Cotton candy flower 🌸 [Karaichi] (EDICIÓN)

Especial!

Es especial porque hoy es 8, solo por eso.

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Mamá decía que la vida era muy linda, y lo supe cuando le conocí.
Muy pequeños nuestros corazones eran pero aún así e ignorando al destino nos enamoramos en silencio. Guardando el secreto por años, incluso a nosotros mismos.

Cuando supe que el destino quería algo diferente para mi, lo negué, incluso si eso lastimaba a otros. Lágrimas derramadas frente a todos, un nombre atascado en mi garganta y una promesa no dicha desechada, odie por primera vez mi naturaleza.

Una niña viendo por el ventanal, con ojos tristes y lágrimas imaginarias suspiraba cansadamente esperando su final. Siete años y ya teníamos una carga en la espalda, amigos desde pequeños pero calladamente amando a otra persona, aun si no sabíamos el significado de eso. No hablamos después de la desicision, ambos nos odiamos en silencio por años.

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Un día Choroko llegó llorando ante mi, disculpándose sin parar y yo no entendía porque, hasta que, al abrazarla, el aroma de otro alfa inundó mi nariz y según los estándares establecidos por el destino, eso debió hacerme estallar en cólera pero en cambio comencé a reír mientras repartía besos en su rostro y alabando su valor. Esa mujer era una guerrera silenciosa pero era la más fuerte que conocía.

Durante meses planeó un escape, para así dejar ser feliz a esa mujer, junto con el idiota de Osomatsu. Cuando ocurrió todo, la gente se atrevió a insultar a Choroko y él se encargó de callarlos y esperar una oportunidad.

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Conocí a una linda doctora que ayudó en mi problema, cortando completamente la conexión que me ataba a mi pareja destinada, reescribiendo completamente el ADN, y eligiendo por sobre mi instinto, mientras mi corazón gritaba una sola persona pero permaneciendo en anonimato para todos.

Cuando escuché ese nombre en un ligero murmuro desde la sala, mis ojos desecharon tantas lágrimas que estoy seguro eran de emoción. Escuché la decepción en la voz de mi padre cuando, asegurando que, con mi reciente roto corazón, no aceptaría una relación, mucho menos un matrimonio y fue la segunda vez en mi vida que importando poco los pensamientos de mis progenitores y conocidos que grité con desespero en la voz y felicidad en los ojos.

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Despertó con pequeñas lágrimas acumuladas en sus ojos, giró en la cama para observar a la persona a su lado, era hermoso y toda una delicia verle dormir, esas ojeras pequeñas que adornaban sus bellos ojos, consecuencia de los desvelos por sus hijos y ese cabello desaliñado adornando su linda cabeza, era perfecto...
"Tenemos una genial sincronía, no pequeños?" dirigió esas palabras a las pequeñas bolitas de carne que lloraban en la cuna del cuarto contiguo. Era su máxima felicidad, aun si las circunstancias fueron extrañas para ambos.

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A quienes han leído este especial por este día, les agradezco!
Y con aprecio me despido por hoy, trayendo próximamente el siguiente capítulo! Tengan linda noche c: