Capítulo 45.

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Narra Paula.

La noche sería bastante larga, una larga experiencia. Tenía que ver como reaccionaba Christian cuando estaba junto a Alice. Ambos hablaron durante todo el viaje como si no estuviese en ese lugar.

-Escucha, no estés nerviosa- Susurró Christian cuando llegamos a su casa y bajamos del coche. Alice se nos adelantó -Sólo actúa como ti misma-

-No estoy nerviosa- Tomé su mano y la apreté -Tu debes calmarte un poco-

Él solo asintió y me dirigió a la entrada de la casa de su madre. La casa era acogedora, no demasiado grande pero realmente hermosa. Mi casa debía ser más amplia por la cantidad de personas que vivíamos en ella, después de todo éramos cinco. Pero la casa de Christian tenía un toque hogareño que me trasmitía paz y mucho amor.

No había forma de que me sintiera incomoda.

En la sala, se encontraban dos señoras sentadas hablando. Alice estaba acomodada en al lado de uno de ellas. Era perfecta la imagen, ella encajaba en este lugar y otra punzada de duda recorrió mi cuerpo.

No fue la primera vez en la noche en que me lo pregunte. ¿Estaré haciendo bien las cosas? ¿No tendría que de una vez por todas reconocer lo que me pasa? Tenía un gran conflicto con mis sentimientos. Quería a Christian y adoraba pasar tiempo con él. Era feliz a su lado. Pero los sentimiento por Joaquín estaba allí y no sabía qué hacer con eso.

-Mamá- Christian llamo la atención de una de las mujeres -Ella es Paula, mi novia- Nos acercamos un poco más a ellas -Paula, ella es mi mamá-

En ese momento supe de donde había heredado los ojos verdes tan expresivos Christian. La mujer delante de mi tenía una sonrisa tranquila y amigable. Sus ojos verdes presentaban una expresión de confusión, pero no por eso dejo la alegría que en algún lugar albergaba.

-Es un placer conocerla- Sonreí tendiendo la mano para saludarla -

-Oh, es muy educada- La sonrisa le llega a su mirada y todo rastro de confusión desaparece -Dime Helen por favor-

-Muy bien Helen- Sonreí -

-A Alice ya la conoces- Alice me sonríe y yo le devuelvo la sonrisa -Y ella es Catherine, su madre-

-Y una muy buena amiga de Helen- La mujer, rubia al igual que su hija, se presenta amable -Es un placer conocer a la chica que hace feliz a Christian-

-Muchas gracias- Poco a poco sentí como el rubor subió desde mi cuello, no me acostumbraba a recibir cumplidos -

-Tras las presentaciones- Dice Helen poniéndose de pie -Podemos pasar a comer-

-¿Y papá?- Los ojos de Christian muestras un poco de enojo -Le pedí que viniera temprano hoy, ¿No vendrá?-

-Llamo hace un rato cariño- Su madre sonrió con simpatía -Dijo que llegaría tarde, que había un gran lío en la oficina-

-Un gran lío en la oficina- Negó con frustración, me acerqué a él para darle mi apoyo -Siempre lo mismo-

-No te hagas problema- Susurré y sus ojos me miran -Está todo más que bien-

Christian me miró por unos instantes, su malestar se reflejaba en sus ojos verdes y me dolía el alma de solo verlo en ese estado. Apreté su mano con fuerza para mostrarle mi apoyo. Poco a poco se recobró y nos unimos al resto de los presentes para la cena.

Catherine ayudaba a Helen con la mesa mientras que Alice se encargaba de servir los vasos. El aroma de la comida me hacía agua la busca, ahora sabía de donde Christian había sacado sus habilidades culinarias. Una gran sonrisa apareció en mi rostro.

Regresa junto a mi. [EDMMA #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora