo continuar pues de inmediato sonaron las alarmas y el lugar se cubrió con luces rojas parpadeantes.

–Maldición.- dijo viendo como varios de los científicos se movían desesperados por salir del laboratorio.

–Trataré de evacuar a las personas del laboratorio, hasta eso trata de que nadie se acerque a este lugar.

–Entendido, pero cuídate por favor.- su hermana asintió, y se desplazó con velocidad para evacuar a los civiles.

Rápidamente, Alex logró resguardar a las personas restantes y colocarlas en un lugar seguro con ayuda de varios agentes. Debido a la imposibilidad de poder acercase a la zona de peligro, llamo a Kara por el intercomunicador.

– ¿Kara?

–Esto va mal.- la escuchó decir.

– ¿Qué?

–Esto va a explorar... tratare de contenerlo, no sé cuál será la magnitud de la explosión, pero trata de que nadie se acerque Alex.

– ¿No puedes sacarla del lugar y llevarla a un lugar más alejado?- dijo con la esperanza de que esa fuera una opción posible.

–No estoy segura de que pasara si la muevo de aquí.

–Kara...-dijo ya si esconder su preocupación.

–Estaré bien Alex, por favor mantente alejada del lugar.

Resignándose, permaneció con los demás en la zona segura, a lo lejos pudo distinguir a Maggie con unos agentes, hasta que esta miro en su dirección y comenzó a acercarse, en otras circunstancias se habría puesto nerviosa, pero la situación actual no dejaba espacio para eso.

– ¿Estás bien?- preguntó al llegar.

–Sí, estoy bien, gracias- dijo tratando de sonar convincente.

–No te preocupes, Supergirl se encargara de todo.

Alex solo pudo asentir, Maggie no sabía que su hermana era Supergirl y su relación con ella era más de trabajo que de amistad, aunque anhelara cambiar esa situación.

No pudo profundizar más acerca del tema cuando de pronto se escuchó un gran estruendo que resonó por todo el lugar, para luego empezar a cubrirse ligeramente con una especie de humo blanco.

Preocupada, Alex trato verificar si su hermana estaba a salvo pero Maggie la detuvo.

–Espera, no sabemos si ese humo es inofensivo. Se resignó a esperar a que los agentes determinaran si aquel humo era dañino.

Después de lo que le pareció una eternidad, los agentes declararon que el humo no representaba ningún peligro. Así que entro de inmediato a buscar a Kara junto con Maggie, quien no quería que vaya sola.
Al aproximarse pudo ver que el humo provenía del laboratorio y aún seguía en gran concentración, dificultando poder ver a simple vista el estado de su hermana.
Al entrar Maggie y ella se separaron tratando de cubrir más terreno.

– ¿Supergirl? ¿Dónde estás? - no podía arriesgarse a que su compañera descubriera la verdadera identidad de la heroína.

– ¿Supergirl?- intento de nuevo, sin obtener respuesta. Siguió moviéndose, hasta que distinguió una cabellera rubia en el suelo.

– ¡Kara!-se acercó y buscó desesperaba algún signo de que estuviera con vida, no fue hasta percibir los latidos de su corazón, que logro suspirar con alivio, pero luego cayó en cuenta de que no estaba sola y había soltado una información muy importante.

– ¡Alex! ¡La encontré!- escuchó gritar a Maggie a través del humo.

– ¿Qué?- se dijo así misma incrédula, olvidando su pequeño error.

Algunos agentes llegaron y dispersaron el humo faltante, una vez hecho, logró distinguir a Maggie revisando a una persona más en el suelo.
Raro, había jurado haber evacuado a todas las personas.

Maggie se levantó y se acercó a ella.
–Alex, encontré a Supergirl.- dijo señalando a su espalda. –Esta inconsciente, y no tiene ninguna herida, está intacta además...-miró hacia abajo. – ¿Quién es ella?- preguntó señalando a la persona que también estaba inconsciente en el suelo a pocos metros de ella.

–Espera, ¿Supergirl? Pero si ella está justo... aquí.- Ambas miraron hacia quien se suponía era Supergirl, pero ahora habían ¿dos de ellas? Era una locura.

Alex se acercó a quien aseguraba Maggie, era Supergirl, y efectivamente, era ella, mismo cabello rubio, mismos rasgos físicos, misma cicatriz, era Kara. Pero ¿cómo?

Se vieron entre ellas con el rostro incrédulo.
–Solo... ayúdame a llevarlas hacia la enfermería.- terminó diciendo Alex tratando de encontrarle una explicación lógica a lo sucedido.