She's bad.

Capítulo 13: Natasha lo sabe.

Estaba evitando a Natasha.

Desde el día del partido el cual ganamos por cierto, me había dedicado a evitar a Natasha. ¿Por qué? Bueno pues porque ella me vio que estaba viendo a Jade.

Natasha es súper fuerte, casi nunca la ves llorar, nunca se queja, está un poquito loca, casi no muestra emociones pero cuando lo hace son las emocionas más puras y sinceras que jamás he visto y ella es jodidamente intuitiva. Sí.

Estaba más que claro que Natasha se dió cuenta que siento algo por Jade.

Pero parecía que todo estaba en mi contra, para todo lo que hacía Natasha quería ir conmigo, todos nos dejaban esperando en la mesa en lo que ellos iban a comprar algo, sí yo decía que iba ir por un agua, ella decía que me acompañaba y por supuesto que yo decía que ya no era necesario. Todo y todos estaban en mi contra.

En cuanto a Jade... Ya no supe que pasó, no sabía si seguía andando con el tipo de la otra escuela o algo así, desde el día del partido solo la había visto unas cuantas veces, siempre decía que tenía cosas que hacer cuando salíamos de la escuela así que bueno, no sé que este haciendo.

Ahora íbamos rumbo a la biblioteca, Jade no iba y Natasha estaba hasta el otro extremo, al lado de Airi así que iba un poco tranquilo, no sé de qué estaba hablando y yo no estaba prestando atención.

—Hola, profesor Robinson, ¿Me podría prestar a uno de sus alumnos, por favor? —alcé la vista y vi que era Alisson.

—Oh, sí.

Alisson estaba buscando a ver cuál alumno se llevaría, me vió y sonrió.

—Me llevaré a Lancaster —caminó hacia mí, yo miré al profesor y él asintió. Me despedí de mis amigos y me fui con ella no sin antes recibir una mirada curiosa por parte de Natasha.

—Hace tiempo que no nos veíamos, ¿verdad? —preguntó mientras caminabamos hacia el salón del consejo estudiantil, supongo.

—Sí, desde la fiesta.

—Sí, estuvo muy buena.

Yo asentí.

Pasamos de largo el salón del consejo estudiantil, fruncí el ceño, ¿adónde iríamos?

—Vamos ir a recoger unas cosas de la sala de maestros —supongo que vió mi cara de confusión.

—Oye, ves que nos besamos... —me miró.

—¿Ajá?

—¿No piensas que tenemos algo, verdad?

—Pues... no, sí lo hubiera pensado ya te habría buscando —la miré —. Fue en una fiesta y solo fueron unos besos, nada de que preocuparnos, ¿no? —dije mientras entrabamos a la sala de maestros. Ella soltó un gran suspiro, como si le quitarán una carga.

—¡Exacto! Es que bueno, pensé que a lo mejor podrías mal interpretarlo.

Yo negué divertido.

Tomamos las cosas por las cuales veníamos, eran un montón de hojas, no sé para qué eran y tampoco pregunté solo las alcé y ya.

Ahora si íbamos al salón del consejo estudiantil.

Cuando llegamos dejamos las hojas en la mesa que está en el primer cuarto, Alisson se sentó y me indicó que yo también lo hiciera.

—Ahora lo que vamos hacer va ser engraparlos, ¿de acuerdo? Una vez que los hayas engrapado, les pones el sello que te voy a dar —se paró y fue a sacar el sello de una vitrina.

—Bien.

Arrimé mi montón de hojas para no tener que estirarme, Alisson me había dando una engrapadora pequeña, así que comencé a hacerlo.

—¿Y los demás miembros?

—Asher y Jorge están en su entrenamiento de Lacrosse. Alexandra y Vanessa están en un exámen al igual que Diego, y la presidenta, no sé dónde mierdas este —explicó —. Así que bueno, a mí me tocó hacer esto.

—¿Como que no sabes dónde está Jade? —pregunté confundido.

—Pues desde que tiene nueva presa, no se presenta a tiempo.

—¿Hablas del chico que beso el día del partido?

—¿Quién? ¿Nathan? —respondió con burla —. No, ese chico ya fue.

—¿Qué? ¿Como que ya fue? —no estaba entendiendo nada.

—Jade ya no está saliendo con él, ahora sale con otro tipo que sabe quién es.

—¿Sale con muchos? —era el momento de preguntar sobre Jade a otra persona que no fueran mis amigos y me dijeran que tan cruel podría ser... para saber... En que me había metido.

—Pues no sé, no es como que me importe mucho, digo es mi amiga y la quiero pero... bueno, no te voy a mentir, sí, si sale con varios.

—¿Los rumores? ¿Son ciertos?

—Algunos, como por ejemplo; unos rumores dicen que salen con varios a la vez, eso es falso. Otros dicen que ha tenido sexo infinidad de veces, otro que es falso. Dicen que a ella no le importan los demás, sí, ese es cierto, ¿Que sale con demasiados? Sí, pero no al mismo tiempo.

—¿Pero por qué es así? ¿Tuvo una relación fallida o qué?

Alisson se carcajeo y dejó de hacer lo que estaba haciendo para mírame sería.

—Sé a dónde va tu cuestionamiento, pero tranquilo, no te diré nada, solo que esperes el golpe.

—¿Ah?

—Jade antes no era tan así.

—Eso quiere decir...

—No quiere decir nada, déjame terminar —Alisson me callo.

—Esta bien...

—Jade tenía un novio, sí mal no recuerdo se llamaba Ángel, íbamos en segundo, se llevaban muy bien. Eran la pareja perfecta. Un día fuimos a una fiesta, todo muy cool, la había organizado Asher en su casa, casi toda la maldita escuela estaba ahí e incluso alumnos de otras escuelas, pero eso no importa, lo que importa es este punto, Ángel se separó de Jade por unos diez minutos así que Jade dijo que lo iría a buscar, cuando subió a uno de los cuartos de la casa de Asher, encontró a Ángel, con una tipa —eso yo no lo sabía —, no los encontró infraganti pero si los encontró poniéndose de acuerdo para verse en otro lugar.

—¿Entonces?

—Entonces, Jade se lo puso a él. No fue por venganza, no fue por algo más, simplemente fue porque Jade quiso hacerlo.

—¿Y Ángel? ¿Lloró?

—Un montón. Le rogó y todo. Después nos dimos cuenta que Jade siempre hacia eso pero solo que esta vez, no lo hacía en una relación, por eso Jade no tiene novio, porque le gusta andar así, porque según ella, es más excitante y sin lastimar a nadie, que bueno, todos sabemos que ha dejado unos cuantos destrozos a su paso.

—Pero entonces, ¿Jade es así no más porque le da la gana? —Alisson asintió —, ¿O sea que no tiene como una razón válida?

—A Jade le gusta jugar con los sentimientos de los demás, cuando le pregunté el porque le había puesto los cuernos a Ángel, ¿sabes que dijo?

—¿Qué?

—Que es mejor herir a que te hieran. Era su primera ralacion así que bueno, descubrir que tu novio se está poniendo de acuerdo con otra tipa para verse marca un antes y un después en tu vida.

—Básicamente, ¿Jade no se preocupa por nadie más que por ella? —Alisson asintió—. ¿Lo hace por mero gusto? —Alisson volvió a asentir.

—Así es mi estimado.

—¿Y nunca nadie le ha dicho que está enamorado de ella?

—Pues sí pero a Jade no le importa —contestó —. Jade no cree en el amor y tampoco lo busca. Aparte Jade dice que en una relación ya no podría hacer lo que hace. Pero con lo poco que le importa los sentimientos de los demás, lo dudo. Es mejor no fijar el corazón en ella.

—Sí, como si eso se pudiera hacer.

—Lo sé, ya lo ví —perfecto. Alisson se había dado cuenta.

Ella volvió a ponerse a trabajar.

¿Que putas iba a hacer ahora?


[...]


—Estas muy distraído —sacudí la cabeza y miré a mi hermana, la llevaba a sus clases de guitarra.

—Perdón.

Ella entrecerró sus ojos y me empezó a analizar, tragué saliva, lo menos que necesitaba el día de hoy es que mi hermana me analizara.

—Deja de verme —ordené. Ella chasqueo la lengua.

—Demasiado tarde, creo que ya descubrí que es lo que te pasa.

—¿Así? ¿Y que es lo que me pasa según tú, Emma?

—Estás enamorado —apreté mis manos sobre el volante y la miré sorprendido.

—¿Qué?

—Se escuchará cursi pero estás brillante, pero es un brillo que está cerrado... Un brillo triste.

El semáforo se había puesto en verde, avancé.

—Mierda, así que si tienes sentimientos —dije viéndola de reojo.

—Idiota. ¿Por qué no habría de tener? —preguntó molesta. Yo reí.

—Pero creo que tienes razón.

—Siempre la tengo —me sonrió con dulzura.

Llegamos al lugar.

—Marcas cuando termines y si te vas a ir con tus amigos también me mercas —ella asintió y se fue.

¿Y ahora que debería hacer?

En cuanto deje a Emma en sus clases, me fui a mi casa a dormir y esperar a que me mandará un mensaje para ir por ella.

Y si me mando mensaje pero el mensaje decía que iba irse con sus amigos al cine, así que ya no había necesidad de que yo fuera por ella.

Yo estaba bastante aburrido en mi casa. Mis papás esta vez sí estaba en casa pero veían una película aburridísima.

—Iré por un café —tomé las llaves del carro de la mesa.

—Con cuidado hijo. Llegas temprano para cenar —dijo mi mamá.

—De acuerdo.

Iba hacia el café que se encontraba en la avenida principal.

Sí Emma ya se dió cuenta, y Alisson también, eso quiere decir que Natasha también. ¿Por qué a mí? ¿Soy muy obvio?

No les puedo decir a ninguno de ellos lo que siento por Jade, se pondrán histéricos, así que... ¿a quien le cuento?

¿Dónde estará Jade y con quién?
No sé ni para que me lo preguntó. Sé perfectamente que está con alguien y que podrían estar haciendo. Me hierve la sangre pero también me siento mal.

Estacioné el coche enfrente del local y baje.

Me metí al lugar, había demasiada gente, supongo que es por el frío, en cualquier momento llovería o nevaría.

Me forme y espere mi turno.

Al llegar a la caja pedí un Frappé. Sí, aunque haga frío yo pido café frío porque no sé. Estoy un poco imbécil.

—Que gracioso —Abrí los ojos con asombro, esa voz... Esa voz era de Jade. Sentí un escalofrío recorriendome el cuerpo.

Voltee a verla de reojo y estaba formada... Con un chico.

Comencé a respirar nervioso, estaba sudando. Las manos y las piernas me temblaban. No quería verla. No al menos cuando está al lado de ese idiota.

—¡Aidan! —Jade gritó, yo giré para verla. Caminé hacia ella. No iba a dejar que ella se diera cuenta. Ella no.

—Hola...

—Hace mucho que no te veo —quería salir de ahí.

—Sí...

—¿Estás bien? —tomó mi mano.

—No... —ella frunció el ceño, mierda —, digo, sí, es solo que tengo algo de prisa, tengo que ir por mí hermana, luego nos vemos.

Salí corriendo del local dejado mí café.

Corría, corría, corría. ¿Por qué? ¿En qué momento me comenzó a gustar? Pero... ¡¿En qué jodido momento me enamoré de ella? ¿Por qué no de alguien más?
Seguía corriendo. No quería llorar, pero no podía evitarlo, las lágrimas comenzaron a salir y a desbordarse por mis mejillas, me limpiaba las lágrimas mientras corría.
¿Por qué estaba llorando si ni siquiera era para tanto? ¿Es por qué soy muy debil? ¿Sentimental?

No me puedo engañar... Es por qué se a lo que me voy a enfrentar, sé que va a doler más de lo que está doliendo ahora.

Me detuve cuando me faltó la respiración y mis piernas me pedían a gritos que parará. Recargue mis manos en las rodillas.

—Si que corres rápido —una voz entrecortada habló a mis espaldas. Me enderece, y voltee a ver. Era Natasha igual de cansada que yo —. ¿Nos sentamos?

Yo asentí. La calle en dónde había parado estaba bastante sola, así que no sentamos en la acera.

—¿Me estás siguiendo?

—No. Iba a comprar un café cuando te vi correr,así que corrí trás de tí y bueno si ves a un amigo así, simplemente no puedes dejarlo —me miró sonriendo, yo trate de sonreir.

—Ya...

—¿Por qué lloras?

Llevé mis manos a mí cara y pude notar que ya no lloraba como hace unos instantes pero seguía llorando un poco, como una lluvia que apenas empezaba.

—No lo sé.

—Te ves confundido pero te ves más como si tratas de esconder algo.

—¿Como tú? —ella me miró y sonrió triste.

—Sí. Como yo.

Nos quedamos en silencio.

—¿Te gusta Jade, no es así? —yo alcé la vista de golpe —. Perdón. Fue una mala pregunta.

—No impo...

