15 Deseos

Capítulo 14: Una inesperada visita

Después de estarnos besando entramos a mi departamento y Pablo se sento en el sofá,yo fui a la cocina por agua para
Pablo y al regresar me senté a un lado de el.

-Ahora si dime ¿Que pasó con Romina?-pregunte mirando a Pablo.

-Me abandonó-respondió Pablo bebiendo el agua.

-¿Qué?-pregunte confundida.

-Si me abandonó,quise hablar con ella así que fui a su departamento pero me dijeron que había salido hace algunas horas con sus maletas y sólo me dejo una carta,mira quiero que la leeas-dijo Pablo entregandome la carta.

La carta básicamente decía que Romina se iba a Italia a descubrir cosas nuevas y le pedía a Pablo que por favor no la buscara,que ella estaría bien y que se había ido por que ya no aguantaba más los problemas que la invadian por culpa de Pablo.

-¿Lo ves? Al menos a mi si se me facilitaron las cosas y ahora que la verdad se sabe podremos estar juntos-dijo Pablo sonriendo.

Me lancé hacía el y me aferre a su cuerpo.

-No tienes idea de cuánto te extrañé estos dos meses Pablo.

-Yo también Laura,todos los días pensaba en tí,tú eres una parte que hace que yo me sienta completo por primera vez en mi vida. 

Empezamos a besarnos y después nos miramos fijamente con gran deseo,me levanté del sofá y tomé de la mano a Pablo enseguida comencé a caminar hacía mi habitación y sentía todo el tiempo su mirada sobre mi.

-¿Qué?

-Nada,me gusta verte caminar-dijo Pablo mordiendose el labio inferior.

Sólo sonreí y seguí caminando hasta llegar a mi habitación estando ahí seguí besandolo y después de unos segundos lo lancé hacía mi cama,empecé a bajar el cierre de mi vestido y Pablo me miró un poco nervioso.

-¿Qué pasa? ¿No quieres hacerlo?-pregunte confundida.

-Lo que pasa es que no traigo preservativo-dijo Pablo apenado.

Yo sonreí y de uno de mis cajones saqué un preservativo que había comprado en la mañana,se lo di y el sonrió enormemente,enseguida me senté sobre el y mientras lo besaba le quite la camisa rápidamente mientras el me quitaba la ropa interior.

-No puedo esperar para estar dentro de tí-dijo Pablo y me sentó sobre el.

Seguí besandolo nuestra respiración comenzo a aumentar,después de estarnos besando cómo por dos minutos se levantó de la cama y se quitó el pantalón y los boxer,enseguida se puso encima de mi y con gran velocidad me quito el sosten y comenzo a besarme los senos,bajo a mi abdomen y comenzo a besarlo mientras acariciaba mis senos,se puso de rodillas sobre la cama y se puso el condón enseguida se puso sobre mi y comenzo a besarme,mi lengua acariciaba tímidamente la suya y se unía a ella en una lenta y erótica danza de roces y sensaciones, de sacudidas y empujes. Levanto la mano y me agarro la mandíbula para que no moviera la cara. Estaba indefensa me tenía la cara sujeta y con sus caderas inmovilizándome. Con sus manos me separo las piernas y comenzamos a intimar sus movimientos eran fuertes y repetitivos,sentía cómo todo mi cuerpo se movía a su ritmo y podía sentir mis piernas rígidas y mis entrañas temblando,estaba nuevamente en el paraíso,Pablo sabía perfectamente lo que hacía y sabía justamente que lugar tocar para volverme loca,comence a gemir cómo nunca antes y ha arañar la sábana dónde estaba acostada,él también comenzó a jadear cerca de mi oído y sentía cómo su respiración aumentaba cada vez más,yo sentía un mar de sensaciones cada vez que Pablo hacía un movimiento y me excitaba tanto el sentir la presion en mis caderas. Al final terminamos con un gran orgasmo que provoco que nos quedaramos inmovilizados un par de segundos,Pablo se acostó a un lado de mi y los dos tratamos de normalizar nuestra respiración,me abrazo y sentía su erección contra mi vientre. Dios mío…nunca había sentido tanto placer en mi vida,no podía creer qué José Pablo en verdad me deseará tanto cómo para hacerme enloquecer de ésa manera.

-Extrañaba tanto el sabor de tu piel-dijo Pablo con voz cálida.

-Gracias por hacerme sentir de está manera-dije mientras me acurrucaba entre sus brazos.

-Contigo me complemento perfectamente Laura,me vuelves loco.

Nos quedamos varios segundos sin decir absolutamente nada sólo estabamos mirando al techo con nuestros cuerpos sudados.

-¿Tienes hambre?-le pregunte a Pablo y enseguida le di un pequeño beso en los labios.

-Muero de hambre-respondió con una sonrisa.

-Puedo preparar algo si quieres.

-Debes estar agotada ¿No? Mejor iré a buscar algo de comer mientras tu descansas un poco,quiero que esté nuevo comienzo sea perfecto para nosotros tu en serio me gustas mucho Laura y quiero formalizar todo contigo.

-Me encantaría Pablo.

-Eres muy bella Laura,me encantas dime una cosa ¿Cómo estuvo tu día?-preguntó Pablo sonriendo.

-Bastante mal,hablé por teléfono con mi mamá y pues discutimos cómo siempre.

-¿Por que?-preguntó Pablo confundido.

-Básicamente mi madre me odia.

-¿Por que dices eso? Pense que la vez que me hablaste de tu madre sólo lo hacías por efectos de el alcohol-dijo Pablo.

-Desde pequeña mi madre me ha tenido cierto odio por que no quise convertirme en lo que ella quería,básicamente mi madre me estaba pidiendo que me convirtiera en su sombra y yo me negué entonces mi madre comenzo a tratarme con desprecio mientras que a mi hermana la tenía en un altar por eso me vine a México ya que entré mi mamá y mi hermana me hicieron la vida imposible,cuándo estaba aquí me sentia completamente desamparada y al concer a Octavio me protegi en el pero bueno siempre trato de verle el lado bueno a las cosas,estando aquí puedo trabajar en lo que me gusta y no en lo que mi madre tenía planeado para mi-dije sonriendo.

-¿En que trabajas? Lamento mucho lo de tu madre y que mal que no se de cuenta el ángel que tiene por hija.

-Trabajo en una fundación dónde ayudamos a niños de escasos recursos y vivimos de las distintas aportaciones que nos dan las empresas.

-Debe ser una labor muy bonita-dijo Pablo.

-Es realmente hermoso.

-Iré por algo de comida hermosa no tardo.

Asenti con la cabeza y Pablo se vistió rápidamente y salió de mi departamento,yo me quedé acostada un momento y a los dos minutos sono el timbre del departamento así que me levanté de la cama y me puse la bata enseguida fui a abrir pensado que era Pablo y al abrir la puerta para mi sorpresa no era Pablo quién estaba tocando.