El cliente - Choi Siwon

Capítulo 3

"Una sola caricia y puedo liberarte,
No tenemos porqué correr cuando estás sola conmigo."

The Weeknd- I feel it coming

Mientras caminaba obedeciendo el pedido, mandé mi mensaje de seguridad notificando que ya estaba con el cliente, si algo iba mal solo debía usar el marcador rápido. La terraza era enorme con una mesa y dos sillas sencillas pero que a simple vista parecían cómodas y tenía una preciosa vista de la ciudad. Londres tan encantadora y enigmática, ahora es mi refugio, mi intento de nuevo inicio, de nueva vida.

Me dejé llevar un poco por mis pensamientos, pero la piel de mi cuello amortiguó la voz de mi cliente. – Por cierto, soy Choi Siwon- dijo y me di la vuelta. Me dijo su nombre a la manera tradicional coreana y sonreí por ese hecho.
-Encantada, soy como bien sabes Alexa.

Miré su mano y llevaba dos copas largas con lo que imaginé era champagne y arrugué el gesto, me embriagaba muy rápido y por eso no tomaba "en mis horas laborales"

-¿Ese es tu nombre de trabajo?
-Mi alias. – le respondí de manera tranquila aceptando la copa pero no tomé de ella mientras el suavemente la acercaba a sus labios y la bebía mientras sus ojos volvía a mí, haciéndome sentir acalorada aun con la suave brisa primaveral que soplaba en la terraza. me veía obligada a usarla.
-¿No te gusta el champagne?- preguntó y lo noté inquieto... ¿tal vez?
-No en hora laboral- respondí con una sonrisa- Si tienes agua mineral sería perfecto.
-Pareces incómoda.
No podía negarlo- Sería difícil no estarlo cuando mi cliente ha dejado la cuenta abierta solo para estar conmigo.
-He reservado acompañantes antes pero tu misterio me hizo hacer esa excepción contigo.
-¿Mi misterio? -lo estudié de cerca. Estaba bien afeitado, con piel suave que parecía recién bronceada, pero no naranja. Ninguna línea de anillo de boda tampoco. Al menos era soltero.
Sus labios eran firmes, sus dientes incluso blancos. Una amplia mandíbula masculina. Su cabello suavemente despeinado ¿Qué se sentiría correr mis dedos a través de él?
-¿Por qué no aceptas clientes asiáticos?- dijo mientras tomaba la copa y me di cuenta que llevaba un reloj precioso que probablemente costaba más de lo que podría calcular.
-El champagne no hará que confiese la razón- le dije pícara.

La única cosa que podría competir con la vista de él era la vista exterior. Pero la vista nunca la tocaría, sus manos sí.

Una suave brisa nos recorrió en ese momento e inhalé aquel aire intentando dejar de comerlo con la mirada. Mentiría si dijera que no había tenido clientes atractivos, claro que sí. Pero este hombre era más allá, era como si su atractivo no solo fuera físico, como si un aura de elegancia y belleza lo rodeara.- Traeré algo para ti- dijo alejándose de mí y casi me podía imaginar estaba en mi antigua casa en Seúl, la joven hija de un juez esperando para salir a cenar con este hombre apoyado en su auto. Si mi vida hubiese seguido siendo como antes
¿Este hombre me miraría?

Pero ya no tenía esa vida, ya no tenía a mis padres y ahora soy Alexa.

Siwon rápidamente se unió a mí de nuevo con un vaso alto de agua y sonreí agradecida, al menos no se había molestado por cambiar sus planes. Le di un sorbo al agua y luego se puso a mi lado. La luz de la terraza bañaba su rostro destacando todas sus facciones cinceladas, como aquel lunar en la nariz.

Aunque aún no recibía mi pago, empecé a relajarme. Independientemente de lo que pasara, actualmente estaba en la suite Royal de uno de los hoteles más clásicos y elegantes de toda la ciudad y que podría darme una sensacional noche.
-¿Ahora si me dirás?
-¿Curioso señor Choi?

Tomé otro sorbo.

-Bastante -dijo en un tono burlón.-Alexa, conseguiré lo que quiero así te resistas ¿Qué piensas de la vista?