—¿Estás enamorado de Jade?

La miré, era obvio que ya sabía, y quiere que yo le contesté, no podía mentir. Lo sabía.

—Sí... —ella parecia que estaba meditando mi respuesta.

—¿Desde cuándo?

—N-no lo sé, quizá desde hace unas semanas...

Ella negaba con la cabeza mientras me miraba.

—¿Seguro?

—Deja de hablar en partes, sé que quieres decir algo así que solo dilo, no me la compliques más —dije con fastidio.

—Tranquilo garañón. Creo que has estado enamorado de Jade desde hace ya mucho tiempo y no te habías dado cuenta o quizá sí pero no querías creerlo.

—Pues cuando la vi por primera vez me pareció muy guapa y me gustó su forma de ser pero conforme fue pasando el tiempo descubrí que despertaba cosas en mí, cosas que nunca antes me habían pasado.

—¿Como qué?

—Es la única chica que puede hacer que mi corazón se acelere y se detenga el mismo tiempo como también puede provocar que tenga sonrojos tan jodidamente irreales con solo pronunciar una sola palabra o hacer un movimiento. Jamás me había pasado esto y me gusta sentirme así.

—Jade es una chica increíble solo que tiene un pequeño defecto...

Solté una carcajada irónica. ¿Lo mismo que todos dicen?

—¿Dirás qué es porque le tiene miedo al amor o porque nadie le ha echo creer en eso? Ya me lo han dicho.

—No, Jade no quiere enamorarse de nadie —me miró sería —. Jade no busca amor, solo diversión, ella prefiere mil veces estar con uno y otro que solo estar con uno. ¿Sabes que dice Jade?

—No...

—Ella dice que es una mierda, ella dice que en todo lo que respecta fuera del amor y relaciones, es increíble pero cuando se tratan de esos dos temas es una mierda porque no le importa nadie más que ella. No importa si hace llorar a alguien, no le importa si hace sufrir a alguien.

—¿Entonces eso quiere decir que estoy perdido? —Natasha se encogió de hombros —¿Sí o no?

—No lo sé, el amor puede cambiar a cualquiera, ella necesita un amor acendrado, limpio y quizá tú puedas hacer que ella crea que el amor existe. Ella puede cambiar si eres tú la persona correcta. El amor es ilógico.

—Por la manera en la que hablas podría jurar que tú también estás enamorada —dije mirándola.

—Y lo estoy.

—No te visto platicar con un chico, ¿quién es? —pregunté curioso. Ella suspiró.

—Ahora que sé tú secreto es hora de que tú sepas el mío.

—Es un intercambio extraño.

—Estoy enamorada de una chica. Soy lesbiana.

¿Natasha es lesbiana? Es cierto que nunca se le vio un novio pero nunca me pasó por la mente pensar eso.

—¿Quién más sabe?

—Nadie, excepto tú —respondió —. Tú sabes mi secreto, yo sé el tuyo, estamos a mano.

—¿Por que nunca nos dijiste nada?

—Porque tenían que darse cuenta ustedes mismos. Eran mis amigos.

—¿Te callaste todo este tiempo? ¿Tú sola?

—Sí... pero ya estoy mejor y ahora tú estás dolido hoy y yo lo estuve hace un tiempo.

—Las lágrimas en tus ojos dicen lo contrario. Natasha... Lo siento...

—También lo siento por ti...

Nos quedamos en silencio. No había más que decir, nos habíamos confesado. Dos cosas completamente distintas pero con el mismo sentimiento de callar algo que duele.

—¿Le dirás algo a Jade? —negué —, ¿por qué?

—Quiero que se de cuenta ella sola o tal vez se lo diga cuando llegue el momento.

—Que masoquista eres, Aidan. De aquí a que te decidas o a que se de cuenta, ella saldrá con mucha gente y tú serás testigo de ello y no está para nada bien ver a la persona que te gusta y quieres con alguien más. Jade hará lo que siempre hace solo que esta vez no sabrá que es a ti, a su amigo, al que le está rompiendo el corazón.

—Tranquila, lo está haciendo de a poco —sentí que las lágrimas comenzaron a fluir, otra vez.

—Duele menos —me miró con tristeza.

Natasha se inclinó hacia mí y me abrazó, entonces empecé a llorar más, sentí que ella también estaba llorando. Ambos. Por amor.

Sí dolía tanto, si estábamos dolidos, ¿Por qué las calles estaban tan tranquilas?