Capítulo 8: La sorpresa

606 34 27
                                    

Al despertar por la mañana Pablo estaba afuera de la cabaña hablando con el dueño,yo me levante de la cama y me vestí enseguida salí y me coloque justo a lado de Pablo.

-Entonces ya quedamos joven,espero que tengan un buen viaje y cuándo gusten aquí estamos,permiso-dijo el dueño de la cabaña.

-¿Ya tienes tus cosas listas Laura?-preguntó Pablo amablemente.

-Si.

-Perfecto entonces antes de irnos al hotel vamos a desayunar de todos modos es muy temprano son las 7:30am-dijo Pablo sonriendo.

Caminamos hasta llegar al restaurante más cercano y al estar ahí entramos y ordenamos,poco tiempo después nuestra comida llegó y nos dispusimos a comer.

-¿Cómo amaneciste?-preguntó Pablo.

-Muy bien gracias.

-A noche pasamos algo verdaderamente mágico. No se tú pero yo sentí cosas que nunca antes había sentido,muchas gracias por la noche tan especial que me regalaste ahora me doy cuenta de que podríamos ser una posibilidad-respondió Pablo acariciando mi mano.

-¿Por que crees que podríamos ser una posibilidad? Creo que lo que paso entre nosotros fue un error-dije en tono serio.

-Estás muy equivocada yo pienso que todo lo que nos ha pasado ha sido por algo y sinceramente no creo que lo que ha pasado entre nosotros ha sido un error-dijo Pablo frunciendo el ceño.

-Tú no me conoces a mi,no tienes idea de quien soy verdaderamente y yo no te conozco a ti somos cómo dos extraños y creo que lo mejor es terminar todo acá-dije mientras las lágrimas caían por mis mejillas.

Pablo me tomó de la cara y con la yema de sus dedos comenzó a limpiar mis mejillas.

-Quiero mostrarte algo-respondió Pablo sonriendo.

Pedimos la cuenta y saqué la cartera de mi bolsa.

-¿Qué haces?-preguntó Pablo mirándome.

-Voy a pagar la mitad.

-Por supuesto que no Laura,yo pagaré todo por que además de guapo soy un caballero.

-No empices con tus malos chistes-dije sonriendo levemente.

-Es broma pero no dejaré que pagues nada,tal vez en la próxima dejé que pagues la mitad.

Pablo pagó la cuenta y salimos del restaurante de ahí caminamos por unos minutos y nos detuvimos en un mirador.

-Wow la vista es realmente hermosa-dije sorprendida.

-¿Te gusta?-preguntó Pablo.

-Por supuesto Pablo es maravilloso poder contemplar todo esto.

-Te tengo una sorpresa elige uno de mis dos puños-dijo Pablo mientras me mostraba sus puños.

-Haber....quiero el izquierdo-dije sonriendo.

Pablo abrió su puño izquierdo y justo ahí estaba el anillo que habíamos visto con los comerciantes,el anillo que me recordaba a mi abuelita que había fallecido años atrás, yo sólo miré a Pablo con gran asombro y no pude evitar sonreír.

-¿Es un regalo?-pregunte sonriendo.

-No,es un compromiso entré tú y yo además lo compré por que te recuerda a tú abuelita-respondió Pablo con una gran sonrisa.

-¿En que momento lo compraste?-pregunte confundida mientras sonreía.

-Un mago nunca revela sus secretos Biña.

15 Deseos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora