Sofía tomó una decisión y ya no se dejaría vencer nunca más.
El señor Cédric alcanzó a las niñas en el lago, Calista corrió a abrazarlo y Sofía se quedó observándolo con atención. Era un hombre muy sabio y su mejor amigo ¿Quién mejor que él para ayudarla?
~Señor Cédric ¿Cómo están las cosas en el castillo?
~Precisamente quiero hablar de eso contigo ¡Debes volver!, tus padres están muy preocupados y me da rabia decírtelo, pero ese príncipe mimado está haciéndose ideas en la cabeza.
~ ¡Debo hablar con él! Nuestro futuro corre peligro.
~¿Su futuro? ¿Acaso hay un futuro juntos?
~¡Pues claro! Él y yo nos amamos.
~Pequeña Sofía, prácticamente eres una niña, no debes pensar así.
~Puede que sea muy joven pero estoy segura de lo que siento.
~Entonces volvamos... susurró observándola con tristeza. Era una pena que la princesa comenzará a crecer pero tarde o temprano tenía que pasar.
De un momento a otro ambos llegaron a la torre, Hugo se encontraba estresado caminando de un lado a otro. Al verlo Sofía corrió hasta sus brazos para sentir su calor y cariño.
El príncipe se quedó en shock por unos minutos para después corresponderle el abrazo.~Hugo... Me alegra tanto verte, te extrañe mucho.
~Tambien te extrañe Sofía. ¿Dónde estuviste? ¿Cédric te llevo por la fuerza?
~Claro que no, él jamás lo haría, si tan solo le dieras la oportunidad podrías darte cuenta de lo maravilloso que es.
~Eso me parece difícil, creo que él y yo jamás podríamos llevarnos bien.
Debido al ruido todos llegaron hasta la torre encontrando a Sofía abrazada del príncipe.
Vaughn inmediatamente se acercó hasta ellos con una mirada de odio.
~Me alegra verte Sofía, estuvimos muy preocupados por ti.
~Gracias por todo Vaughn, ya me siento mejor, necesitaba despejarme un poco, ahora si no les molesta debo descansar, los veré más tarde.
La princesa caminó con pasos veloces hasta llegar a su habitación; allí se encontraba Calista esperándola.
~¿Cuándo llegaste? Exclamó con asombro.
~Puedo trasladarme a donde yo quiera, recuerda que soy una hechicera.
~Es verdad, ¿sabes?, estoy apunto de arreglar las cosas con Hugo, le diré a Jade todo lo que siento.
~Si... Por eso estoy aqui. No puedes alterar el futuro, eche una ojeada a tu vida si lo haces y creeme que se crearán más problemas. Al ver lo devastador que era decidí venir a advertirte.
~Calista... No puede ser tan malo.
~Lo es y cómo sé que no querrás hacer caso haré que olvides lo que viste en el lago, yo seré tu guia y te ayudaré para que las cosas se resuelvan de la mejor manera, siempre hay un acontecimiento que arregla todo sin necesidad de causar un caos, pero mientras no lo conozcamos debemos ser cuidadosas.
Sofía iba a quejarse cuando Calista movió su varita con decisión.
La princesa cayó dormida en un sueño profundo, despertaría hasta la mañana siguiente. La pequeña hechicera volvió a su hogar investigando en los antiguos libros de su abuelo, sabía qué podía arreglar el flujo del destino sin tener que llegar a los extremos funestos.
A la mañana siguiente Sofía sintió que los rayos del sol pegaban contra su cara. Jade había llegado muy temprano para hablar con Amber, lamentablemente la rubia no sabía que hacer, apoyar los sentimientos de su hermana o los de su amiga de la infancia.
Sofía caminó hasta la habitación de Amber y saludó cortésmente a su amiga. No recordaba nada de lo que había pasado en el baile, ni siquiera recordaba su encuentro con Calista, aún así algo la mantenía intranquila.
~Sofia estoy tan preocupada... Ya no sé que hacer para que Hugo me declare sus sentimientos, sé que me quiere, pero es muy penoso para decirlo.
~¿Por qué estás tan segura? Susurró sintiendo que sus palabras eran muy duras.
~Simplemente lo sé, aunque lo niegue diciendo que quiere a alguien más, sé que es solamente para hacerme sentir celos.
~Habla directamente con él, te explicará todo y será sincero contigo. Susurró con miedo.
~Gracias Sofía ¡Inmediatamente lo haré! Siempre me das los mejores consejos.
La azabache salió corriendo y Amber tomó el brazo de su hermana con tristeza.
~Lo siento mucho... pero es lo mejor. Una princesa jamás pierde la confianza de una amiga, además el caballero Vaughn podrá darte un futuro lleno de amor y felicidad, ¡estoy segura!, debes aceptar su propuesta.
~Si tanto te agrada ¿Por qué no te casas tú con él?, gritó saliendo de la habitación.
Al correr por el pasillo se topó contra el pecho de alguien, James la sostuvo por los brazos para evitar que se cayera.
~Sofi... ¿Qué ocurre? Te ves muy mal.
~No es nada James... Son solamente tontos problemas.
~¿Es por sir Vaughn?
~¿Qué sabes tú de eso?
~Solo sé que pidió tu mano en matrimonio, pero tú no lo quieres a él, además pronto cumplirás tus quince años y serás la reina del lugar.
~James... Yo ... Yo quiero a otro príncipe, pero no puedo decírselo.
~Por Jade, ¿verdad? No te sorprendas ¡Lo sé todo! Pero recuerda que muchas veces no se puede hacer feliz a todo el mundo, por otra parte tu felicidad es primero.
Calista observaba a la princesa a través de su bola de cristal, el hechizo había funcionado y Sofía no recordaba nada sobre su futuro, eso era bueno porque de esa forma podría salvarla del mal que la acechaba.
Sofía dió un último abrazo a su hermano y este le acarició el rostro.
~Sé feliz Sofi, no te amargues por cosas sin sentido.
~Te lo agradezco James, ¿A dónde irás ahora?
~Vere a Vivian, hay algo muy importante de lo que me gustaría hablar con ella. Contestó guiñándole el ojo.
Sofía sintió que su estómago saltaba de emoción, se imaginaba que era lo que quería decirle a su amiga y estaba feliz por ella.
Sus palabras habían hecho que un día gris y desolado se convirtiera en un lindo arcoiris colorido y lleno de vida.
Ahora solo tenía que aceptar la situación y dejar ser feliz a Jade... aunque eso le costará su felicidad.
ESTÁS LEYENDO
Entre el amor y la amistad (Amor de niños). (Sofia y Hugo)
Hayran KurguUna pequeña historia sobre las aventuras de Sofía y Hugo. El cambio de la niñez a la adolescencia puede ser muy duro y más cuando una de tus mejores amigas está enamorada del mismo chico que tú. Acompañen a Sofía durante esta nueva aventura. ~Tutti...