Io

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— Esa es mi chica — dijo Percy levantando un pulgar con una sonrisa.

— ¿En serio? ¿le entiendes a Hera? — pregunté incrédula.

— ¿A qué nos enfrentamos? — preguntó Piper.

— Tenemos que sentarnos— dijo Annabeth.

Nos sentamos en un Starbucks. Y no compramos nada, porque es muy caro. Estúpidos precios.

— ¿Entonces...? — preguntamos todos al unisono.

— Bueno, Hera ha atormentado a muchas personas. Entonces creo que las almas de esas personas están buscando venganza, y como no pueden matar a la diosa te matarán a ti.

Yo estaba a punto de hablar cuando escuché una voz.

— ¡Chicos! — un chico rubio con ojos azules llegó junto a un chico con rasgos asiáticos.

— ¡Jason! — Piper saltó a los brazos de Jason y le dió un beso. Ay el amor.

— Jason— dijo Percy estrechando su mano.

Y después todos saludaron a Jason y a Frank, supongo que se llaman así porque los llamaron de esa manera. Yo me sentí irrespetuosa por no saludarlos pero sería algo así:
"Jason, hola, ¿cómo has estado?"
"¿Te conozco?"
"No"
Ven, no funcionaría.

— Supongo que eres nueva. — preguntó Jason. Y supuso bien.

— Si, y ¿tu eres?

— Me llamó Jason, y el grandulon que está a mi lado se llama Frank.

— Un gustó.— dije eso, aunque ya sabía que se llamaban así. La hipocresía.

— Cómo sea, ¿que hacen aquí? — preguntó Frank.

— Estamos en una misión, otra vez. Necesito vacaciones. — contestó Leo.

— Y ¿quién es tu madre o padre, pequeña? — preguntó Frank. Estaba a punto de contestar cuándo analicé más la pregunta, dijo pequeña. ¡¿Pequeña?!, ¡¿dijo pequeña?!, te puedes meter con mi cabello, te puedes meter con mi ropa, pero ¡nunca! te metas con mi estatura

— Hera.— dije ya calmada.

Ellos estaban shockeados, miraron a Percy cómo para que les dijera que es una broma, pero no recibieron nada.

— Este....— que incómodo.— Entonces Annabeth, dices que muchas almas me quieren matar por culpa de mi madre, cada día la odió más.

— Bueno, es solo una suposición pero es lo más acertado que tenemos.

— Tal vez podamos derrotarlos.— dijo Percy.

— No, no podrán. — dijo Jason. Pero no era la voz de Jason, tenía los mismos ojos que Will antes de que cayera en coma.

— ¿Jason? — preguntó Piper asustada mientras se alejaba de él.

— Nunca podrán derrotarnos.— volteó a mirar a Piper— Piper Mclean, ¿qué tal si mueres?

Cuando dijo eso agarró con una de sus manos el delicado cuello de Piper. Frank trató de someterlo pero a cambio muchas plantas de uva lo rodearon. Annabeth trató de quitarle a Piper pero lamentablemente le pasó lo mismo también le pasó lo mismo a Percy. Leo y yo éramos los únicos que no estaban rodeados de uvas.

— Beth— me llamó el poseído de Jason— tu pagarás lo que tu madre no ha pagado. Ah y recuerdas a Nico —cuando dijo eso apareció una imagen en mi cabeza. Era Nico llorando silenciosamente junto a Will, agarrándole la mano. Después esa imagen salió de mi cabeza.

— Nico...

— Yo no haré nada para matarlo, sus sentimientos lo harán.

— Io..— logró decir Annabeth a regañadientes.

¿Io? ¿Io? me suena, además de leer sobre la isla Ogigia, también leí un libro que se titulaba "Los celos de Hera", Io fue una amante de Zeus. Y Hera los descubrió y...¿qué más? Ammm y estuvo convertida en ternera por mucho tiempo gracias a mi "sabia" madre.

No se cómo derrotarla, es decir no tengo el poder de convertir a alguien en ternera ¿o si? y aunque lo tuviera, convertiría a el cuerpo de Jason en ternera, no a Io.

Cómo yo no actuaba Leo salvó el día. Quemó las plantas liberando de esa manera a Frank, Annabeth y Percy. Casi instantáneamente la mano de Jason se abrió soltando a Piper, pero Piper se encontraba muy mal, su cuello tenía marcada la mano de Jason y sus labios estaban morados. Jason, por otro lado, estaba inconsciente. Despertó y se agarró la cabeza.

— Jason, ¿eres Jason? — preguntó Percy sacando a contracorriente.

— ¿Qué pasó? Me duele la cabeza, ¿que hice? — después abrió los ojos cómo platos y volteó a ver a Piper.

— Piper, ¿qué te hice?— dijo agarrando a mi maestra abrazándola— Despierta, porfavor. Despierta.

— ¡Llamen a una ambulancia! — grité a la cajera que apenas se daba cuenta de lo que pasaba. La Niebla funciona.

La cajera sacó su celular y marcó temblando el número de emergencia. Cuando le contestaron habló de la situación, y después gritó: "Viene en camino".

— Piper, Piper, Piper...— decía Jason al borde de las lágrimas.

Después, llegó la ambulancia y se llevaron a Piper, Jason la acompaño.
Frank dijo que habían venido por oro imperial, así que se fue.

Otra pérdida, y yo seguía siendo igual de inútil. Nosotros no sabíamos que hacer. Habíamos perdido a Piper, y no sabíamos a dónde ir. Todo mal.

— Todo es mi culpa...— murmuré en un tono muy bajo, porque no quería que me escucharán, pero si me escucharon ¡Muchas gracias destino!

— No es tu culpa— dijo Leo.

— Si lo es, todo esto pasó por ¡mi! profecía, todo esto pasó por el pasado de ¡mi! madre, todo ésto paso por ¡quien soy yo!, en otra palabras es ¡mi! culpa.— estaba a punto de llorar. Además de inútil llorona.

— ¡¡¡¿Y  qué?!!!, ¡¿de qué sirve culparte?!, ¡¿ Will saldrá del coma?! , ¡¿Piper despertará?!, No. ¡De nada sirve culparte!, ¡Mejor piensa a dónde debemos ir ahora, y cómo resolveremos este problema! — gritó Annabeth enojada.

— Annie, estás siendo muy dura con ella...— dijo Percy.

Yo no sabía que hacer, otra vez. Annabeth estaba siendo sincera.

— Vamos al Olimpo, le diré a Hera que se encargué de sus problemas.

Pero no sabíamos los problemas que nos esperaban en el camino...

Escribir eso me dolió hasta a mí. XD

La hija de HeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora