Cap 48

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EXTRAÑA Y PARANOICA

Esa era la forma en la que me sentía ahora mismo.
Diez días han pasado desde que Alejandro falleció; imaginé que el mundo de las mujeres Cabello se desmoronaría, pero nada de eso sucedió.

La mañana en que todo pasó, Sofía estaba incontrolable y Sinu hacía un esfuerzo mega gigante para consolarla aunque ella también haya necesitado de alguien. Por otro lado, después de que Camila despertó de su desmayo, entro en una crisis de pánico que, al verla, Sofi se puso igual o peor. Entonces teníamos a las hermana Cabello llorando histéricamente y tirando todo lo que encontraban a su alrededor y quizá, solo quizá en aquel momento me sentí la persona más idiota y egoísta del mundo, pues había tomado a Camila de los hombros obligándola a verme a los ojos y prácticamente grité en su cara la frase "Tienes que tranquilizarte o vas a sufrir un aborto" Mi voz resonó en la habitación llena de gente; sin embargo fue la única forma de tranquilizar a mi esposa.

Los dos días posteriores entre el velorio y el entierro, pasaron como un salto en el tiempo. Trate de cuidar lo más que podía de Camila y en su momento llegué a pensar que la estaba sofocando, sin embargo esa idea era disipada cuando su mirada me buscaba entre las personas las pocas veces que estuve lejos.

El día cuatro fue la lectura del testamento, y me sorprendí al descubrir la cantidad de dinero que manejaba la empresa. No eran miles, eran unos cuantos de muchos millones; también nos enteramos de las casas que compró Alejandro hace unos meses. Que digo casas, eran prácticamente 3 mansiones en la zona más exclusiva de Miami, no era exagerado decir que cada casa bordeaba los cien mil dólares. Una era para Sinu, otra para Sofi y la otra para Camila. 
Por otro lado, me enteré sobre el nuevo nombre de la compañía. No daba más de lo honrada que me sentí, mi apellido iba a figurar en una de las empresas de marketing más importantes, pero inmediatamente recapacite sobre la magnitud de todo aquello; este dato probablemente nos dejaría fuera del mercado. "Cabello Enterprise" era un nombre con el que el medio de la publicidad estaba familiarizado, pero "Cabello-Jauregui Enterprise" era un dato nuevo para todo el mundo incluyéndome. "Vas a lograrlo, vas a posicionar tu nombre en el mercado porque lo mereces, porque eres capaz; porque lo harás por ti, por tu esposa y porque también será el legado de tus hijos."

Como si de un brujo se tratará, Alejandro intuyó que mi negatividad y nerviosismo me iban a impedir saborear este momento, por lo que aquella frase me hizo pensar sobre todo lo bueno que venía a partir de ahora. Solamente esperaba que no tuviera que empezar de cero; no porque quisiera todo regalado, pero estaba segura que de otra forma, terminaría quebrando la empresa.

Camila: Carajo, Laaauren!! - y lo siguiente que sentí fue una almohada aterrizar en mi rostro. La escuché gruñir y dejo la cama para ir al baño.

Lauren: Qué hice!!!?  

Estaba recordando, todo lo que ha pasado estos ultimos días y ella ha estado tan bipolar que lo único que yo hago es dejarla ser... La seguí al baño y mientras lavaba sus manos, me acosté en la fría cerámica porque el calor en México era insoportable y el baño era lo más frío de toda la casa... En especial su piso.
Deje de mirar el techo y llevé mi mirada a ella.

Camila: No me mires... Estoy haciendo pipi...

Lauren: Ahora que lo pienso, esto no es nada sexy... No quiero  meter mis dedos ni mi lengua allí nunca mas... - y lo siguiente que sentí fue un bote de shampoo golpear mi barriga y nuestras risas inundar todo el lugar. Decidí dejar de molestarla y deje de mirarla como una psicópata mientras ella hacía sus necesidades. Escuché el grifo abrirse y volví a voltearme para mirarla... - Wou, que paisaje - halague, escuchandola reír nuevamente - Tu trasero se ve muy bien desde esta posición.  - y para guardar el momento, me moví un poco aunque aun acostada y tome una selfie desde su celular. Capte la mitad de mi cara mientras elevaba un pulgar en aprobación y tome su espalda baja hasta sus largas piernas. Luego coloqué la foto como su protector de pantalla. Ignorando todo lo que hice en ese minuto, secó sus manos y volvió a sentarse en el servicio, cerrando los ojos y soltando un largo suspiro - Qué pasa, amo? - pero negó inmediatamente 3 veces  - Karla... 

TIEMPO ||CamRen||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora