La razón de mi felicidad ; Seven Kayne.

15

Yo: Buenos días - dije cuando me desperté.

Dam: Buenos días hermosa - dijo con una voz ronca que me estremeció ahr.

Yo: Me dejaste re loca anoche.

Dam: Cuando estemos solos podemos retomar la conversación - rió para luego darme un beso largo.

Yo: Voy a ver en qué andan los demás - me levanté y me fui a la otra habitación.

Justo sale Seven del baño, la puta madre.

Seven: Valentina, explicáme - me detuvo.

Yo: ¿Y yo que tendría que explicarte a vos?

Seven: ¿Posta salís con Dam?

Yo: Eso no te interesa.

Seven: Ya basta de esto. Yo sé que estás fingiendo para que me ponga celoso. Y sí, funciona.

Yo: Nadie quiere darte celos a vos - me miró y me pegó a la pared.

Seven: Escuchá, esto no te está haciendo bien. Tenés que decidirte de una vez por todas,
Si sé que aún me amás - en lo último susurró en mi oído ¿Por que me estremece que hagan eso?

¿Y si de verdad sentía cosas por Seven aún? No, imposible.

Yo: Escucháme vos, no podés andar haciendo de las tuyas a cada piba que se te cruce. Ya sé como jugás y no pienso caer en eso - volví a la habitación.

Dam: ¿Qué hacían los pibes? ¿Por qué demoraste tanto?

Yo: Ni si quiera los vi - murmuré.

Dam: ¿Qué? no me murmures, hablá de una vez.

Yo: Estaban boludeando nada más.

Dam: - asintió - ¿Sabés si hay comida en el refrigerador? - negué.

Yo: No, no hay.

Dam: Iré a comprar con los pibes ¿Vas?

Yo: Na, tengo una flojera.

Dam: Está bien, descansá. ¡WACHOS VENGAN! - gritó.

Dam: Vamos a comprar, así que compórtense.

Todos salieron, asi que bajé a la cocina y ahí estaba Seven.

Yo: ¿Qué hacés acá? ¿Por qué no saliste?

Seven: Nada, no quise ir. Preferí quedarme con vos - me tomó de la cintura.

Yo: Ya dejáme - me solté.

Seven: No, de acá no te escapás - me apegó más a él.

Yo: ¿Qué querés?

Seven: Recuperarte.

Yo: Así no lo lográs, dejáme tranquila.

Seven: Vos sabés que si lo estoy logrando y te encanta.

Yo: No, salí - estaba intentando besarme pero yo forcejeaba - soltáme, no quiero nada con vos.

Entró Mks

Mks: Adivinen quien tiene comid... SOLTALA SEVEN ¡DAM, VENÍ!

Dam: Ni se te ocurra tocarla - empujó a Seven.

Seven: ¿Tenés algún problema? - lo empujó de vuelta.

Dam: Sí, no la vas a lastimar de nuevo. Ya te dijo que no quiere volver con vos.

Khea: Eu Seven pará, ya le hiciste mucho daño a esta piba.

Seven: ¿Que te metés vos pelotudo? Calláte un rato.

Khea: A mí no me hace callar nadie, me tenés re podrido.

Khea le dió una piña a Seven, también se metió Dam a la pelea. Me encontraba en la peor situación, todos los pibes que he querido estaban peleando por mí, estaba indecisa porque sabía que tenía que elegir a uno. Este era mi problema y hoy, ahora, tenía que resolverlo.