Nothing Is Impossible

Capítulo 36

Capítulo 36

Clarke había dejado a Lexa en la habitación, ya que a la castaña le había tomado un poco más de tiempo recomponerse de lo que acababan de hacer y es que la rubia no se había podido contener, desde que ambas comenzaron a salir de nuevo y a re-explorar la parte sexual de la relación, había momentos en los que su mente simplemente pensaba en una sola cosa y eso era en Lexa completamente desnuda, debajo de su cuerpo, gimiendo gracias a todo lo que ella le estaba haciendo.

Y es que con esos pensamientos le era demasiado difícil contenerse cada vez que tenia a la castaña delante suya, mucho más cuando Lexa la miraba de aquella forma, con esa pizca de nervios que le daba a entender que ya sabia que era lo que estaba por hacer, o por lo menos cuales eran sus intenciones.

Lexa sonrió cuando vio a Clarke allí junto a Lincoln hablando, como si se conocieran desde toda la vida, Lexa nunca imagino lo que se sentiría ver esa imagen, ver a Clarke en su casa, interactuando con su familia, siendo una más de ellos.

- Hermanita. – le dijo Lincoln cuando Lexa estuvo a su lado. - ¡Menuda cara traes!

- ¿Qué tiene? – pregunto frunciendo el ceño y llevo las manos hasta su rostro, su ceño se frunció aún más al notar como Clarke intentaba contener la risa. –

- ¿No te viste en un espejo? – el mayor le sonrió ampliamente. –

- ¿Qué tengo? – preguntó casi con exasperación y se acerco a unos de los espejos que había en la sala de estar. – ¡Dime, Lincoln! – exigió al ver a su hermano a su lado conteniendo la risa. –

- Tienes cara de recién follada. – le susurró al oído y comenzó a reírse a carcajadas cuando vio como las mejillas de Lexa se habían puesto completamente rojas al instante. –

- ¡ERES UN ESTUPIDO! – le grito la castaña mientras lo empujaba haciéndolo caer en el sofá e intento golpearlo, pero Lincoln fue mucho más rápido y logro sujetarle las manos. –

- ¡Niños! – el grito de Becca hizo que ambos se quedaran quietos y miraran a su madre. - ¿Qué sucede?

- ¡Es que Lexa!...

- ¡CALLATE! – le volvió a gritar la castaña. –

- ¡Alexandria! ¡Lincoln! – ambos hermanos se pusieron de pie rápidamente. - ¿Qué manera de comportarse es esa?

- Lo siento. – dijeron ambos al unísono. –

- Discúlpalos Clarke, querida. – le dijo esta vez a la rubia. – a veces se comportan como dos niños pequeños. – Becca negó con el rostro. – hagan algo productivo y ayúdenme con la mesa. –

- Si señora. – dijeron los dos y caminaron detrás de Becca. –

- ¿Si señora? – susurro la rubia en el odio de Lexa. –

- Esto es tu culpa. – susurro de la misma manera. –

- No te estabas quejando hace unos minutos atrás. –

- ¿Tú también? – la castaña frunció el ceño. –

- Te ves tan mona. – Lexa negó con el rostro y continúo caminando detrás de su madre y Lincoln. –

La cena estaba pasando demasiado lenta, había mucho silencio en la mesa, Becca parecía estar bástate enfadada con sus hijos y Gustus solo intentaba sacarles una sonrisa a todos, sabia que sus hijos no se reían por respeto a su madre, pero también sabía que no le faltaba mucho para romper aquel bloque que Becca había armado.