Luke: Sí, -dijo acercándose a mí y tomando mi mano- lo hice porque sé que fui un idiota, ya me disculpé contico varias veces, lo sé, pero quería hacerlo más especial -se acercó a mí. Sonreí. Él me tomó por la cintura atrayéndome hacia él, yo pasé mis brazos por su cuello acariciando el cabello de su nuca. Se acercó un poco más y me besó.
Era un beso tierno que me demostraba que de veerdad estaba arrepentido, pero rato después comenzó a subir de tono. Comenzamos a caminar a ciegas hasta topar con el sofá. Me empujó suavemente sin soltarme provocando que ambos cayeramos en éste para después acariciar mis muslos subiendo la mano un poco más de lo debido. Comencé a jugar con el borde de su camisa para luego meter mis manos en ésta y comenzar a acaricier su pecho para después pasar mis manos a su espalda. Él dirigía el beso, era apasionado, fuerte, salvaje y profundo, mientras yo encajaba un poco mis uñas en su espalda y las deslizaba aruñando un poco su piel. Dejó mis labios para luego bajar a mi cuello. Pasó un rato y decidí quitarle la camisa, dejó mi cuello para poder quitársela completamente, pero cuando lo hice me miró.
Luke: ¿Segura? -me preguntó preocupado.
______: Sí -susurré.
Luke: No quiero presionarte, sé que eres virgen y... -dijo preocupado.
______: Quiero hacerlo, Luke -lo interrumpí- quiero que mi primera vez sea contigo -le dije mirando esos ojos azules que me tienen enamorada. No dijo nada, sólo sonrió, me besó y comenzó a subir mi vestido. Estaba por quitarlo completamente cuando tocaron la puerta.
Luke: Ignorala -dijo mientras seguí besando mi cuello.
______: Ha de ser importante -le dije mientras me paraba y me acomodaba el vestido. El bufó y fue a abrir la puerta.
Luke: ¡¿Qué haces aquí?! -le dijo a esa persona a quien no podía ver.
XXX: Necesito hablar contigo -dijo esa voz de mujer que creía conocer. Me senté en la mesita que había frente al sofá.
Luke: Sí, pero aquí no, y mucho menos ahora -le dijo un poco más calmado.
XXX: ¿Por qué? -preguntó.
Luke: Porque estaba ocupado en algo importante.
XXX: Luke, de verdad, tuve que venir desde Sydney hasta aquí para decírtelo -le decía la chica suplicante. Luke resopló.
Luke: Bien, sólo -suspiró- no, entra -dijo haciéndose a un lado para dejar a la chica entrar. Me paré de la mesita de golpe al ver que era Aleisha McDonal la chica que estaba parada frente a mí.
Aleisha: Hola -me dijo tímidamente.
______: Hola -susurré mirándola confundida- ¿qué haces aquí? -le pregunté.
Aleisha: Vine a hablar con Luke -dijo seria. Asentí.
______: ¿Es algo grave? -le pregunté. Ella suspiró.
Aleisha: Luke, debes volver a Sydney -le dijo.
L&'_: ¡¿Qué?! -preguntamos alterados al mismo tiempo.
Luke: ¿Por qué? -le preguntó un poco más calmado.
Aleisha: Tu mamá... bueno... ella... -decía balbucueando. Suspiró y por fin habló luego de un rato- Ella... tuvo un accidente, Luke, y está grave en el hospital -susurró suavemente.
Luke: ¿Es broma? -preguntó- Dime que es una broma, Aleisha -dijo dejándose caer al sofá.
Aleisha: No, Luke, ella está -pausó y luego suspiró- muy mal -finalizó.
