𝑼𝒏 𝒅𝒊́𝒂 𝒄𝒐𝒏 𝑭𝒊𝒏𝒏 𝑾𝒐𝒍𝒇𝒉𝒂𝒓𝒅 [𝑻𝒆𝒓𝒎𝒊𝒏𝒂𝒅𝒂]

Capítulo 8

FINN WOLFHARD

Al llegar a Disneyland duramos un rato para poder entrar, pues debido a mi presencia, los dueños del parque tuvieron que asegurarse de muchas cosas para que yo y la familia de Syd pudiéramos pasar por un momento placentero.

Así que a todos los trabajadores del parque se les aviso que si veían algo sospechoso cerca de nosotros, trataran de interceptarlo o algo así.

El punto es que no pasamos por ningún mal momento, y lo mejor, fue que teníamos pases preferenciales y podíamos entrar primero a todos los juegos.

En un momento vimos una montaña rusa, a la cual decidí subir junto a Sydney y sus primos, en donde ellos se sentarían juntos, y yo, claramente, tendría la compañía de la cumpleañera.

Al estar arriba del carrito, noté como las manos de Sydney empezaban a temblar y le costaba un poco respirar.

—¿Estás bien?—le pregunté.

—Si, claro—obviamente mintió.

—Syd, sabes que puedes decirme—la animé.

—Tengo miedo, creo que fue mala idea subir—trató de quitar el cinturón de seguridad, cosa que le impedí.

De inmediato tomé su mano y entrelacé sus dedos entre los míos.

—Tranquila, yo estoy aquí. Siempre voy a estar aquí, nunca te dejaré sola—la miré a los ojos para calmarla.

Se sonrojó permitiendo que sintiera mucha ternura y notara lo realmente hermosa que es.

Sé que esto solo era un trabajo, pero este día estaba resultando lo suficientemente genial para mí como para que todo terminara tan pronto. No quería despedirme de ella. Es increíble y ya no solo la veo como una fan, también como una amiga.

Incluso, debo admitir que me siento atraído por Sydney.