Capítulo 4

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-Parece que tenemos a alguien nuevo hoy. - Saludó Trent con una mano mirando sobre mi hombro.

Quité la vista del partido de baloncesto y seguí sus ojos hasta toparme con Peter, arrastraba a alguien por detrás con una mochila negra. Este alguien estuvo a punto de caer por las gradas cuando el que lo sostenía se detuvo de repente; mantuvo el equilibrio y volteó hacia nosotros acomodándose la mochila y la chaqueta.

-Debíamos haberlo visto antes ¡Este tipo es genial! Lo juro. - Ailish sacó su lolli pop de la boca y apuntó a Pet con una sonrisa.

-¿De qué rayos hablas? -

-Steve, es el tipo más cool que he conocido. - Lo acercó hacia él y le revolvió el cabello. El susodicho sólo se arregló de nuevo. -El sábado, en la fiesta, cuando todos ustedes me dejaron solo. - Nos miró con fingido enfado. Yo solté una risa. -Este tipo fue mi salvación. Muy callado y con cara de serio, pero miren que sabe divertirse. -

Él se encogió de hombros. -Sólo me dejé llevar. -

-¿Habías ido a alguna fiesta de ese estilo? - Ail no pudo seguir con su paleta porque Trent se la había arrebatado hacía un momento.

-¿Mi graduación cuenta? - Se frotó el oscuro cabello con aire incómodo. Todos soltamos a reír.

-¡Imposible! - Gritó aún entre risas el moreno.

Volví la vista al juego mientras incorporaban a Steve a nuestro grupo. Con el rabillo del ojo pude observar que me miraba, traté de no sonreír de lado. Esto sería muy divertido.

En clase de Literatura estaba sentada con los auriculares puestos y mirando a la ventana apoyando el codo en el marco, mi mirada paseaba entre los árboles y una paz llenaba todo mi ser; las clases habían sido muy fáciles hasta ahora y no hacía más que relajarme con mis amigos, la fiesta de hace dos días dió mucho de qué hablar (y de muy buena manera), siendo la primera novatada al nivel de las fiestas Greengrass.

Con el rabillo del ojo divisé a una figura de ropa negra; Steve tomaba su lugar a un lado del mío. Me saqué los audifonos y cuando me incorporé cerca de él, se recorrió a la otra punta de la mesa. Lo miré totalmente confundida mientras me veía de arriba a abajo.
No pude evitar soltar una carcajada que hizo que todos en el aula voltearan intrigados. El aire me faltaba y golpeaba la mesa con fuerza doblándome por el estómago.

-No me lo creo. - Grité luchando por tomar aire. No se me ocurrió nada más que seguir riendo.

-¿Qué es tan gracioso, polluela?- Gritó Trent. Lo miré con lágrimas y sin detenerme.

-¡Cuentanos el chiste! - Todos comenzaron a hablar al mismo tiempo y subían la voz cada vez más.

Miré a Ailish quien en señas me pregunto "¿Qué pasa?", Yo le respondí un simple "Olvídalo".
En ese mismo momento el profesor llego casi tirando la puerta mientras gritaba que guardaran silencio. Lanzó los papeles en el escritorio y se puso a buscar un libro en el casillero. Era obvio que estaba molesto por llegar tarde.

Tapé mi boca mientras me calmaba y puse mi cabeza sobre la mesa para mirar al chico que no dejaba de mirarme como si hubiera perdido completamente el juicio. Y tenía razón.

-Perdona. - Traté de no volver a reír. -Fue muy gracioso. - Me incorporé.

-¿El qué? - De verdad que no entendía.

-Es por la fiesta ¿no? - Volteó a la pizarra donde estaba ya escrito el nombre de un libro que había que leer para el final del parcial.

-No se de qué hablas. -No dejó de mirar al frente y volví a apoyar la mejilla en la madera.

Bad bitchWhere stories live. Discover now