Treinta y cinco

5 1 0
                                    

A pesar de haber sido víctima del insomnio una noche más, no salgo de mi habitación. He decidido mantenerme quieta durante toda la noche hasta que la luz del sol penetre por la puerta.

Estoy preocupada y asustada por los mensajes que van dirigidos en contra de mi vida, que son tan peligrosos así como misteriosos.

Nueva nota
Nueva amenaza

¿Quien podría ser?

Alguien me esta observando.

por tu propia cuenta, él por la suya...

Tú, por supuesto que se refiere a mí. Pero por mi propia cuenta... No sé a que se refiere con eso. Él, comienza a tener sentido, pues creo saber a quién se refiere...

Esto tiene que ver con Ian

¿Y si es él quién deja las notas?

No puede ser el, siempre esta ocupado como para tomarse el tiempo de hacer este tipo de bromas o lo que sea que es.

Ian no puede ser.

Esto esta comenzando a ser desesperante, la necesidad y ansiedad por saber de quien se trata me esta matando. Con Ian no puedo recurrir, seguramente se encuentra con Lina. Sin embargo, es el único que puede ayudarme y es por eso que ahora voy camino a buscarlo al sótano, en donde cabe la posibilidad de encontrarlo.

-¡Keysi!- alguien grita mi nombre antes de poder llegar al comedor, me giro rápidamente para ver a Roldan. -¿A dónde vas?- pregunta como si el dueño de este lugar fuera él y no me diera permiso de vagar por ahí. 

Debo admitir que me sorprende verlo pero mi sorpresa aumenta al darme cuenta de que me ha hablado después de lo ocurrido cuando llegamos a este lugar.

-Estoy buscando a alguien- no me tomo la molestia de decir a quién busco en realidad, estoy segura que tendré que dar explicaciones y no quiero que mi hermano se entere de esto. Además no se como reaccionaría ante este misterioso suceso.

-¿A quién?- sus preguntas nuevamente me causan frustración. Sin embargo, pongo los ojos en blanco y bufando respondo:

-Uno de mis amigos- miento -¿Esto es un interrogatorio?- ahora soy yo la que pregunta molesta.

-No me agradan algunos de tus amigos- dirige su mirada a mi espalda, no se si veía a alguien -Dime una cosa, ¿Ian fue tu entrenador en el refugio?- la pregunta me deja fuera de lugar, pues creí que por ser Ian un infiltrado en el refugio la gente de aquí estaría por enterada y Roldan por ser mi hermano habría investigado en dónde y con quién se encontraba su única hermana. Ya veo que todos estos meses me equivoque pensando en que tal vez mi hermano estaba buscándome, todavía me acuerdo cuando Alex me contó que Roldan no parecía dispuesto a reconocer a su familia.

Asiento moviendo la cabeza, poco confiada y pensando en que por la facción en el rostro de mi hermano algo no anda bien entre Ian y Roldan.

-¿A que viene la pregunta?- pregunto a la defensiva.

-Me preguntaba si te hizo daño en alguna ocasión...

-¿Porque me habría hecho daño?- me cruzo de brazos.

-Es solo que mi amistad con el nunca fue muy buena...- mis mas mínimas sospechas han sido confirmadas pues no sólo Alex no tiene buena relación con mi hermano, ahora también Ian tuvo problemas con Roldan. Mi duda crece por saber que tipo de problemas tuvieron para no llevar una buena relación.

-Pues nunca me hizo daño, siempre fue amable conmigo- detesto tener que hablar de Ian después de una noche poco candente e intensa cuando me besó. -No es de ese tipo de personas que utiliza a la hermana de su enemigo para cobrar venganza. Aún así, no es problemático- defiendo a Ian, ha hecho muchas cosas por mi y no he podido hacer nada por él a cambio.

-Hermanita, que indefensa e inocente eres- Roldan se burla revolviendo con su mano mi cabello.

-Hermano, que bipolar eres- quito su mano de mala gana. -Estas enfermo, después de que casi me dejas morir en el exterior vienes a llamarme "hermanita" y a hacer una de tus costumbres de despeinar mi cabello- reclamo furiosa. -No sé que te sucede, pero no eres el mismo que eras antes de que mis padres murieran, comprendo si la muerte de mamá y papá te afectaron, pero tienes que ser mas sensible conmigo que soy lo que queda de tu familia, no tienes idea de lo desesperada que estaba hace meses por encontrarte- escupo con molestia. Saco todo lo que me guardé durante meses, desde que alguien me confesó que mi hermano no me extrañaba y no hacia un intento por buscarme.

Roldan no parece sensible ante lo que dije, mas bien tiene rostro de fastidio.

-Para ti es fácil extrañar a las personas que nos criaron, pero va a ser difícil que comprendas el porque de mi indiferencia- con las manos en la cintura e indiferente tal como él lo admitió escupe esas palabras que me dejan fuera de lugar.

-¿Las personas que nos criaron?- río sarcástica al notar que no les ha llamado padres si no de tal forma que muestra su desagrado.

-Tus padres

-Nuestros padres...

-A esto me refiero, no es fácil que entiendas el porque de mi indiferencia pero si te voy a decir que si mis padres hubieran sido en realidad en lugar de enseñarme a disparar un arma en el patio trasero batearía con un bate una pelota de golf- sentencia resistiéndose para no gritarme, lo conozco. Roldan arregla los problemas hablando, conversando como persona civilizada dejando de lado la ira. Sabe que la violencia no arregla los problemas, al contrario, los empeora llegando a ser catastróficos.
Y si sus sentimientos negativos le ganan a su valiosa y civilizada educación hace todo por contenerse y no dejar escapar ningún inicio de guerra.

-Nos enseñaron a defendernos porque sabían que las cosas empeorarían en el gobierno y la guerra estaba comenzando- defiendo así a mi familia, mis progenitores. Aquellos que me trajeron a este cruel mundo lleno de violencia pero en dónde la bondad y la paz van a reinar el interior de una persona.

-Ya veo que hay muchas cosas que no sabes, ya que, la guerra no ha comenzado. Keysi, mi papá hizo todo lo posible por mantener solo a su familia a salvo, no pensó en otras familias. Se comportó como un egoísta. Él fue uno de los responsables de la creación del suero mas letal porque quería que viviéramos eternamente juntos como familia. El día que murieron nos dirijiamos al refugio para inyectarnos el suero, lamentablemente no sobrevivieron al ataque. Pude haberlos salvado pero preferí salvar la vida de otros.

-Tú, fuiste el culpable.- susurro incrédula a lo que acaba de confesar. -¡Estuviste involucrado en la muerte de nuestros padres!- las lágrimas comienzan a caer por mis mejillas.

-Yo solamente salvé la vida de otras familias que tenían la ilusión de llegar a un verdadero refugio

-Pero no salvaste la vida de nuestros padres- las lágrimas caen sin poder contenerlas

-De todos modos, no iban a resistir al suero- su indiferencia me hace sentir explotar pues la palma de mi mano se impacta con su mejilla dejándola roja. Roldan se cubre con una mano mirándome con rabia.

-Te desconozco- digo sintiendo ardor en la palma de mi mano y una punzada de adrenalina. - Tú nunca perderías la esperanza de familia...

-No eres la única, yo te desconozco mas a ti- habla apretando los dientes -Tú nunca te atreverías a golpear a una persona...








Catástrofe, El Secreto De La Vida Eterna (Sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora